Escribe Guillermo Sánchez Porta, dirigente nacional de Izquierda Socialista/FIT Unidad
14/6/2022
Una delegación de organizaciones piqueteras combativas encabezada por el dirigente nacional del Partido Obrero y el Polo Obrero, Eduardo Belliboni, se entrevistó el pasado 8 de junio con la CGT. Fueron recibidos por el titular de la Secretaría de Políticas Económicas y Sociales, Omar Plaini, estando ausentes los tres integrantes de la Mesa Nacional (Pablo Moyano, Héctor Daer y Carlos Acuña). También se reunieron con la CTA Autónoma-Cachorro Godoy.
La presencia y política de la delegación piquetera generó un debate crítico entre las fuerzas de izquierda que integramos el FITU. ¿Es equivocado que dirigentes combativos se reúnan con la cúpula de la CGT? Para nosotros no. Lo importante es qué se plantea allí, cuál es el objetivo y qué conclusiones se les trasladan a los trabajadores y luchadores sobre la misma.
Una política equivocada del PO hacia la CGT: del desconocimiento a la burocracia, a una táctica que le termina lavando la cara y confunde a los trabajadores
El 1° de Mayo en Plaza de Mayo Belliboni (PO) denunciaba a la CGT: “son unos traidores que nunca lucharon por los desocupados. No les interesa el trabajo genuino. Utilizan a los desocupados para presionar por salarios a la baja”. Una denuncia correcta. Pero según informó el propio Belliboni luego de la reunión, nada de eso le dijo a la CGT. Belliboni declaró en la puerta de la sede de Azopardo: “Hicimos el planteo de que es necesario luchar por el salario y empujar un plan de lucha nacional y un paro activo en todo el país”. “Es importante que la CGT retome la organización de los trabajadores por sus reivindicaciones”. “Que dejen de lado declaraciones sobre los problemas políticos y plantee los problemas de los trabajadores, como el salario y la desocupación”. Si como informó Belliboni ese fue el tono de la reunión, no coincide con sus caracterizaciones sobre la traidora CGT.
Más equivocadas nos parecen las conclusiones de la reunión, dichas por Belliboni: “La CGT acompaña el mismo diagnóstico sobre la situación de los trabajadores y el país”. “Hay un debate dentro de la CGT, están discutiendo una movilización”. “Se está empezando a escuchar la voz de los trabajadores”. “Es un paso en el sentido de que rompan el inmovilismo y la quietud de la tregua.”
Como se ve, no hubo ni denuncia, ni exigencia a la burocracia. Solo un “planteo” de preocupaciones y puntos de vista diferentes. Con la equivocación de considerar a esa reunión como “un paso adelante” porque la CGT estaría debatiendo alguna acción nacional en defensa de los trabajadores, cuando lo que han dicho es que podrían llamar a una marcha “contra los empresarios” y en apoyo al gobierno nacional.
La postura de PO termina siendo un lavado de cara a la burocracia, generando expectativas de que la CGT “está empezando a escuchar la voz de los trabajadores” o estaría por tomar medidas de fuerza en defensa del pueblo trabajador. Nada más alejado de la realidad.
Es evidente que hay un cambio de postura en los dirigentes sindicales y piqueteros del PO, que vienen negándose a exigirle a la CGT el llamado a un paro general, y ahora pasan a no denunciarla y cifrar expectativas en sus dichos. Su política equivocada hacia la CGT ha generado polémicas al interior del Plenario Sindical Combativo (PSC, que integramos juntos), sobre la táctica a tener contra la burocracia sindical. Durante años los dirigentes del PO se han negado a que el PSC le exija a la CGT y CTA que llamen al paro nacional y a un plan de lucha. Quienes tenemos la postura de llamar a que los trabajadores le exijan desde las asambleas, cuerpos de delegados y Comisiones Directivas a que la burocracia rompa el pacto con el gobierno y las patronales y llamen al paro general, chocábamos con la negativa de los dirigentes del PO. Consideraban que exigirle a la CGT era capitular a burócratas traidores, “lavarles la cara”. Incluso cuando la burocracia de la CGT convocó a paros generales (en los últimos años de Cristina Kirchner presidente y los primeros de Macri), los compañeros de PO consideraban que había que centrar la política en la crítica a la burocracia, en vez de en la exigencia de que le dieran continuidad con un plan de lucha nacional para derrotar el ajuste del gobierno, como hacíamos desde Izquierda Socialista.
Los compañeros del PO venían planteando que el paro general debe ser convocado “desde abajo”, desconociendo a la burocracia sindical. Últimamente estaban en una campaña de organizar la huelga general desde los movimientos piqueteros, buscando la unidad con los trabajadores combativos, sin exigírselo a la CGT. Ahora, con la cita con la CGT, han pasado a una política opuesta, también equivocada.
Todas las alas de la CGT están sosteniendo al gobierno. Hay que denunciarlas y exigirles que rompan su pacto y llamen al paro general y plan de lucha.
No es que como dijo Belliboni que el problema de la CGT es que “haga declaraciones políticas”. El problema es que su política es apoyar al gobierno y al pacto que firmó el Frente de Todos con el FMI, que significa más ajuste, hambre, robo salarial y dependencia. Hubiera sido bueno que la CGT se pronunciara en contra de ese pacto y denunciara los pagos de la deuda. Pero su política es la opuesta. Por eso no es real que “coincidan con el diagnóstico de la situación”. Ni que estén debatiendo salir de la inacción y ponerle fecha a un paro nacional o jornada de lucha alguna. Todas las alas de la CGT apoyan y pactan con el gobierno. Por eso se niegan a una medida nacional.
Las luchas que se están dando salieron a pesar de la burocracia, en general por conducciones combativas, como los paros de los ferroviarios del Sarmiento, docentes de Ademys o la enorme lucha del SUTNA. Esta nueva táctica hacia la CGT llevó a los dirigentes del PO a no poner como punto central en su cita la exigencia de que apoyen las luchas, en especial la enorme huelga de los trabajadores del neumático, donde además PO tiene a su principal dirigente.
Otras luchas se están dando desbordando a la burocracia, como la de docentes bonaerenses por gas en las escuelas, la enorme rebelión triunfante de la docencia sanjuaninas o la de estatales, docentes y las y los trabajadores de la salud de La Rioja, por ejemplo. Luchas que se están dando a pesar de los burócratas de la CGT y sus aliados provinciales. Decirles a los trabajadores que la reunión fue positiva dando a entender que la CGT está debatiendo alguna acción, desarma a los luchadores.
Para lograr que la CGT convoque a una huelga general debemos impulsar las luchas desde abajo, apoyarlas y coordinar las que se dan. Y en cada una de ellas, además de denunciar el rol capitulador de la CGT y CTA, hacer votar la exigencia a que rompan su pacto con el gobierno y llamen al paro nacional. Sólo así podremos lograr que la CGT se vea obligada a llamar a una medida de fuerza nacional.
Llamamos a los compañeros de PO a que sigamos juntos, como siempre, apoyando con fuerza todas las luchas en curso. Y a que llamemos desde el Plenario Sindical Combativo al conjunto de los trabajadores a denunciar y a exigirle a la CGT que rompa su pacto con el gobierno y llame a un paro nacional y plan de lucha por todas nuestras reivindicaciones y contra el ajuste del gobierno y el FMI.