Jan 08, 2025 Last Updated 6:11 PM, Jan 7, 2025

Empezó el 2025 / ¿Se vienen “las buenas noticias” o sigue el ajuste?


Escribe José Castillo, dirigente de Izquierda Socialista/FIT Unidad

En estos primeros días de enero, los medios de comunicación hacen un esfuerzo por mostrar el clima de verano. Notas desde la costa atlántica o desde Brasil cubren horas y horas de televisión. El presidente Javier Milei, al mismo tiempo, afirmó que llegó la hora de las “buenas noticias” y que se viene la reactivación económica. ¿Cuál es la realidad? Según la consultora Jobint el 47% de los argentinos no pudo tomarse vacaciones. En ese número está, sin duda, una parte sustancial del pueblo trabajador.

Milei paga la deuda y profundiza el ajuste

Es mentira que llegó la hora de la reactivación y la recuperación de los salarios y jubilaciones. Continúa el ajuste anti obrero, anti popular y entreguista del gobierno ultraderechista de La Libertad Avanza y el FMI. Si hay “buenas noticias”, es para los grandes capitalistas, con ganancias récord en 2024, para los especuladores de bolsa y para los acreedores de la deuda usuraria, que esta semana se embolsarán 4.600 millones de dólares. Es que para ellos “sí hay plata”. La misma que se les niega a los jubilados, al conjunto de la clase trabajadora y a los sectores populares. Basta mirar los vencimientos de deuda externa de este año (más de 20.000 millones de dólares), que son la primera y exclusiva prioridad del gobierno, para comprender que en 2025 seguirán los ataques contra el bolsillo del pueblo trabajador.

En los primeros días del año, tuvimos una nueva tanda de despidos en el Estado, el anuncio del gobierno del congelamiento de los ingresos y una paritaria para los estatales donde la oferta es de un miserable 1% (luego de que las y los trabajadores del sector vienen de perder un 30% en 2024).

El ataque al pueblo trabajador no se limita a las y los estatales. Los despidos también afectan al sector privado. Se acaba de anunciar el cierre de una planta de la empresa Dass (fabricante en el país de Adidas, entre otras marcas), con 360 puestos de trabajo que se pierden, sumando a los más de 15.000 destruidos en la industria desde la asunción de Milei. Un proceso que pretenden profundizar en los próximos meses, al calor de la ola de importados con la apertura económica y cierre de establecimientos.

Una multitud repudiando el ataque a los espacios de Memoria

El gobierno no se limita al mero ajuste económico. Lo combina con lo que llama “la batalla cultural”. Estos primeros días del año lo ilustraron con los despidos y el virtual cierre de instituciones vinculados a la defensa de los derechos humanos, en particular los ubicados en el predio de la ESMA, con el Centro Cultural Haroldo Conti a la cabeza.

Frente a estos hechos, con que empezó el 2025, la pregunta de muchas compañeras y compañeros es cómo nos organizamos para enfrentarlos. La respuesta, como siempre, la da la propia realidad: una multitud se convocó en el predio de la ESMA el sábado 4, en el festival en repudio al cierre del Haroldo Conti y los otros sitios de Memoria y el despido de sus trabajadoras y trabajadores. Una cabal demostración de que no le resultará fácil a Milei y su gobierno ejecutar sus políticas negacionistas y de super ajuste.

¿Ya empezó el año electoral?

El gobierno vive un “veranito financiero” y trata de hacerlo durar lo más posible. Sus periodistas y troles amigos le dan manija a encuestas e informes supuestamente favorables tratando de meter la discusión en el esquema de un “año electoral”. En ese marco, aparecen los intentos de La Libertad Avanza de fagocitarse al PRO de Macri, e incluso a sectores importantes de la UCR. Ese hecho, junto a negociaciones sobre suspensión o anulación de las PASO y desdoblamiento de elecciones (como la que ya anunció Jorge Macri para la Ciudad de Buenos Aires) ocupan los titulares de los medios de comunicación.

Mientras tanto, ¿qué hace el peronismo? También está inmerso en la discusión pre electoral. No se repone de su propia crisis. Las peleas entre Cristina, Máximo y La Cámpora por un lado, contra Kicillof y la mayoría de los intendentes del conurbano, por otro, las discusiones sobre si desdoblar o no las elecciones en la propia provincia de Buenos Aires, ocupan toda la atención de los dirigentes de los distintos sectores internos.

Muchas compañeras y compañeros, que tenían expectativas de que el peronismo, en tanto principal fuerza patronal opositora, encabezara la resistencia al plan motosierra, hoy, con cierto desconcierto, no ven salida. Es que los “triunfos” de Milei en el Congreso (Ley Bases, mantenimiento del DNU que habilita el ajuste, confirmación de los vetos a los aumentos jubilatorios y a las partidas universitarias), sin duda, fueron lo que le dieron confianza a los sectores patronales para intentar avanzar por más.

Enfrentamos el ajuste y postulamos un programa alternativo

Ante este panorama decimos que no hay que confundirse: la bronca popular continúa y se acentúa. Somos miles los que no estamos dispuestos a dejar pasar las medidas reaccionarias de este gobierno, tal como se comprobó en el abrazo y posterior festival en la ESMA. Como venimos haciendo desde el sindicalismo combativo y desde el Frente de Izquierda Unidad, la tarea es apoyar las luchas que se vayan dando, rodearlas de solidaridad, buscando coordinarlas para que no queden solas y triunfen. En ese marco es que seguimos exigiendo a la CGT que rompa su pacto con el gobierno y llame a un nuevo paro general. No se trata, como de hecho está planteando el peronismo, simplemente de esperar a que el repudio a Milei se exprese en las urnas. Hay que organizarse para seguir enfrentando cada uno de los ataques a las y los trabajadores, a las y los jubilados, a la juventud, al movimiento de derechos humanos, de mujeres y disidencias y cualquier otro sector popular.

Por supuesto que también está en discusión que programa global le oponemos a la motosierra de Milei. Y acá el peronismo, de nuevo, no dice nada fuera de denunciar discursivamente las medidas de La Libertad Avanza. No es casualidad: es que nada tiene para ofrecer, fuera de las mismas políticas con las que ya fracasaron durante el gobierno de Alberto, Cristina y Massa. Por eso, desde Izquierda Socialista y el Frente de Izquierda Unidad, somos los únicos que postulamos un programa alternativo, de emergencia, obrero y popular. Arrancamos diciendo que ¡plata hay! Y que la crisis la paguen los que se beneficiaron con ella, las grandes patronales, los bancos y especuladores financieros y los pulpos usureros acreedores. Exigimos aumento general de salarios y jubilaciones para que nadie gane menos que el valor de la canasta familiar y ningún despido más, con la reincorporación de los que han perdido sus puestos de trabajo. Todo esto apoyando en lo más importante: suspender inmediatamente todos los pagos de deuda externa y romper con el FMI. Esto es lo que generará, junto con imponer un impuesto especial a los ricos y a las super ganancias y otras medidas como nacionalizar la banca y el comercio exterior y reestatizar las empresas privatizadas, el dinero suficiente para resolver las más urgentes necesidades populares: salario y jubilaciones dignas, trabajo genuino y plata para salud, educación y vivienda.

 

Deja un comentario

Los campos marcados (*) son necesarios para registrar el comentario.

Nuestro semanario. En el que te acercamos el reflejo de las luchas del movimiento obrero, las mujeres y la juventud, además un análisis de los principales hechos de la realidad nacional e internacional.

Es una herramienta fundamental para fortalecer a Izquierda Socialista y al Frente de Izquierda.

La suscripción del periódico impreso nos permite también seguir editándolo, ya que nos financiamos con nuestros propios aportes y del de los suscriptos.

 

Suscribite a la versión Impresa

Más Leídos