El 7 de marzo falleció Lucía Incorvaia, integrante de nuestra corriente morenista desde 1973 en que, siendo muy joven, comenzó a concurrir a las reuniones del local del PST en Pompeya. Proveniente de una familia obrera de Gerli, fue la compañera de toda la vida de nuestro camarada Pablo “Masa” Bernat. En la clandestinidad de la dictadura genocida, templó su militancia revolucionaria. Fue sostén de su compañero, expuesto por la lucha sindical, quien siempre recuerda que Lucy lo salvó de caer en manos de un grupo de tareas. Se desarrolló como militante y participó en las jornadas de Puente Pueyrredón, compartió las luchas de las madres de Kosteki y Santillán, acompañó a las Madres del Dolor y también a los casos de gatillo fácil. Participó en la creación de Familiares Vecinos y Amigos contra la impunidad en democracia (Favelcid) y en Avisar con sobrevivientes de la Masacre de Cromañón.
En los últimos años su salud se había debilitado y estaba en tratamiento médico. Un síncope seguido de muerte súbita se la llevó. Sus compañeros mucho más jóvenes de militancia dejaron dos expresivos testimonios. Gastón dijo: “Con toda claridad es la compañera más honesta, sincera y solidaria que conocí”. Ivana, por su parte, “la recuerdo empática, solidaria, contenedora, incansable[…] ella brillaba con su actitud frente al dolor humano [...] lo politizaba […] hay momentos de la vida y la militancia en donde mujeres trabajadoras y luchadoras te marcan el camino, te enseñan la moral revolucionaria, la honestidad política y la belleza de la solidaridad”. Saludamos afectuosamente a su compañero Masa, su hijo Pablo, nietos y familiares. ¡Lucía, hasta el socialismo siempre!
Regional Sur
Escribe Laura Marrone, legisladora (m.c.) de CABA por Izquierda Socialista/FIT Unidad
El 4 de marzo se fue un pedazo de nuestra historia. Nos dejó Dora Falco, madre de la desaparecida Dorita Falco, estudiante del profesorado de primaria en el Normal 3.
Junto con su compañero y padre de sus hijas, Dora fue de esas madres que golpearon puertas de cuarteles, despachos e iglesias buscando a su hija durante la dictadura militar. De las que hacían la ronda de los jueves cuando ponían en peligro sus propias vidas.
En la década del ’80 Dora ingresó al histórico MAS de Nahuel Moreno. Y fue la voz de las Madres en nuestros actos. Siendo ya grande, desarrolló una oratoria apasionada, expresión del amor a su hija y a todos los jóvenes que seguían luchando por las causas sociales como lo había hecho ella.
En la década del ’90 Dora, ya alejada de nuestro partido, comenzó una nueva militancia, recorría las escuelas de nuestra ciudad llevando la lucha por la Memoria, Verdad y Justicia a las nuevas generaciones. Cada 24 de marzo deambulaba hablando con niños de inicial y primaria con su pañuelo blanco. Eran tiempos en que la lucha por la memoria no era política de Estado y hablar de estos temas en las escuelas era de una audacia sorprendente. Dorita se sentaba en medio de los salones de actos rodeada de niños en el suelo y comenzaba un relato tan amoroso que, a pesar de ser terrible, llegaba a los corazones con un mensaje de lucha por la justicia.
Dorita dejó a sus hijas y nietos un mensaje de vida que trascendió a su propia familia. Quienes la conocimos hoy quisiéramos abrazarlos a todos, de cuerpo presente. ¡Hasta la victoria siempre, Dorita!
Otro 24 de marzo. Como todos los años es una cita de honor. Nos convoca el grito de siempre: ¡no olvidamos, no perdonamos, no nos reconciliamos! Allí estaremos, junto a los que nunca se dejaron cooptar: los organismos de derechos humanos, los sindicatos combativos, los centros de estudiantes, las organizaciones barriales y de desocupados y los partidos de izquierda que conformamos el Encuentro Memoria, Verdad y Justicia. Luchando por la memoria de los 30.000. Exigiendo justicia, contra la impunidad que vergonzosamente, sigue existiendo para tantos genocidas. Denunciando al gobierno, que, como todos los anteriores, se niega a abrir los archivos de la dictadura. Exigiendo cárcel común para los genocidas, muchísimos de los cuales están cómodamente en sus casas.
Pero, también, y esto es lo que distingue al Encuentro Memoria Verdad y Justicia, vemos a los Derechos Humanos en su conjunto. Gritamos, denunciamos, contra el ajuste, la represión y la impunidad no sólo de ayer, sino también de hoy. Porque en nuestra memoria está que el genocidio fue para imponer un feroz plan de ajuste, amparado por el FMI y del cuál surgió la inmoral e ilegal deuda externa. Pero también que todos los gobiernos que vinieron después de 1983 siguieron pagándola, imponiendo más hambre y miseria al pueblo trabajador y reprimiendo a los que salieron a luchar. Todos, sin excepción, por más doble discurso que se nos quiera vender. Todos, incluso hasta hoy. Por eso denunciamos también, como hicimos con los anteriores, al actual gobierno de Alberto Fernández y Cristina, el que prioriza los acuerdos con los pulpos acreedores y el FMI mientras ajusta a los jubilados, el que desalojó con la fuerza bruta en Guernica, el que apoya al gobernador peronista Insfran que reprime en Formosa.
Los organismos de derechos humanos cercanos al peronismo kirchnerista ya hace una década y media que dividieron las marchas del 24 de marzo para transformar las suyas en actos oficialistas. Este año plantean no salir a marchar. No acordamos. Porque los derechos se conquistan en la calle, como demostraron en diciembre las mujeres, que consiguieron, con miles en las plazas, la legalización del aborto.
Por eso, este 24, con barbijo, cuidando las distancias y con todas las prevenciones, otra vez tenemos que ser decenas de miles. Como siempre lo fuimos. Otro 24, sí, que volvemos a marchar porque con este gobierno, como con todos los anteriores, sigue la impunidad, el ajuste, la represión y la entrega.
Cárcel común a los genocidas. Basta de domiciliarias
Contra la impunidad, el ajuste y la represión de ayer y de hoy
Apertura de todos los archivos
Salud y vacunas y salud para todos
No al pago de la deuda externa. Fuera el FMI
Encuentro Memoria, Verdad y Justicia
Desde Izquierda Socialista en el Frente de Izquierda, con profundo dolor, comunicamos que en el día de la fecha ha fallecido nuestro compañero Martín Leandro Céspedes. Martín ha sido un compañero de larga trayectoria en nuestra corriente política. Fue siempre un militante apasionado y convencido que solo la clase trabajadora podía encontrar la solución a sus problemas. Participó activamente en la lucha del gremio UOCRA cuando se consiguió que el luchador y dirigente antiburocrático Juan Lincán ganara las elecciones a mediados de los 80, participó en la lucha para que los trabajadores del barrio 10 de diciembre pudieran acceder a un Plan de Viviendas Populares y en la lucha contra la burocracia en el gremio UNTER. Fue un obsesionado en construir el partido, una herramienta para que la clase trabajadora tuviera una alternativa política de izquierda y con independencia de clase. Esa pasión y obsesión, Martín la compartió como parte de la vida con su compañera Cristina y supieron transmitirla a sus tres hijos, a todos ellos acompañamos en el dolor de este difícil momento.
Hace casi un año, cuando comenzamos a analizar las consecuencias de la pandemia, Martín decía: "Con esta pandemia, los capitalistas se van a enriquecer más y los muertos los vamos a poner la clase trabajadora". Lamentablemente fue premonitorio y tuvo razón ya que el COVID acabó con su propia vida y continúa atacando a los más vulnerables agravado por la escasez de vacunas, la pelea de las multinacionales farmaceúticas por el mercado, sus patentes y convenios secretos son una traba para inmunizar a la población, a pesar del desarrollo científico y tecnológico alcanzado.
Martín ocupó cargos de responsabilidad en nuestro partido, fue candidato a Intendente de nuestra ciudad, a Diputado Nacional por Río Negro y muchas veces candidato a Concejal.
Mañana, sábado 27 de febrero, acompañaremos en caravana de autos los restos del compañero desde Cochería France (Onelli 126) hasta el cementerio municipal. Invitamos a todos aquellos que quieran sumarse, saludar a los familiares y despedirlo.
Compañero Martín Céspedes ¡Hasta el Socialismo Siempre!
Regional Bariloche. 26/02/2021
Alberto Gorbarán falleció el 31 de enero en Bariloche por Covid-19, luego de estar internado cuatro días en terapia intensiva. En 1968, durante el gobierno de Onganía, Alberto comenzó a militar en la clandestinidad en nuestro PRT-La Verdad de la corriente morenista del trotskismo. Fue militante de zona norte del Gran Buenos Aires y trabajaba en la fábrica de lanchas AVAN, donde fue delegado, consiguiendo importantes mejoras salariales para sus compañeros. Años más tarde trabajó y militó en Phillips organizando una agrupación llamada “5 de diciembre”, fecha que recordaba las jornadas de lucha en 1973 que terminaron en una huelga importante de la fábrica, sacando a la comisión interna complaciente con la patronal, evitando el aislamiento del núcleo de activistas despedidos y permitiendo que asumieran los nuevos delegados. En julio de 1976, ya en plena dictadura genocida, se va de la fábrica por cuestiones de seguridad.
En 1988, junto a su compañera Silvia y sus tres hijos, se radicó en Bariloche y comenzó a trabajar como docente y a militar en el gremio Unter. Fue esencialmente un impulsor de listas antiburocráticas en oposición a la Celeste y un activo militante en la construcción del partido, tomando tareas de responsabilidad. Participó de las importantes movilizaciones populares a mediados de los 90 y tras la crisis de 2001, organizando políticamente a aquellos desocupados que se acercaban al local partidario de Bariloche. Estuvo como candidato en listas gremiales y políticas, acompañando a Izquierda Socialista y al Frente de Izquierda.
Desde Izquierda Socialista Bariloche saludamos afectuosamente a Silvia y a sus hijos. Silvia, en un repaso de la trayectoria de Alberto nos decía: “vivió como pensaba”. Alberto Gorbarán, ¡Hasta el socialismo siempre!