Escribe Olga Ortigoza, directiva Suteba La Matanza
En La Matanza la Celeste perdió por 30 votos. Pero, gracias al fraude, dicen que ganó por 70. La desmovilización general y la desafiliación impactaron y no se pudo derrotar contundentemente esta estafa, con una masiva votación multicolor.
La Azul y Blanca (PCR) hizo lo suyo, ya que rompió la Multicolor y se presentó con la Néstor Kirchner, sacando 600 votos. Aunque la mayoría de sus votos son de sectores del Frente de Todos que difícilmente votarían a la Multicolor, también un sector los votó porque sus dirigentes eran reconocidos directivos de la Multicolor.
Nuestra lista fue debilitada en estas elecciones. Después de la pandemia, además de la salida de la Azul y Blanca, agrupaciones importantes de Rompiendo Cadenas como La Fossati, Docentes de Base o la Coral (PSTU), directamente desaparecieron y algunas ni candidatos presentaron. La campaña Multicolor recayó, entonces, en Docentes en Marcha (Izquierda Socialista), Tribuna Docente (PO) y, en menor medida, el PTS.
Pero lo determinante fue el fraude. Ganamos en casi todas las escuelas y perdimos en las urnas de sede y jubilados. En la urna de jubilados que impugnamos, la presidente de mesa fue al baño con la urna abierta y perdimos por 100 votos. ¡Ni la presidente de mesa es afiliada! Votaron centenares de personas que no son docentes y hasta se puso una urna en la UOM, el sindicato metalúrgico. La Junta Electoral no dio lugar a esa y a todas las impugnaciones que hicimos y estamos reclamando en el ministerio de trabajo.
Con el paro seccional y las movilizaciones masivas por infraestructura y de las maestras jardineras una semana antes de las elecciones, se abrieron expectativas que pudiera cambiar la situación de desmovilización después de dos años de pandemia. Pero lo que primó fue que los y las docentes no fueron a votar.
Llamamos a seguir la campaña de rechazo al fraude en La Matanza y que se respete el voto de la docencia en las escuelas.