El Senado ya dio media sanción a la ley de movilidad jubilatoria. Un verdadero robo. Una fórmula que no resolverá sus problemas, los profundizará. Para repudiarla, el FIT Unidad marchará al Congreso el 22 de diciembre.
Escribe Claudio Funes
Mientras la marea verde llegaba al Congreso para imponer la legalización del aborto que se debatía en Diputados, la Cámara de Senadores daba media sanción a la nueva fórmula de movilidad jubilatoria, con algunas modificaciones.
Tras el escándalo que desató el anuncio de que el miserable 5% de incremento para diciembre sería tomado a cuenta del aumento de marzo de 2021, los senadores maquillaron el ajuste exigido por el FMI.
Derogaron el artículo 6°, de esta manera en marzo se cobrará el aumento correspondiente con el 5% incluido. El proyecto enviado por Alberto Fernández contemplaba dos aumentos por año, ahora serán trimestrales. Por último, de los dos índices, el de Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (Ripte) que realiza el Ministerio de Trabajo y el Índice Salarial del Indec, se tomará el mejor.
¿Con estas modificaciones la nueva fórmula será favorable a los jubilados? Afirmamos que no. Veamos por qué.
Para calcular los aumentos de marzo, junio y septiembre se suman el 50% de los aumentos salariales y el 50% de la recaudación de la Anses. Pero en el incremento de diciembre el cálculo cambia. Aparece la recaudación total anual de la Anses incrementada en un 3%, que actúa como límite o techo. Si los salarios de los trabajadores en actividad aumentan más que la recaudación de la Anses, siempre descontados los aumentos de marzo, junio y septiembre, los jubilados cobrarán según la recaudación. Si la recaudación anual aumenta más que los salarios, cobrarán el porcentual de incremento de estos últimos.
La fórmula está diseñada para que los jubilados no participen de la mejora de los salarios ni de la mejora del crecimiento de la recaudación de la Anses. Al final de cada año siempre perderán en relación con alguna de estas variables, porque se toma la peor. Así, los jubilados solo participarán de las pérdidas de la recaudación o de la pérdida de valor de los salarios, nunca de sus incrementos. La nueva ley no resolverá sus problemas, los profundizará.
Agreguemos dos cuestiones que no son menores. La recaudación de la Anses será un dato poco transparente, informado por la peronista kirchnerista Fernanda Raverta, y los aumentos salariales, negociados por la burocracia sindical peronista, serán a la baja. Tienen los flancos cubiertos.
Ya vimos cómo la fórmula, aun con sus cambios cosméticos, es un engaño, pero no es el único. ¡La nueva ley de movilidad no toma en cuenta la inflación! Un verdadero flagelo para el pueblo trabajador y los sectores populares.
Según se desprende del Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM) de octubre, elaborado por el Banco Central, el “mercado” espera una inflación de 48,9% en 2021. El ingreso de los jubilados estará muy por detrás del costo de vida.
A pedido del FMI, el gobierno de Alberto Fernández no resuelve el problema de fondo, la jubilación mínima, ni la recuperación del 40% perdido en los últimos tres años.
Con el incremento de 5% otorgado en diciembre por decreto de Alberto Fernández, la mínima pasa de 18.128 pesos a 19.035 pesos, ¡907 pesos de aumento, 30 pesos por día! Menos que una limosna.
Son 4.4 millones los jubilados que cobran esta miseria que solo cubre el 38% del valor de la canasta básica del jubilado, que en noviembre ya estaba en 49.000 pesos.
Para los jubilados no hay mejoras, hay ajuste. Con los aumentos por decreto el gobierno ahorró 100.000 millones de pesos y en esto todos están de acuerdo, incluso la oposición patronal.
Debemos enfrentar este nuevo saqueo con acciones de repudio, como la radio abierta que el viernes 11 de diciembre llevaron adelante, frente al Senado, distintas agrupaciones de jubilados, entre las que estaban nuestros compañeros de la Unión de Trabajadores Jubilados en Lucha (Utjel)
Solo la izquierda apoya el genuino reclamo de los abuelos y se opone a esta ley. Así lo expresarán en la Cámara de Diputados nuestro compañero Juan Carlos Giordano (Izquierda Socialista) y Nicolás del Caño (PTS). Por ello el día 22 de diciembre a las 17.30 el FIT Unidad realizará una concentración y acto en el Congreso para rechazar este robo.
Invitamos a las organizaciones de jubilados y a los trabajadores activos a dar juntos la pelea.