El paro fue un pronunciamiento nacional del conjunto de los trabajadores no solo contra el impuesto al salario (Ganancias), sino también por un inmediato aumento de salario, contra la inflación y el ajuste. Es un verso que el impuesto a las Ganancias es para repartir entre los más pobres. El gobierno lo cobra para pagar la deuda externa y subsidiar a empresarios amigos. ¡Hay que sacarle a la renta financiera, aplicar un impuesto a las grandes fortunas y dejar de pagar la fraudulenta deuda externa! Solo así se podrían dar salarios y jubilaciones dignas, viviendas, salud y educación.
El paro fue importante a pesar de que la convocatoria fue de un día para otro y a que la CGT Caló y la CTA oficialista no convocaron, sufriendo un duro revés. Si bien el paro de transporte fue anunciado tiempo atrás, nunca se sabía a ciencia cierta si se iba a cumplir. Los dirigentes estuvieron negociando con el gobierno hasta una semana antes. La CGT Moyano, sin consultar a nadie y sin preparar nada, se sumó al paro de transporte convirtiéndolo en un paro general. Después, la UOM y el gremio oficialista de Daer de la Alimentación, por presión de sus propias bases, tuvieron que dar "libertad de acción".
No fue un paro preparado y debatido en la base. Fue un paro convocado burocráticamente por una conducción que no quiere derrotar en serio el ajuste de Cristina. Es lo opuesto a lo que impulsamos desde el Encuentro Sindical Combativo encabezado por el "Pollo" Sobrero y el "Perro" Santillán y otros importantes dirigentes. Por eso los ferroviarios del Sarmiento hicieron una masiva asamblea donde debatieron el paro y votaron adherir por unanimidad. O en los Suteba combativos y gremios docentes opositores, donde el paro fue total pese a las carnereadas de Yasky y Baradel.
En la conferencia de prensa de la CGT Moyano, Barrionuevo propuso llevar al próximo confederal de la CGT opositora del 15 de abril un nuevo paro de 36 horas con movilización a Plaza de Mayo. Moyano dijo que lo van a evaluar. Y los dirigentes del transporte se van a reunir el próximo 14. Exigimos a la CGT Moyano (junto a la CTA Micheli) que le dé continuidad al parazo del 31 con un nuevo paro de 36 horas con movilización, contra el impuesto al salario (Ganancias) y por un aumento de emergencia para todos los trabajadores. Porque el gobierno quedó golpeado y hay condiciones de torcerle el brazo al ajuste.Pero como nada de esto está asegurado, llamamos a hacer una fuerte campaña para exigir el paro de 36 horas con movilización. Impulsando asambleas donde se pueda, reuniones de activistas y reclamar plenarios de delegados para votar esa exigencia. Y sacar pronunciamientos en los distintos gremios. Lo mismo en docentes, estatales y el resto de los trabajadores. Porque solo un nuevo paro superador y un plan de lucha podrá torcer el brazo al ajuste del gobierno nacional y de los gobernadores.
Las propuestas del Frente de Izquierda
El paro general planteó urgentes reclamos. El Frente de Izquierda (PO, PTS e Izquierda Socialista) los viene impulsando en los lugares de trabajo y ha presentado proyectos de ley en el Congreso nacional y en las legislaturas por salarios igual a la canasta familiar, el 82% móvil, anulación del impuesto a las Ganancias para los trabajadores, prohibición de despidos y suspensiones y terminar con el trabajo en negro. Lo opuesto a lo que hacen Cristina, Scioli y los falsos opositores como Macri, Massa y la UCR.
El FIT reclama un plan de lucha. Y llama a votar por sus listas en las elecciones de Capital y otras provincias.