Escribe Juan Carlos Giordano, diputado nacional electo Izquierda Socialista/FIT Unidad
Juan Grabois dice que el formato de alianza que propone con su frente anti Milei “se hizo en dos momentos de la historia: la Hora de los Pueblos, con Juan Carlos Onganía, y la Multipartidaria, durante la última dictadura cívico militar, y ambas precipitaron salidas democráticas” (La Arena, 29/1.
Para Grabois, la Multipartidaria trajo la democracia, cuando fue la lucha del movimiento obrero y de masas la que tiró abajo a la dictadura genocida de 1976. La Multipartidaria fue lo contrario a lo que dice Grabois. No precipitó ninguna “salida democrática”. Caído Lepoldo Fortunato Galtieri, los militares con el aval del PJ, la UCR y los partidos burgueses unidos en la Multipartidaria decidieron que asuma Reynaldo Bignone, tratando de desviar la movilización de las masas hacia el terreno de las elecciones.
Sobre el otro antecedente que menciona Grabois, recordemos que fue el glorioso Cordobazo de 1969 el que hirió de muerte a Onganía y posteriormente a Levingston, no el frente de partidos burgueses denominado La Hora del Pueblo conformado entre el peronismo, representado en ese momento por el enviado de Juan Domingo Perón, Jorge Daniel Paladino y la UCR con Ricardo Balbín, entre otros. La Hora del Pueblo avaló la designación del radical Arturo Mor Roig como ministro del Interior del gobierno militar. Luego se dio el GAN (Gran Acuerdo Nacional), un acuerdo pactado entre Perón, Balbín y el general Agustín Lanusse. La vuelta del general fue para intentar frenar el ascenso obrero y popular y mantener las bases del sistema capitalista.
En ambos casos, fueron las luchas obreras, estudiantiles y populares los que crearon las condiciones para derribar a las dictaduras e imponer las libertades democráticas. Lo opuesto a lo que dice Grabois.