Escribe Pablo Almeida, delegado general ATE Ministerio de Economía
A partir del decreto 84/2023 el gobierno puso en cuestionamiento la continuidad laboral de las y los trabajadores del estado que ingresaron durante 2023. Por eso a partir del primer día de este año comenzaron los despidos en la mayoría de las reparticiones del estado nacional. En la Ciudad de Buenos Aires, en Córdoba y en otras provincias los distintos gobiernos aprovecharon para despedir. A esto se suma que solo se renueva por noventa días al resto del personal con modalidades de contratación precarias que asciende a cerca del 75% del total. Desde Estatales en Marcha rechazamos todos los despidos. Como dice la Junta interna de ATE Mecon: Ni un despido. Ni ahora, ni en 90 días, ni nunca.
Pero los despidos no son la única forma en la que se ataca a quienes trabajamos en el estado. El ataque al salario a través de la inflación, que se proyecta por encima del 150% entre diciembre y marzo, hace cada día más difícil llegar a fin de mes.
La CGT se vio obligada a convocar a una movilización a Tribunales el 27 de diciembre pese a que algunos gremios como UPCN boicotearon la participación masiva en la misma. Y al día siguiente la CGT llamó a un paro nacional para el 24 de enero al que se sumaron las CTA. Las y los estatales tenemos que tomar en nuestras manos este paro y movilización para que sea un gran hito en la pelea contra el ajuste Milei y el FMI.
Desde la conducción de ATE Nacional se señaló correctamente que la convocatoria es lejana en el marco de los despidos que ya se descargaron en el Estado. Sin embargo la jornada de lucha, sin paro, convocada para el 15 creemos no está a la altura del ataque que venimos recibiendo y del ajuste que se avecina. Necesitamos una gran acción que convoque a las y los estatales a manifestarse en forma masiva en la Plaza de Mayo o algún punto de concentración del poder político en nuestro país. Una acción que unifique las peleas que han comenzado en los distintos sectores.
En este contexto es fundamental impulsar en cada repartición asambleas, reuniones de delegados y activistas y todo tipo de acciones de difusión para preparar la lucha desde abajo. Es imprescindible que cada estatal entienda que el gobierno viene por todo y que tenemos que estar todos y todas para frenarlo. Y a su vez recuperar la coordinación entre las juntas internas y cuerpos de delegadas y delegados combativos de nuestro sindicato como Mecon, Trabajo, Garrahan, Indec, Incaa y todos los sectores que se planteen la necesidad de impulsar un plan de lucha elaborado democráticamente desde cada sector de laburo para frenar los despidos y el ajuste del gobierno y el FMI.