¿Qué opinás de los anuncios del gobierno posteriores a las elecciones?
- Es muy simple. Se trata de sacarle plata del bolsillo a los trabajadores y dársela a los patrones. Con el verso de que van a combatir la pobreza o crear puestos de trabajo, Macri le baja impuestos a los empresarios, mientras achica las jubilaciones y trata de meter una reforma laboral que va a significar superexplotación y flexibilización laboral. A esto debemos sumarle los nuevos tarifazos y las declaraciones de Macri de que sobran trabajadores en el Estado. Mientras, nos seguimos endeudando, cada día pagamos más por la deuda externa, plata que tendría que ir para trabajo, educación y salud.
¿Cuál debería ser la respuesta?
- Hay que salir a enfrentar todo esto. Tenemos que parar este nuevo ajuste. Si me preguntás que hay que hacer, yo empezaría al revés, por lo que no hay que hacer. Porque es una vergüenza el rol de la burocracia de la CGT, que fue a aplaudir a Macri, y ahora dice que hay que negociar “punto por punto” la reforma laboral. Son unos burócratas vendidos que están dejando pasar el ajuste, entregando los convenios y los derechos históricos establecidos en la vieja Ley de Contrato de Trabajo.
Por eso es muy importante la responsabilidad que tenemos desde el sindicalismo combativo, tanto los que dirigimos sindicatos como los compañeros que están en comisiones internas y los activistas de las distintas listas opositoras en cada gremio. Porque cada vez queda más claro que necesitamos una nueva dirección del movimiento obrero, democrática y combativa. Donde todo se resuelva en asamblea o en cuerpos de delegados con mandato de base.
¿Qué sigue de ahora en más?
- Tenemos que organizar la bronca en los lugares de trabajo y ver cómo salimos a parar todo esto. Por eso es muy importante como primer paso que desde el sindicalismo combativo y sectores opositores como el Sutna, los Aceiteros, los Sutebas Multicolor, Ademys, ATE sur, entre otros, nos juntemos y saquemos una primera declaración de rechazo total al ajuste y propongamos un plan de acción con movilización. Hay que impulsar una gran campaña, tratando de hacer asambleas en cada lugar de trabajo para discutir cómo enfrentamos este paquete antiobrero y propatronal. Exigirle a la CGT que rompa la tregua con el gobierno y, junto con la CTA, llame a un plan de lucha. El gobierno se jugó al anunciar todas estas medidas. Lo que todavía está por verse es si las va a poder implementar: eso dependerá de la respuesta que seamos capaces de dar los trabajadores.