El actual presidente opera desde hace años en las mismas cuevas financieras de ladrones, lavadores de dinero, evasores, estafadores y narcotraficantes del planeta. Macri viene haciendo negocios sucios desde la dictadura. La “transparencia” del PRO es un verso total. Hay redoblar la lucha contra este gobierno empresarial y corrupto.
Escribe: Juan Carlos Giordano
Macri fue director de una sociedad en un paraíso fiscal de las Bahamas junto a su padre Franco Macri y su hermano. También tuvo otra de 1981 cuando existía la dictadura militar y le acaban de descubrir una nueva a nombre de su padre que lo involucra.
Esto generó un gran revuelo nacional. Salvo para Scioli, el ex candidato a presidente del Frente para la Victoria, diciendo que nada tiene que objetar ante el descargo del presidente. Laura Alonso (titular de la Oficina Anticorrupción) dijo al toque que “Macri no cometió delito”. Y la todo terreno Lilita Carrió “se convenció” ante la primer muestra por parte del Jefe de Gabinete de Macri de algún papel trucho “que los justificara”.
¿Todo legal?
Macri dijo “estoy tranquilo, todo es legal”. En la conferencia que brindó en la Rosada agregó: “vos no dudes por un instante que yo estoy acá para intentar ayudarte a que salgas adelante”. ¡A los mismos que les está descargando un brutal ajuste!
Para Macri es legal constituir una sociedad en un paraíso fiscal. ¿Pero quién la va a constituir si no es, como mínimo, para evadir impuestos? O sea, mientras Macri les roba a trabajadores y jubilados con el impuesto a las Ganancias, esquilma al pueblo con el 21% del IVA y pide “confianza” para que vengan capitales, se lleva la plata afuera para hacer sus negociados.
El fiscal federal Federico Delgado estuvo obligado a iniciarle una causa penal que el juez Cassanello ha dado curso citando a varios testigos. Lo dijimos desde un primer momento: Macri es un empresario millonario que vino haciendo en todos estos años fabulosas ganancias como parte de una familia dedicada a negociados con cuanto gobierno hubo. Y como presidente gobierna para los ricos, banqueros y multina- cionales: designó a gerentes de las multinacionales en el gabinete (los famosos CEO); eximió de impuestos a oligarcas del campo y megamineras y está descargando un ajuste con miles de despidos, tarifazos y salarios por debajo de la inflación.
A luchar contra este gobierno empresarial y corrupto
El presidente, demagógicamente, dona su sueldo a un comedor comunitario. Va a nombrar a un administrador (llamado “fideicomiso ciego”) para que, según dijo, “no se mezcle” su patrimonio privado de más de 50 millones de pesos con su actividad pública. Y arenga que denunciará a sus funcionarios corruptos. Pero el principal sospechado de ser parte de un clan ilegal al servicio de manejos turbios es él.
Macri quiso instalar con sus globos amarillos que el PRO es sinónimo de transparencia y honestidad. Pero no tiene nada que envidiarle a los escándalos de Lázaro Báez, Jaime o Cristóbal López. Por eso ya hay miles que lo repudian y crece el descontento. Los trabajadores del ministerio de Economía que luchan contra los despedidos cantan en las marchas: “No tengo cuentas, en Panamá, soy laburante del estado nacional”.
La conducta de Macri es la de todos los empresarios y políticos patronales. Prácticas que el sistema capitalista cobija en la más estricta impunidad. Hasta que la furia estalla. El primer ministro de Islandia fue echado por una movilización al mentir que no tenía una cuenta off shore. Y Cameron de Inglaterra está en la cuerda floja.
Macri ha quedado al descubierto y desprestigiado. Hay que aprovechar este momento para enfrentar con más fuerza su plan de ajuste, entrega y corrupción. Y batallar por cambios de fondo como proponemos desde nuestro partido y el Frente de Izquierda.
Nicolás Caputo: El Lázaro Báez de Macri
Amigos desde el secundario en el exclusivo Colegio Cardenal Newman. Socios desde siempre. Caputo es el titular del hasta hace poco casi desconocido “Grupo Caputo”, con empresas como Caputo Construcciones (obra pública), Mirgor (aires acondicionados) y participación en empresas de energía como Edesur. Cuando Macri fundó el PRO en 2002 Caputo fue su primer vicepresidente.
Macri y Caputo participaron juntos en innumerables emprendimientos, empezando por la propia Mirgor y siguiendo con el negocio de compra venta de jugadores cuando Mauricio era presidente de Boca. Luego, durante la gestión de Macri al frente del gobierno de la Ciudad, Caputo fue “el gran contratista”. Innumerables obras fueron denunciadas por sobreprecios (como las del Metrobús, las obras de remodelación del Teatro Colón o del Centro Cultural General San Martín).
Cuando asumió la presidencia Macri mintió al afirmar que su amigo Caputo no iba a participar más de contratos con el estado. Un par de semanas después recibió contrataciones del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires por casi 300 millones de pesos para refaccionar escuelas. Ahora Nicolás Caputo está pegando “el gran salto”: las acciones de sus empresas cotizan por las nubes (Mirgor acaba de ingresar al panel “selecto” del Merval, las 15 más importantes de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires). Por eso fue “premiado por sus pares”: a partir del 29 de abril Nicolás Caputo asumirá como Vicepresidente del Merval, la organización que controla y regula las transacciones bursátiles porteñas.
Otros personajes PRO denunciados
Néstor Grindetti
El actual intendente de Lanús está vinculado a Mercier Internacional, con domicilio en Panamá, que le otorgó un poder especial incluso para abrir cuentas en Suiza en 2010. Al igual que los demás implicados, Grindetti adujo que la empresa estaba “sin movimientos”. Todo esto sucedía mientras Grindetti era Secretario de Hacienda del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y uno de los funcionarios de mayor confianza de Mauricio Macri. Sospechosamente, fue justamente en ese año 2010 cuando Grindetti había sido denunciado por la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia debido a la operatoria de la emisión del Bono Tango S8, que endeudó a la Ciudad en 478 millones de dólares para la supuesta realización de obras en el subte, la mitad de las cuales no se habían ni siquiera licitado.
Grindetti no es un recién llegado al círculo macrista. Viene de trabajar en las empresas de Macri desde 1979 llegando a ser parte del directorio de SOCMA (Sociedades Macri S.A.). Difícilmente el actual intendente de Lanús pueda decir que era ajeno a las operatorias de la familia del presidente.
María Eugenia Talerico (HSBC)
Se trata de la ex abogada del Banco HSBC especializada en defenderlo ante denuncias de lavado de dinero, hoy en trámite ante la mismísima Corte Suprema de la Nación. El HSBC está denunciado por la apertura de centenares de cuentas en paraísos fiscales con el objetivo de lavado de dinero y evasión. Lo escandaloso es que Talerico fue nombrada por Macri vicepresidenta de la Unidad de Información Financiera, la entidad que tiene justamente como tarea controlar las operatorias de los bancos. Como se dice: el zorro cuidando el gallinero.
Darío Lopérfido
El ministro de Cultura porteño que viene de ser repudiado masivamente por sus declaraciones reaccionarias con respecto a los desaparecidos, también tiene cuentas off shore. Es el vicepresidente de Supernova Inc donde figura como presidente nada más ni nada menos que el ex “sushi” Antonito De la Rúa. Según Lopérfido, todo tenía que ver con los negocios de Shakira. Como se ve...todo muy PRO.
Claudio Avruj
El Secretario de Derechos Humanos de la Nación es otro de los escrachados por el “Panamá Papers”. Aparece como presidente de la empresa off shore panameña Kalushy. Avruj intentó defenderse diciendo que todo era parte de la operatoria de una ONG de la colectividad judía vinculada a los derechos humanos, B ́nai B ́rith. Pero el tiro le salió por la culata. Esta dijo que nunca tuvo nada que ver con Kalushy y que lo que sí ha sucedido anteriormente es que se han abierto sociedades a su nombre con fines ajenos a la institución para lavado de dinero y evasión fiscal. No menos podía esperarse del ex socio de Rubén Beraja, el vaciador del Banco Mayo.
