Entrevista al Perro Santillán: “No me interesan las candidaturas”
Por Martín Azcurra para marcha.org
De la mano del Pollo Sobrero, el referente de la izquierda independiente se acerca al Frente de Izquierda y los Trabajadores (FIT), con lo que promueve un amplio polo de disputa frente a la crisis del kirchnerismo.
El posible ingreso de Carlos "Perro" Santillán al Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT) abre la puerta a la llamada Izquierda Independiente o Izquierda Social, lo que representa un desafío tanto para el Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS, el más reacio a recibir al sector por su rigidez programática) como para este sector que aún se encuentra disperso y sin reflejos coyunturales, de cara a las Primarias Abiertas Simultáneas Obligatorias (PASO) del 9 de agosto de este año.
La reciente conformación del Encuentro Sindical Combativo, convocado por el Perro Santillán y el Pollo Sobrero, dirigente del FIT por Izquierda Socialista (IS), ayudó a su posible incorporación. Consultado por Marcha, Santillán reconoció: "Cuando formamos el Encuentro Sindical Combativo, el Pollo Sobrero vio toda la unidad que se había gestado y me preguntó qué podíamos hacer ante las elecciones, situación que trasciende lo social, lo político y todo lo que venimos discutiendo nosotros en el movimiento".
A pesar de su renuencia por la lucha electoral, expresada públicamente, el Perro se convence del potencial político del FIT. "Yo nunca me interesé por el tema electoral, no soy un electoralista, pero la verdad que en este momento veo a Izquierda Socialista dentro del FIT y al FIT mismo como una expresión distinta de lo que es el mercado electoral, que tiene posibilidades de ser un movimiento histórico para la unidad de la izquierda en la Argentina. Entonces le dije al Pollo que sería bueno que empezáramos a conversar con los distintos sectores para ver qué posibilidad de apertura tiene el Frente".
Mientras puertas adentro el FIT se debate entre resolver sus candidaturas por acuerdo previo o en las PASO de agosto, los candidatos principales ya expresaron su postura de cara al ingreso de más fuerzas de izquierda. En el caso del Partido Obrero (PO), su dirigente Jorge Altamira dejó entender que el ingreso del Perro, a pesar de sus críticas anteriores, es la puerta de entrada para un espacio más amplio que el que representa: "Los planteos del Perro deben ser entendidos también como un giro en la apreciación política general de una variedad de agrupaciones de izquierda que lo tienen como referente. Establecen, hasta cierto punto, un nuevo escenario político. Son la expresión de una tendencia aún más amplia, que se pondrá de manifiesto con el desarrollo de la crisis política". Altamira concluye que "los planteos del Perro Santillán inauguran una nueva etapa para el FIT, porque destacan su rol de polo de atracción política. Refuerza la necesidad de actuar como un frente único político contra las fuerzas políticas del capital y de los explotadores".
El PTS, en cambio, hace hincapié en la diferencia programática al mostrar una mayor estrechez política de cara a la posible apertura hacia estos sectores que siempre definió como reformistas: "El FIT tiene sus límites claros", sentenció el diputado Nicolás del Caño, propuesto prematuramente como candidato nacional del FIT.
"Al kichnerismo ya se le cayó la careta"
El trotskismo se enfrenta a una disyuntiva de la historia: o prioriza el engorde de su aparato o aprovecha la relativa crisis de los partidos hegemónicos en beneficio de la lucha obrera y popular.
Al respecto, el Perro Santillán prefiere inteligentemente no entrar en esa disputa, pero dispara con una propuesta política de fondo que representa, en definitiva, el planteo central de toda la izquierda independiente: "Yo no voy a discutir candidaturas, porque sé que lo que voy a disputar es en el campo de las instituciones burguesas. Así que vamos a ver cómo nosotros nos adecuamos a que haya un compañero que esté reconocido, que ya tenga la intencionalidad de ser candidato, y ayudar para que ese compañero después, conjuntamente con otras instituciones de control social y obrero del pueblo, pueda funcionar distinto a lo que es la política hoy. Sé que es muy ambicioso lo que nosotros pensamos. Yo no discuto candidaturas, realmente no me interesan las candidaturas. Sí me interesa que haya un movimiento que pueda surgir y pueda trascender, socialmente hablando".
De esta manera, a pesar de algunos rumores que lo ubican como primer candidato a diputado nacional, el Perro se encarga de desmentirlo y propone una apertura mayor: "En este momento estamos en discusiones. Estoy tratando de que comprendan que nosotros no tenemos intencionalidad de disputar alguna candidatura. Sí vamos a apoyar el crecimiento y la posibilidad de hacer concreta la unidad que tanto boqueamos y que nunca hemos llevado adelante".
Este parece ser el debate principal. La Izquierda Independiente se plantea, con muy poco tiempo (el 10 de junio vence la presentación de alianzas para las Primarias Abiertas), cómo superar la fragmentación en que se vio sumergida durante los últimos años y que le impidió trascender la fase germinal de las elecciones de 2012, que auspiciaba mucho más de lo que fue.
Como una salida, este sector plantea la apertura del FIT para ingresar como bloque o la conformación de un frente más amplio. Es en este sentido que tiene importancia el ingreso del Perro Santillán, no sólo para disputar seriamente las provincias del norte argentino, sino para abrir las puertas a las expresiones políticas de los movimientos sociales. Como el mismo Santillán nos cuenta: "El FIT tiene en sus manos la posibilidad de hacer un movimiento de izquierda realmente revolucionario como nunca ha sucedido en la historia política argentina. Nosotros queremos contribuir al FIT como propulsor de esa unidad, que siempre se ha planteado, pero que por egoísmo de candidaturas o de disputa de hegemonismos, no hemos podido llevar adelante. Creo que ahora estamos en otra situación y podemos ver si de verdad hay una cuestión que pueda trascender el 2015 y que pueda prepararse para gobernar Argentina en un futuro no muy lejano".
Pero quizás lo que más presiona a todos los sectores es la oportunidad histórica que ofrece la retirada del kirchnerismo de sus banderas más progresistas. En este aspecto, el Perro es contundente: "Al kirchnerismo ya se le cayó la careta. El doble discurso ya no corre. Ya no puede decir que llevan la bandera de los derechos humanos, cuando se violentan todos los derechos humanos de la actualidad. No podemos decir que representa lo nacional y popular cuando ha vendido la Cordillera de los Andes a las empresas extranjeras, cuando ha pagado la deuda externa que ha amparado cualquier gobierno de cualquier tipo, y sobre todo cuando la precarización laboral carcome los hogares argentinos".