Escribe Nahuel Toledo, Comisión Directiva de la Asociación de Docentes de la Universidad Nacional de Moreno
Este lunes 28 de septiembre se realizó el primer paro nacional de la docencia pre y universitaria de las universidades nacionales, de cara al segundo cuatrimestre virtual. El paro se dio en medio de la crisis social, sanitaria y económica que atraviesa nuestro país junto con un atraso del 18,31% proveniente del gobierno de Macri, una pérdida de 12,61% de nuestro poder adquisitivo y un recorte salarial del gobierno de Alberto Fernández con una propuesta de cero por ciento de aumento salarial hasta el momento para este año, el incumplimiento de la paritaria 2019 y un ajuste al presupuesto educativo 2021. Pero también por el agotamiento y la sobrecarga de la docencia pre y universitaria que, producto de la virtualización forzada, tuvo que realizar un esfuerzo enorme en adaptarse a la enseñanza virtual aportando equipamiento tecnológico y gastos de conectividad sin ser compensados.
La medida fue convocada por el congreso de la Conadu Histórica, pero impulsada desde las asambleas de los sindicatos de base y mandatos de delegados por la bronca de la docencia universitaria frente a la pasividad de las conducciones nacionales. Incluso Conadu, federación ultraoficialista, frente al paro tuvo que convocar a una jornada de protesta y plan de lucha para reacomodarse frente al legítimo reclamo.
Pero, pese al empuje de las asambleas por parte de la docencia, las conducciones burocráticas de la Conadu Histórica (PCR- Deggenarismo, Patria Grande y PC) y Conadu (De Feo y CTA Yasky) fueron un tapón, realizando diferentes maniobras para que no se desplegara una verdadera lucha nacional en defensa de nuestros salarios, por la aplicación sin restricciones de nuestro convenio colectivo de trabajo y por demandas en el marco de la pandemia del coronavirus y la virtualización forzada. Ambas conducciones se negaron a profundizar la medida frente a quienes promovíamos un paro de 48 horas y el inicio de un plan de lucha por la inmediata recomposición de nuestros salarios, siendo que además hasta el momento nos encontramos sin una propuesta paritaria para este año y nuestros salarios siguen en caída.
Desde Docentes Pre y Universitarios e Investigadores de Izquierda Socialista y los sectores combativos reunidos en el Encuentro Nacional de la Docencia Universitaria del pasado 4 de septiembre venimos de impulsar asambleas en nuestros sindicatos por un plan de lucha con paro nacional de 48 horas y continuidad de las medidas, contra el recorte a nuestros salarios y la pasividad de las conducciones burocráticas, por la aplicación de nuestro convenio colectivo y condiciones de trabajo, junto con la exigencia de un bono compensatorio por gastos extras para toda la docencia, provisión de equipamiento tecnológico por parte del gobierno nacional y por la triplicación del presupuesto universitario sobre la base del no pago de la fraudulenta e ilegítima deuda externa.