May 20, 2024 Last Updated 6:07 PM, May 18, 2024


Escribe José Castillo

Sergio Massa asumió como “superministro” de Economía, absorbiendo a los ex ministerios de Desarrollo Productivo y Agricultura. Con pleno acuerdo de Alberto y Cristina Fernández, Massa llega para profundizar el ajuste que ya viene llevando adelante el gobierno peronista del Frente de Todos, de la mano del FMI.

Con el beneplácito del establishment, Sergio Massa dio a conocer su equipo y finalmente este miércoles sus medidas económicas. Se puede resumir en pocas palabras: más ajuste, más sometimiento al FMI, y más privilegios para los monopolios agroexportadores, del gas y el petróleo, la minería y los banqueros. Para el pueblo trabajador no hay nada. Sólo promesas, que aún si se concretan serán migajas, profundizando la miseria, la baja salarial y la marginación social.

Todo a favor de los monopolios exportadores

El eje de la política de Massa pasa por conseguir dólares para “recomponer reservas”. La pregunta es para qué. ¿Acaso se trata de conseguir dólares frescos para mejorar los salarios de los trabajadores, o las jubilaciones, o para lanzar una plan de obras públicas que genere trabajo genuino? ¿Es para construir escuelas u hospitales? Nada de eso. Massa quiere juntar dólares para que crezcan las reservas y así cumplir con el Fondo, que exige que aumenten a 5.800 millones de dólares a más tardar a fin de año, para así garantizar los pagos de deuda. Y también para poder alimentar a los especuladores en su bicicleta financiera.

También hay que preguntarse cómo hará Massa para obtenerlos. Su política es ofrecerles más ventajas a los monopolios exportadores, pagarles “mejor” por cada dólar exportado, brindarles subsidios, exenciones impositivas y todo tipo de beneficios. Esta es su famosa fábrica de dólares, en realidad una fábrica de privilegios y vía libre al saqueo.

Más plata para los banqueros

Los especuladores financieros ya hace un par de meses que vienen amagando con no renovar los vencimientos de bonos y letras de la deuda interna. Eso fue lo que recalentó el dólar y uno de los motivos de la corrida cambiaria de las últimas semanas.

Sergio Massa y el presidente del Banco Central Miguel Pesce buscan que se renueven esos bonos y letras ofreciéndoles mayores premios: una tasa de interés cada vez más alta. Mientras los banqueros e “inversores” financieros festejan, ya que cobran millonadas solamente por renovar sus tenencias de bonos, para los trabajadores se encarece el crédito popular, los financiamientos con tarjetas de crédito y las compras en cuotas.

De gira por Estados Unidos, Francia y Qatar

Como parte de su plan económico, Sergio Massa anunció que saldrá de gira. Irá Estados Unidos, obviamente a reafirmar sus compromisos con el FMI, y de paso a ofrecer más privilegios para el saqueo de nuestras riquezas a los pulpos yanquis. Luego se dirigirá a Francia, a renegociar la estafa de la deuda con el Club de París. Y finalmente, recalará en Qatar, donde aspira a obtener fondos de nuevos préstamos (ahora se los llamará REPO) que, si los consigue, no serán más que una nueva vuelta de tuerca en la bola de nieve sin fin de nuestra deuda externa: algunos millones de dólares para “pasar un par de meses”, que después habrá que devolver con creces gracias a los intereses acumulados.

Se profundiza el ajuste

Todas estas medidas a favor de los grandes monopolios, las transnacionales, los banqueros y los especuladores se apoyan en una “expectativa”: que Massa tendrá más “volumen político” (así se está diciendo) para poder implementar el mayor ajuste que exige el Fondo. Massa reafirmó que, como sea, cumplirá con las metas acordadas en marzo pasado con el FMI, que exigen reducir el déficit hasta el 2,5% del PBI y no utilizar un peso más de emisión monetaria lo que sólo puede lograrse con un fortísimo ajuste. Con tarifazos (mayores a los pautados hasta ahora), salarios públicos y jubilaciones a la baja, congelamiento de planes sociales (se amenaza con una “auditoría para descubrir irregularidades”, con la explícita meta de reducirlos lo más posible) y ratificando todas las medidas de congelamiento de ingreso de personal que ya había anunciado Batakis.

Las medidas de Massa no contienen nada a favor de los trabajadores. Si hay algo, como el bono anunciado la semana pasada para los que perciben planes sociales, será absolutamente insuficiente. Se lanzan vagas promesas, como modificar el régimen de reajuste jubilatorio, pero en lo concreto lo único que hay es una  “compensación” de poco más de 1.000 pesos para quienes cobran la jubilación mínima. O el anuncio de que se reunirá con la CGT para “discutir” algún tipo de recomposición.

Nada bueno puede esperar el pueblo trabajador. El plan del Frente de Todos sigue siendo priorizar el ajuste con el FMI y los pagos de deuda por sobre las más urgentes necesidades populares.
La salida pasa por lo opuesto, postulando un plan económico alternativo, obrero y popular que, a partir de la suspensión de los pagos de la deuda externa y la ruptura con el FMI, coloque todos los recursos al servicio del salario, el trabajo, la salud, la educación y la vivienda.

Massa y su equipo


Escribe José Castillo

A Sergio Massa muchos lo llaman “el hombre de la Embajada” por sus lazos cuidadosamente cultivados durante años con el poder político y económico norteamericano. Recordemos que años atrás hacía campaña electoral prometiendo “mano dura” a partir de su amistad con el alcalde Rudolph Giuliani de Nueva York. Más cercano en el tiempo, se jactaba de sus contactos con el partido Republicano. No es casualidad que uno de los primeros en felicitarlo fue justamente Mauricio Claver-Carone, el actual presidente del BID colocado allí por Donald Trump. Con la llegada de Biden al poder Massa desempolvó a sus viejos amigos del Partido Demócrata (Juan González, el segundo de Jack Sullivan, presidente del National Security Council, terminal con llegada directa al presidente yanqui). Las relaciones de Massa con los Estados Unidos no son solo políticas, tiene aceitados contactos con el mundo de los buitres especuladores como lo reconoció el titular del JP Morgan.

Massa coqueteó con el propio Macri apenas este asumió a fines de 2015 (recordemos que lo acompañó al foro de Davos en enero de 2016) y es un “confiable” para el empresariado local. El periodista Diego Genoud, autor de la Biografía no autorizada de Sergio Massa, menciona a alguno de sus amigos empresarios: Enrique Esquenazi (Grupo Petersen), Daniel Hadad, Daniel Avila (Grupo América), José Luis Manzano (Edenor y otras empresas), Alberto Pierri (Canal 26) y el fallecido Jorge Brito (Banco Macro). También tiene estrechos contactos con Marcelo Midlin (Pampa Energía) y Carlos Bulgheroni (Pan American Energy).

Para Massa lo más importante seguirá siendo cumplir con el ajuste negociado con el FMI y los pagos de deuda externa. Para eso incorporó a dos figuras con larga historia. Para el recién creado “Comité para el desarrollo del mercado de capitales y seguimiento de la deuda pública” tendrá nada más ni nada menos que a Daniel Marx. Este personaje fue director del Banco Central en la época de Alfonsín cuando ese gobierno reconoció la totalidad de la deuda que impuso la dictadura con el genocidio. Luego fue negociador de la deuda entre 1987 y 1993,  uno de los principales impulsores del Plan Brady durante la época de Menem y Cavallo. Finalmente reapareció como secretario de Finanzas del gobierno de De la Rúa y a fines de 2000 fue uno de los principales negociadores del llamado Blindaje que luego ya con Domingo Cavallo terminaría en el “megacanje” de junio de 2001, otra estafa de la deuda que terminó en una causa judicial escandalosa.

Por si esto fuera poco, el jefe de asesores de Massa será Leonardo Madcur, uno de los responsables principales junto con Guillermo Nielsen y Roberto Lavagna de la reestructuración de la deuda en 2005 en el gobierno de Néstor Kirchner después que el Argentinazo impuso el no pago. Una anécdota para completar la pintura: Madcur, amigo de Javier Milei, fue quien presentó al hoy diputado “libertario” a Eduardo Eurnekián para que este desde Aeropuertos Argentina 2000 le financiara lo que terminó siendo su carrera política.

Como Secretario de Hacienda vuelve Raúl Rigo, quien ya estaba con Martín Guzmán y fue asesor de Hernán Lacunza cuando éste fue ministro de Economía de la Provincia de Buenos Aires con María Eugenia Vidal. Tiene además excelentes contactos con Horacio Rodríguez Larreta. Lo que se dice “un todo terreno” para cualquier gobierno patronal.

Con los antecedentes de Massa y su equipo no es extraño que el establishment económico local le haya hecho un guiño bajando provisoriamente el dólar. Massa está para garantizarles sus superganancias.
                                                         

 Escribe Guillermo Sánchez Porta
 
En medio de la crisis con la renuncia de Batakis y la asunción de Massa, la cúpula de la CGT decidió sacar un comunicado de fuerte apoyo al nuevo ministro. Hace falta una CGT que defienda a los trabajadores, no al gobierno y las patronales.
 
Millones de trabajadores y sectores populares pasamos semanas de angustia. Todos los días suben los precios, las tarifas, los alimentos, faltan elementos de primera necesidad. La plata no alcanza. En medio de esto, los dirigentes de la CGT y las CTA se pelean en ver quien se muestra más servil al gobierno. Si hay que “defenderlo frente a los especuladores” o si hay que “apoyarlo” sin más.

Antes que asumiera Massa, la CGT tuvo que anunciar una movilización después de años de inacción, donde apoyó y dejó pasar todo tipo de ajustes. Además de su reacomodamiento en la interna del Frente de Todos, este llamado muestra que en la base de los trabajadores crece la bronca por la crisis económica. Pero ese malestar de los trabajadores, ese rechazo al gobierno peronista y a la situación social, en vez de utilizarlo para salir a la lucha, los dirigentes de la CGT tratan de encorsetarlo y usarlo para sus peleas en el Frente de Todos.

Moyano volvió a su viejo dicho, sería “una marcha contra nadie”. Yasky dijo que era “en apoyo al gobierno del Frente de Todos, ante los ataques de sectores especulativos”. Algunos del triunvirato debieron acomodarse un poco, “es contra la inflación y la carestía”. “Si el campo reclama, los empresarios reclaman, los banqueros reclaman, nosotros no podemos quedarnos callados”, dijeron. Pero el nombramiento de Massa “acomodó” un poco las cosas para estos burócratas. “Hoy más que nunca, primero la Patria” titularon en su comunicado de saludo a Massa, “a quien conocemos y confiamos plenamente la orientación que dará el compañero Sergio Massa a la economía argentina”. Una vergüenza.

Luego se reunieron con Manzur, el jefe de gabinete, para ver si podía darles algún anuncio que les permitiera fundamentar el levantamiento de la movilización. No lo consiguieron. Esperaban que Massa les diga algo que les sirva para argumentar a los trabajadores el porqué de su optimismo ante el nuevo ministro y los justifique a seguir sin llamar a un paro nacional. Pero Massa sólo dijo que “en los próximos días impulsará reuniones de empresarios y trabajadores” o sea, nada.

Nada bueno vendrá para los trabajadores del nuevo gabinete del Frente de Todos. Y es hoy cuando necesitamos un inmediato aumento de salario, jubilaciones y ayudas sociales para llegar a la canasta familiar. Para eso hay que aplicar un plan económico opuesto, que arranque por romper el pacto con el FMI, dejar de pagar la deuda externa y usar ese dinero para las necesidades de los trabajadores y sectores populares.

La CGT y las CTA tienen que romper su pacto con el gobierno. “Hoy más que nunca, primero los trabajadores”, debería ser el título de los comunicados de la CGT y llamar al paro nacional y movilización. La marcha del 17 debería ser contra el ajuste del gobierno del Frente de Todos, principal responsable de la brutal crisis económica y social que vivimos, no ubicarlo como “víctima” de nadie.

Desde el Plenario del Sindicalismo Combativo, PSC, que encabezan los ferroviarios del Sarmiento con Rubén “Pollo” Sobrero, los dirigentes del Sutna que están en un duro plan de lucha, los docentes porteños de Ademys y ATEN Neuquén (que están de paro junto a docentes de once provincias más), de AGD-UBA, Ceramistas, Estatales y trabajadores de la Salud combativos, no dudamos en que vamos a marchar el 17 de agosto. Pero será para sostener los reclamos de los trabajadores, no del gobierno y las patronales. Para luchar por un plan económico alternativo obrero y popular. Para exigir e impulsar el paro nacional y plan de lucha, no para pactar con el gobierno y sostener el ajuste del FMI. Y convocaremos a los movimientos sociales combativos, sindicatos, organizaciones sociales, al Frente de Izquierda y los partidos políticos que compartimos el plan económico alternativo que llevamos con el Espacio de coordinación de Lezama a Plaza de Mayo el 9 de julio, a marchar todos juntos.

Escribe Mariano Barba

Ni bien se fue confirmando la noticia de que Sergio Massa sería el nuevo integrante del gabinete, con una ubicación preponderante como “superministro” a cargo de Economía y otras áreas, varios dirigentes sindicales burocráticos se pronunciaron en apoyo a su llegada. Hugo Yasky, el principal referente gremial kirchnerista, titular de la CTA de los Trabajadores y diputado nacional por el Frente de Todos, fue uno de ellos.

Así, realizó declaraciones de bienvenida a Massa: “sería bueno la incorporación de Massa al gabinete, es una de las tres cabezas del Frente de Todos, los que conforman esa sociedad estando en el gobierno le van a dar más fortaleza”.

Quiere hacernos creer que la aparición de Massa es por pedido de trabajadores y sectores populares: “La gente te dice que hay que unir y fortalecer, darle al gobierno la posibilidad que se muestre unido y tiene que haber cambio en el gabinete para que eso sea posible, creo que sería muy bueno”. Una verdadera fábula para justificar el rápido apoyo a Massa y a su ajuste.

Yasky como máximo dirigente de la CTA y ex secretario general de Ctera olvida que los docentes y los trabajadores estatales de todo el país tienen sueldos por debajo de la línea de pobreza y algunos sectores por debajo de la línea de indigencia.

En lugar de dar respuestas a la bronca contra el ajuste y la inflación de la inmensa mayoría de trabajadores y desocupados que reconocen la responsabilidad del gobierno de Alberto, Cristina Fernández y el Frente de Todos, Yasky los libera de toda culpa sumándose al discurso de que “hay un intento de desestabilización, es imposible no verlo, es imposible disimularlo, es querer tapar un elefante con una servilleta”.

El gobierno peronista firmó el acuerdo con el Fondo y está pagando la deuda de Macri, permite la suba indiscriminada de precios, pacta con los banqueros super ganancias históricas y entrega a las multinacionales todas las riquezas del subsuelo; tanto petróleo, gas como minerales.

Desde Izquierda Socialista nos ubicamos en el lado opuesto del kirchnerista Yasky, quien una vez más se pone del lado del gobierno y del ajuste y abandona a su suerte a los estatales y docentes que están en lucha en varias provincias. Seguimos exigiendo a la burocracia sindical, sea de la CGT o de las CTA, que rompan su pacto con el gobierno y llamen a un paro general y a un plan de lucha para enfrentar el ajuste. 


Escribe Blanca López, diputada provincial Izquierda Socialista/FIT Unidad

Podemos graficar los hechos mafiosos y cuasi asesinos de la burocracia de ATE Neuquén con una difundida imagen, que impacta por lo certero del fotógrafo que gatilló la cámara al unísono con el patotero que gatilló el revólver para intentar matarlo. Este nefasto personaje, al mismo tiempo, hirió de un disparo a una trabajadora municipal. La indignación de las y los trabajadores y del pueblo en general fue enorme; hemos quedados absortos al ver los videos sobre el ataque criminal de una burocracia putrefacta que dirime a tiros, con otro sector burocrático, el control de los fondos y de los cargos gremiales en un municipio del interior de la provincia.

El hecho ocurrió en la municipalidad de San Martín de los Andes, cuando llegó una Trafic desde Neuquén Capital a 440 kilómetros, con una patota organizada por Carlos Quintriqueo, secretario general de ATE, enrolado en la CTA de los Trabajadores que lidera a nivel nacional el diputado kirchnerista del Frente de Todos Hugo Yasky. El tirador se llama Pedro Jofré. La emprendió a tiros contra una multitud que se manifestaba y en especial disparó a corta distancia contra dos periodistas que cubrían el episodio. La acción no fue casual ni repentina. Es evidente que Jofré no actuó solo, sino que era parte de la patota que vino con las armas. Luego, cuando se fugó y era buscado por la policía provincial, fue protegido para llegar a la capital neuquina, teñirse el pelo y cambiarse de ropa, para después, cuando le convenía, entregarse a la policía.

Esta disputa entre facciones no es más que otro episodio de lucha entre burócratas por manejar la enorme caja que recibe la conducción de un sindicato que está lejos de las necesidades de las y los trabajadores, tal como demostró la lucha de los “Elefantes” contra el gobierno y el burócrata Quintriqueo, y la gran cantidad de conflictos que suceden día a día dentro de ATE y que son dejados de lado por su conducción. Según investigaciones periodísticas, el monto que le estaría transfiriendo el gobierno de la provincia al sindicato que encabeza Quintriqueo rondaría los 1.200 millones de pesos anuales, originados en el famoso “aporte solidario”, que le son descontados del recibo de sueldo a las decenas de miles de trabajadores públicos que incluso no están afiliados. Esto habla a las claras de que el sustento de la patota es el acuerdo monetario y político con el gobierno.

Los disparos de Jofré contra medios de prensa son una acción deliberada para encubrir sus actuaciones, tal como lo ha denunciado el Sindicato de Trabajadores de Prensa de Bariloche y Zona Andina en un comunicado.

Desde Izquierda Socialista y otros sectores siempre denunciamos la impunidad con la que se mueve la burocracia sindical, que ya ha actuado así en diferentes ocasiones. Ejemplo de esto es el asesinato de Mariano Ferreyra por parte de la burocracia peronista de Pedraza. Ya no representan a las y los trabajadores, defienden los acuerdos con el gobierno de turno para que pase el ajuste y la miseria salarial y defienden el reparto de la torta a los tiros. Para esto cuentan con la complicidad de los gobiernos patronales, la Justicia y la policía, que liberan la zona y permiten estos actos repudiables. En esta oportunidad la responsabilidad y la autoría intelectual de los hechos apuntan al principal dirigente Carlos Quintriqueo.

Como diputada presenté en la legislatura neuquina una serie de proyectos para repudiar los hechos y obligar a que el gobierno aclare su relación laboral con el tirador.

Nuestro semanario. En el que te acercamos el reflejo de las luchas del movimiento obrero, las mujeres y la juventud, además un análisis de los principales hechos de la realidad nacional e internacional.

Es una herramienta fundamental para fortalecer a Izquierda Socialista y al Frente de Izquierda.

La suscripción del periódico impreso nos permite también seguir editándolo, ya que nos financiamos con nuestros propios aportes y del de los suscriptos.

 

Suscribite a la versión Impresa