Escribe Mercedes Trimarchi, diputada bonaerense (m.c.) Izquierda Socialista / FIT Unidad
El colectivo de Periodistas Argentinas lo presentó junto a un informe en el que se denuncia la vulnerabilidad de derechos y la precarización laboral que sufren las periodistas que trabajan en medios privados y estatales. Situación que se agravó con la pandemia y los más de 4.500 despidos.
En la Ley se establece además del cupo laboral travesti-trans para los medios estatales una serie de requisitos que deben cumplir los mismos para fomentar la equidad entre los géneros. Por ejemplo, capacitaciones de comunicación igualitaria y no discriminatoria; acciones para apoyar la distribución equitativa de las tareas de cuidado como licencias igualitarias; salas de lactancia y/o de centros de cuidado infantil; promoción del uso de lenguaje inclusivo; protocolos para la prevención de la violencia laboral y de género, entre otros.
Desde las bancas de Izquierda Socialista/FIT Unidad acompañamos el proyecto pero alertando sobre la futura reglamentación de la misma. Y a la vez, denunciamos que según los datos del Sindicato de Prensa de Buenos Aires (Sipreba) el 94% de las periodistas free lance cobran por debajo de la línea de pobreza (31.908,33 pesos) establecida por el Indec.
“Fotógrafo y Militante no siempre en ese orden” así se definía Nico Avelluto en su cuenta de Instagram. Allí nos dejó su obra y su mirada de cada una de las luchas en las que participó/fotografió sobre todo en la pelea por el derecho al aborto legal, seguro y gratuito como integrante de la Campaña. Murió demasiado joven, a sus 28 años. Sin dudas, lo vamos a extrañar.
Próximamente, estará disponible la edición especial de la revista Correspondencia Internacional N° 47 con centro en la lucha de las mujeres que enfrentan la pandemia y la crisis capitalista en todo el mundo. Con notas realizadas por compañeras desde Turquía, el Estado Español, México, Panamá, Chile, Brasil entre otros. Con una entrevista exclusiva a Budoor Hassan, activista feminista palestina y a la docente colombiana, Diana Díaz quien relata sobre el rol de las mujeres en la lucha contra Duque. Costo 200 pesos.
Escribe Rosario K.
El pasado 14 de marzo, se dio inicio a la histórica caminata que movilizó a cientos de mujeres indígenas de las comunidades del Norte al Sur de nuestro país, culminando el 22 de mayo en las puertas del Congreso de la Nación bajo un nuevo grito de lucha parido desde sus entrañas: #BastaDeTerricidio.
Cientos de mujeres autoorganizadas de 36 naciones indígenas, desde los cuatro puntos cardinales del país, caminaron aproximadamente 2.000 km durante más de dos meses con la férrea convicción de instalar al 22 de mayo como el Día Global de Lucha #BastaDeTerricidio, organizando a su paso asambleas, charlas y talleres con la finalidad de extender a todos los rincones del país su lucha contra este sistema capitalista, racista y patriarcal que pone en riesgo la vida del planeta.
Movilizadas por la furia provocada por las llamas que arrasaron pueblos enteros; por la contaminación de las aguas llevada adelante por las megamineras y por el envenenamiento de los pueblos de la mano de los agrotóxicos, las mujeres indígenas denuncian el ecocidio que las grandes empresas extractivistas, en complicidad con el Estado, cometen sobre los pueblos día a día, causando daños irreversibles en los territorios.
El concepto Terricidio sintentiza las formas de genocidio, ecocidio, epistemicidio y feminicidio que sufren históricamente los pueblos originarios, especialmente las mujeres indígenas, y le exigen al gobierno nacional que éste sea considerado un crimen de lesa naturaleza y de lesa humanidad, juzgando y condenando a los terricidas en consecuencia.
Los responsables de los crímenes contra la tierra y los cuerpos no son actores individuales, sino que las responsabilidades son de “las empresas, los gobiernos que dan la venia, que ignoran denuncias de organizaciones sociales o que no hacen cumplir las leyes que existen para resguardar los territorios” afirma Neli Curia, mujer mapuche integrante del Movimiento (Página/12 - 28/04/21).
La lucha contra el Terricidio es una lucha antipatriarcal
Las mujeres indígenas emprenden su largo caminar como forma de lucha ante el asesinato organizado, continuo y direccionado contra sus cuerpas-territorio.
Según los datos arrojados por la encuesta realizada en el 2do Parlamento de Mujeres Indígenas en 2018, ocho de cada diez mujeres indígenas sufren violaciones, abusos y violencia física. A su vez, siete de cada diez lo sufren por parte de policías y fuerzas de seguridad del Estado. Cinco de cada ocho mujeres violadas y asesinadas son ancianas y, en la mayoría de los casos, son autoridades espirituales. El dato de que siete de cada ocho mujeres no pueden acceder a la justicia, deja en evidencia el régimen de impunidad al que son sometidas.
Su rol histórico como encargadas de sostener la vida familiar, asimismo, generó que sean las más golpeadas por las crisis. Según sus propios testimonios, en la gran mayoría de las comunidades no cuentan siquiera con suministro de agua, generando que tareas domésticas como lavar ropa o cocinar, sean doblemente demandantes.
Esta no fue su primera caminata y tampoco será la última, porque la lucha contra el Terricidio recién comienza. Desde Isadora acompañamos su lucha y gritamos junto a ellas que, si “Sembraron Terricidio, cosecharán rebelión”.
La fecha marcó un hito en la lucha contra la violencia de género en nuestro país. Es una referencia indiscutida en el mundo como parte de los acontecimientos que dieron origen a la cuarta ola de luchas feministas.
El contexto de la pandemia y el aumento de casos en el marco de la segunda ola no permitirá hacer grandes actividades masivas en las calles como lo amerita la grave situación de un femicidio/trans-travesticio diario. Pero de todas maneras, sí haremos visible nuestro reclamo.
Con todos los cuidados correspondientes en la ciudad de Buenos Aires vamos realizar con el FIT Unidad un corte de calles en Callao y Corrientes a las 8 horas en reclamo de mayor presupuesto para combatir la violencia de género y no para la deuda externa.