Estamos ante una convocatoria histórica, que es reflejo de la lucha que se dio en 2024 contra el gobierno ultraderechista de Javier Milei en todo el país. Desde marzo estudiantes docentes y no docentes venimos peleando en defensa de la universidad pública con hitos como la marcha del 23/4 y la del 2/10. Ante la ratificación del veto a la Ley de Presupuesto universitario el movimiento estudiantil se despertó tomando centenares de facultades, que desde los espacios independientes y combativos acompañamos, con acciones como fue la masiva jornada de clases públicas en Plaza de Mayo impulsada por la AGD-UBA.
Nuestra facultad fue parte de esta batalla desde el principio, con la certeza que en el marco de un ataque generalizado contra la gratuidad de la educación superior, el gobierno libertario entiende como particular antagonista a las Ciencias Sociales. Milei quiere universidades, pero universidades al servicio del mercado y de las multinacionales, en las que se enseñe cómo hacerle ganar más plata a los sectores más favorecidos de este sistema. Universidades que no cuenten con ningún tipo de apoyo económico para que les estudiantes de las familias más empobrecidas puedan sostenerse en la cursada. Universidades que se sostengan con salarios de miseria y la mayor precarización laboral posible, y en las que se empiece por cobrar a les inmigrantes, en el camino de cobrarle a todes les estudiantes.
Si entendemos eso, tenemos que tener claro entonces porqué Sociales tiene que ser una trinchera de lucha contra Milei y su plan de ajuste al servicio del FMI y el pago de la deuda.
Balance y perspectivas
El año estuvo caracterizado por la pulseada entre brutalidad del ajuste presupuestario y la resistencia de la comunidad universitaria. La constitución del Frente Gremial (FG) con las conducciones nacionales de las CONADUs, FEDUN, FATUN, y la Federación Universitaria Argentina, significó la posibilidad de poder contar con medidas de fuerza y convocatorias unificadas, pero al mismo tiempo terminó transformándose en un freno cada vez que la lucha tendió a masificarse. Después de la marcha del 23 de abril, el FG junto al Consejo Universitario Nacional convocaron a desmovilizar porque se habían conseguido los fondos para funcionamiento y a confiar en el Congreso para la discusión salarial. Después de la marcha del 2 de octubre y las 100 facultades tomadas, cuando comenzó a verse la posibilidad de que el gobierno modifique las pautas salariales que se venían sosteniendo (con el pago de la “Garantía Salarial”), se llamó a descomprimir y volver a confiar en la negociación parlamentaria, a pesar de que se trata del mismo Congreso que apoyó el veto de la Ley de Financiamiento Universitario.
Desde nuestra intervención estudiantil, docente y no-docente en este proceso de lucha, entendemos que la fuerza que le dio al reclamo la entrada del movimiento estudiantil, todavía no está agotada frente a lo que queda del año, por eso hay que seguir impulsando un plan de lucha. Además, estamos frente a una perspectiva donde tras el 6,8% decretado en el último mes, no hay ninguna nueva paritaria convocada para el resto del año, cuando en el Estado se está ofreciendo en torno a un 1% (la cuarta parte de la inflación). Es por eso que instancias como esta Asamblea Interclaustros tienen que debatir las formas más inteligentes y contundentes de sostener el Conflicto y no es momento de llamar a “cuarteles de invierno” (de verano) para recién volver en marzo de 2025 al reclamo. ¿O acaso alguien confía en que el gobierno va a actualizar debidamente los salarios los meses por venir?
A su vez, entendemos que es un callejón sin salida seguir depositando el foco del reclamo en el Congreso donde, sobre la base de que el gobierno dice que la regla de oro de su presupuesto es que primero está la deuda, pueden terminar negociando plata para las universidades a costa de partidas de jubilaciones, salud, vivienda, ambiente, obras públicas o derechos democráticos como el financiamiento de los partidos políticos.
Reclamamos un aumento de emergencia ya acorde a la inflación anual para todas las categorías de docentes y no docentes, en base a una partida extraordinaria que también incluya las becas y ayuda económica para les estudiantes que están abandonando la cursada y boleto educativo nacional. Plata hay, en los pagos de la deuda, en los beneficios impositivos a los ricos, en las exenciones impositivas a las mineras y petroleras.
¿Qué hacer desde Sociales?
Vivimos en el último mes un proceso de organización en nuestra Facultad cómo no veíamos desde el año 2018. Las asambleas estudiantiles, la articulación en las clases públicas, cortes de calles, semaforazos y movilizaciones unieron a las distintas gremiales en la acción, más allá de las diferencias concretas que existen entre quienes les damos vida a cada una de ellas. Creemos que hay que reivindicar ese proceso y que la convocatoria de esta Asamblea Interclaustros debiera ser una instancia a consolidarse y seguir sirviendo a la organización de la facultad para una lucha muy difícil contra el gobierno.
En ese marco, el volumen de la participación en cada instancia debe servirnos de parámetro para evaluar medidas, como podrían ser la reinstalación de la toma de la facultad, o clases públicas en avenidas o lugares más visibles que los contornos de la sede de Santiago del Estero, sobre la base de que sería muy bueno poder retomar ese nivel de intervención.
Pero nos interesa señalar que es muy importante volver a preparar una movilización hacia la Casa Rosada, al centro del poder político, saliendo desde nuestras facultades. La Asamblea interfacultades del AMBA realizada el sábado 26, propuso realizarla el 12/11. Dado que la fecha que sugiere el Frente Gremial para una acción en CABA (en principio un festival) es recién el 22/11 cuando sabemos que la cursada ya va a estar prácticamente finalizada. Por eso, aportamos a esta asamblea el planteo de que Sociales debe proponerse volver a movilizarse de conjunto de forma intergremial el 12/11 en una marcha universitaria antes de finalizar el cuatrimestre, y que a esa acción debemos llegar con la mayor preparación previa para que sea una acción lo más contundente posible.
Ahora es cuando.
Plata para educación, no para la deuda y el FMI.
Basta de ajuste, saqueo y represión.
JIS - No docentes en lucha - Fucsia (docentes e investigadores)