Escribe Cristian Luna, candidato a diputado nacional Tucumán por Izquierda Socialista FIT Unidad
La provincia de Tucumán es gobernada por peronistas desde 2003. En tres oportunidades por Alperovich y, desde 2015, por Juan Manzur. Por eso resulta escandaloso que prometan salud, trabajo, educación o esperanza de una mejor vida cuando los que han gobernado estos últimos dieciocho años fueron ellos.
La desocupación en la provincia es la más alta del NOA, 11 por ciento. De ese porcentaje, 80% lo componen mujeres y jóvenes. La pobreza alcanzó el 41,5% y la indigencia llegó a 8,1 por ciento. El sueldo en blanco promedio es de 35.000 pesos, con una canasta que ronda los 100.000 pesos. Los 50.000 trabajadores del limón ganan aún menos y solo 50% está en blanco. Más de la mitad de la población activa trabaja en negro o es cuentapropista.
En campaña, Manzur y Jaldo (gobernador y vice) se pelean por prometer más y mejores cosas. ¿Por qué no lo han hecho hasta ahora si gobiernan ellos?
Por el lado de Cambiemos, Alfaro (intendente de San Miguel de Tucumán), Cano (radical PRO) y Campero (intendente de Yerba Buena que no logró acordar con el hijo del represor Bussi) también prometen que van a resolver todos los problemas, que son mejores que los que nos vienen gobernando. ¡Pero se olvidan de que fueron gobierno cuatro años a nivel nacional!
Ninguna de las opciones patronales, el peronismo en todas sus formas, y el macrismo en las suyas, le brindará alguna solución al pueblo tucumano. Votá a la izquierda que se une. Votá al FIT Unidad lista 1A, los únicos que proponemos soluciones de fondo. Por eso peleamos, entre otras cosas, por la reapertura de ingenios y textiles bajo control de sus trabajadores, el blanqueo de los trabajadores del limón, el pase a planta permanente de todos los contratados en el estado provincial y por un sistema de salud estatal único y centralizado, opuesto a la privatización de la salud. La plata para llevar adelante estas medidas saldrá del no pago de la deuda externa y la implementación de un verdadero impuesto a las grandes fortunas.