Escribe Diego Martínez
Recordamos en estas palabras que hicieron eco en el pueblo trabajador a nuestra querida Mariana Márquez, mamá de Liz fallecida en Cromañón. Mariana fue una de las principales referentes de la lucha de los familiares en su momento más álgido y, pocos meses después de la masacre, murió a causa de un cáncer que ya había superado y se reactivó por la angustia que le provocó la muerte de su hija. Desde entonces pasó a ser la muerte número 195.
Con motivo de la interpelación a Ibarra en la Legislatura en febrero de 2005 Mariana le dijo en la cara en una sesión televisada para todo el país: “Hace unos días tuve que enterrar a mi hija pero vos sos un cadáver político. Sos una circunstancia. Esto le podría haber pasado a cualquiera porque hay una red de corrupción que sustenta el poder político. Pero te tocó a vos Ibarra, hacete cargo […] No creo en la J usticia porque todos son parte de este sistema corrupto. Por eso siempre vamos a estar movilizados buscando justicia, en contra de la impunidad”.
Unas semanas antes de morir le dedicó una carta a su hija: “ No me esperes todavía, porque hay muchas cosas para arreglar en este mundo injusto que me arrebató al ser que más amaba”. Así la recordaremos para siempre.