Jul 17, 2024 Last Updated 6:38 PM, Jul 16, 2024

Por Prensa UIT-CI

Este Primero de Mayo hubo movilizaciones y actos en todo el mundo. Que se produjeron en medio de una agudización de la peor crisis del sistema capitalista-imperialista mundial. En medio de los recortes y ajustes sociales  del FMI y de la invasión del genocida Putin a Ucrania.

Hubo marchas en Europa, en Latinoamérica; en Colombo, Sri Lanka, miles salieron a la calle, luego de una rebelión popular que cuestionó al gobierno y el pago de la deuda externa; en Filipinas hubo una protesta organizada por sindicatos tailandeses y sindicatos de trabajadores; en Ankara y Estambul, Turquía, hubo manifestaciones pese a que están prohibidas desde hace años por el régimen autoritario de Erdogan, entre otras. El pueblo palestino sigue resistiendo al sionismo de Israel.

Las trabajadoras y trabajadores siguen peleando contra un sistema desigual que condena a las mayorías a salarios de hambre, a condiciones de miseria y explotación creciente mientras unos pocos se enriquecen a costa de su trabajo y esfuerzo. La gran traba son las direcciones políticas y sindical que en nombre del pueblo trabajador traiciona y boicotea las luchas. Porque en este 1° de Mayo sigue la lucha por nuevas direcciones sindicales antiburocráticas que lleven las luchas hasta el final.

Hoy se impone la lucha contra la precarización y flexibilización laboral, contra el desempleo, contra la desigualdad, la miseria creciente y la destrucción de la vida en el planeta. Como así también la unidad internacional de la clase trabajadora por la pelea contra la injerencia imperialista y las guerras, como la invasión de Putin y el imperialismo ruso a Ucrania. En este sentido la posición de los socialistas internacionalista está con la clase obrera mundial, particularmente con la ucraniana que resiste heroicamente la invasión rusa, pero también denunciando a la OTAN y sus pretensiones imperialistas.

En ese marco desde la Unidad Internacional de Trabajadoras y Trabajadores-Cuarta Internacional (UIT-CI) llamó a seguir la lucha. Por un plan de Emergencia Obrero y Popular. Altos impuestos a los capitalistas y No pago de las deudas externas. Por la expropiación de las transnacionales. Por el fin de la invasión imperialista en Ucrania, contra Putín, por el triunfo de la resistencia popular y de la clase obrera ucraniana, diciendo NO a la OTAN y toda injerencia imperialista en Ucrania. La unidad de los revolucionarios para luchar por nuevas direcciones sindicales antiburocráticas y combativas, por partidos revolucionarios en todos los países y una Internacional revolucionaria.

Bajo estos objetivos las secciones de la UIT-CI participaron en este 1 de mayo en diversas manifestaciones y actos de lucha obrero y popular en diversas partes del mundo.

Argentina

 

Brasil

 

Chile

Estado español

Turquía

 

Venezuela

 

#declaración
Somos la red de voluntarios antiautoritarios de Ucrania, “Operación Solidaridad”

Aunque somos personas que tenemos muchos puntos de vista diferentes, compartimos una comprensión común de la agresión rusa. Ese entendimiento es, en resumen: que condenamos la invasión de la Federación Rusa y su liderazgo que la ha orquestado.

Como activistas anti autoritarios, nos unimos inmediatamente al movimiento de resistencia al comienzo de la guerra. Muchos de nuestros camaradas se unieron a las filas de las fuerzas de defensa. Nuestro propósito, por lo tanto, es proporcionarles todo lo que necesitan, así como ayudar a otros en necesidad siempre que podamos.

Uno podría preguntarse: "¿Cómo pueden las personas que se han opuesto constantemente al estado durante muchos años ahora defenderlo con armas y solicitar equipos militares de todo el mundo?" Nos une nuestra comprensión de esta guerra como imperialista y como un acto de agresión contra el pueblo. Aquí están nuestras razones por las cuales:

Esto no es, para usar las palabras del Kremlin, una "guerra de desnazificación". Ucrania ciertamente tiene un problema de extrema derecha, pero su escala e influencia son exageradas por la propaganda rusa, que explota y parasita el lenguaje y la tradición del antifascismo. Ucrania es un país mucho más libre que Rusia, que cada día se parece más a un régimen fascista desde que comenzó la guerra.

Esta no es una guerra para liberar a los ucranianos de habla rusa. Hoy en día, la mayoría de los combates que tienen lugar en Ucrania tienen lugar en las zonas predominantemente de habla rusa, donde los rusohablantes son las principales víctimas de estos atroces crímenes de guerra. Es por eso que los ucranianos no saludan “al ejército ruso con flores y, en cambio, se alistan con la Defensa Territorial para encontrarse con “los libertadores” de una manera muy diferente a la que afirma Rusia.

Esta no es la guerra de Rusia contra la OTAN. Tampoco es la guerra de la OTAN contra Rusia con Ucrania como representante. Somos críticos con el imperialismo occidental que es tan evidente en otras partes del mundo. Sin embargo, es Rusia, un estado que intenta imponer su hegemonía en la región, la responsable de esta guerra en particular. Si la neutralidad de Ucrania y la expansión de la OTAN hacia el Este fueran las verdaderas razones de la guerra, ya terminaría. O, tal vez, ni siquiera comenzaría.

Esta es también la guerra de Putin contra su propio pueblo. La “operación especial”, como exige y hace cumplir el estado ruso que se denomine, permitió al Kremlin instituir una dictadura brutal, reprimir manifestaciones contra la guerra, erradicar todos los medios de comunicación de oposición y dejar a tantos ciudadanos rusos que no estaban de acuerdo. con el gobierno para salir del país. Bielorrusia también se encuentra en la misma situación. La política rusa trata esta represión sistemática de la disidencia y la libertad como un anteproyecto de la hegemonía que desea establecer sobre esta región en su conjunto.

Las ambiciones imperiales de Rusia generan demandas de una magnitud demasiado costosa para que cualquiera pueda estar de acuerdo con la "paz a cualquier costo". Someterse a sus demandas conduciría inevitablemente a la derrota de todas las fuerzas progresistas regionales. Lo que implica un tratado de paz depende en gran medida de la situación en los campos de batalla. Por eso llamamos a todos aquellos para quienes la libertad, la igualdad, la hermandad y la hermandad no son palabras vacías, a apoyar el movimiento de resistencia ucraniano. Hay varias formas de hacerlo, como por ejemplo:

Apoyar directamente a las Fuerzas Armadas de Ucrania o la Defensa Territorial;
Apoyar movimientos de voluntarios e iniciativas humanitarias;
Ayudar a los refugiados ucranianos;
Exigir que sus gobiernos brinden ayuda financiera, humanitaria o militar a Ucrania;
Abogar por la cancelación de la deuda externa de Ucrania, que sería vital para la reconstrucción de la posguerra.

Finalmente, puedes apoyar la “Operación Solidaridad”. Al hacerlo, puede estar seguro de que su apoyo ayudará a los antiautoritarios que luchan por la sociedad libre. Una sociedad libre de prejuicios, desigualdades y agresiones.

Estoy viajando a Ucrania junto a compañeras y compañeros de la Unidad Internacional de Trabajadoras y Trabajadores-Cuarta Internacional (UIT-CI), como parte de la campaña internacional Operación Solidaridad que impulsan sectores de la izquierda en la resistencia.

Desde Izquierda Socialista de Argentina y Lucha Internacionalista del Estado Español vamos a llevar materiales de primeros auxilios que se entregarán a la izquierda ucraniana como parte de la ayuda que hemos recolectado internacionalmente.
En Argentina estamos impulsando una campaña de aportes económicos a través de un bono solidario y contribuciones por los medios digitales.

Esta campaña también es impulsada con charlas de esclarecimiento y todo tipo de actividades que denuncien la situación del pueblo ucraniano.

Las y los trabajadores, jóvenes, mujeres y demás sectores populares tenemos que decir bien fuerte: Fuera la invasión criminal de Putin y de Rusia que ha provocado una verdadera catástrofe humanitaria. Apoyo a la heroica resistencia del pueblo ucraniano. No a la OTAN y a toda injerencia imperialista en Ucrania.

Es un orgullo ser parte de esta experiencia internacionalista, y agradecemos desde ya a quienes se están solidarizando con esta campaña y lo están haciendo posible.

Sumate con tu colaboración. Adquirí el bono a precio solidario



Pedilo a quien te acerca El Socialista, o a través del 11 6258-8523

Podés aportar por Mercado Pago al mismo número o por transferencia bancaria: CBU 0290068110000525850707 / Alias SOLIDARIDAD.2022


Escribe Miguel Lamas, dirigente de la UIT (CI)

Emmanuel Macron fue reelecto presidente de Francia en segunda vuelta contra la ultraderechista Le Pen, con una fuerte abstención del 28% (la mayor desde el ‘69, después del mayo francés) y otro 6% de voto nulo. El triunfo de Macron no motivó ningún festejo popular.

El domingo a la noche, conocidos los resultados, las calles de París estaban vacías. El voto que recibió de sectores populares se debió en gran medida a que querían evitar que triunfe la ultraderecha de Le Pen. Pero en los días previos a las elecciones hubo importantes movilizaciones estudiantiles y obreras, con la consigna “Ni Macron ni Le Pen”.

En primera vuelta, el centroizquierdista Jean-Luc Mélenchon, de Francia Insumisa, había sacado 22% de la votación, Le Pen 23% y Macron 27%.

Por su parte, Marine Le Pen logró en segunda vuelta una importante votación de campesinos y obreros que odian a Macron por descargar la crisis económica sobre los trabajadores.   

Ahora vienen nuevas elecciones en junio para elegir al Parlamento. El centroizquierdista Mélenchon aspira a ganar con el apoyo del Partido Comunista (PC) y del Partido Socialista (PS), que eran muy fuertes y estuvieron casi desaparecidos en recientes elecciones.

El PS, socialdemócrata, gobernó Francia durante años. El propio Macron, antes de ser presidente, fue ministro de economía de un gobierno del PS. Y antes de ser ministro fue subdirector del gran banco Rothschild, asociado a las transnacionales Nestlé y Pfizer.

Crisis económica, social y política

El marco general de esta elección son las consecuencias de la crisis económica descargada sobre el pueblo trabajador en los últimos años. Macron rebajó impuestos a las grandes empresas, y facilitó la precariedad laboral y los despidos. Esta situación fue respondida con grandes movilizaciones populares, como la de los “chalecos amarillos” (contra el aumento de la nafta) e importantes huelgas.

La consecuencia política fue un total y creciente descrédito de los antiguos partidos, desde la derecha tradicional a la centroizquierda del PS y el PC, que gobernaron o cogobernaron.

Macron surgió y triunfó en el 2017, diferenciándose de estos viejos partidos, diciendo que “no era de izquierda, ni de derecha” y que iba a gobernar pragmáticamente “sin ideologías” para “mejorar la economía”. Ahora, nuevamente en campaña electoral, habló de “proteger a los vulnerables”, cuando en los últimos meses en Francia muchos alimentos de primera necesidad aumentaron hasta un 85%, como consecuencia de la guerra de Ucrania, sin que los salarios aumenten.

También, y por motivos parecidos de ruptura con los viejos partidos, creció la extrema derecha de Le Pen.

La necesidad de construir alternativa revolucionaria

Lamentablemente las organizaciones que se dicen trotskistas, que se presentaron a elecciones como el Nuevo Partido Anticapitalista y Lucha Obrera, tuvieron muy baja votación en primera vuelta. No impulsaron una unidad de la izquierda revolucionaria y de los trabajadores, que podría haber avanzado en una alternativa visible  para las masas oprimidas que rompen con los viejos partidos.

Para la segunda vuelta el centroizquierdista Mélenchon, que fue quien capitalizó los votos de izquierda, llamó a votar “contra Le Pen”, sin decir nada de Macron, y ahora proyecta ganar las parlamentarias para cogobernar como primer ministro, de acuerdo a la ley francesa.

En lo inmediato, el precario triunfo de Macron hace posible y necesaria la unidad para la lucha de los trabajadores, exigiendo a las centrales sindicales un plan de lucha por las demandas más urgentes, de aumento salarial, no al aumento de edad jubilatoria, defensa del empleo, contra despidos, impuestos a las grandes empresas. Las manifestaciones estudiantiles y obreras “ni Macron ni Le Pen” muestran la necesidad de construir una alternativa revolucionaria ante la crisis capitalista y política que vive Francia.

Con la participación de treinta y dos organizaciones de veintiún países distintos, se realizó en Dijon (Francia) entre el 21 y 24 de abril, el 4º encuentro de la Red Sindical Internacional de Solidaridad y de Luchas. Se reunieron más de 150 participantes y otros 52 no pudieron hacerlo por problemas de visado. Las delegaciones más numerosas correspondían a CSP- Conlutas (Brasil), Solidaires (Francia) y CGT (Estado Español), las organizaciones impulsoras de la red. La Unidad Internacional de Trabajadoras y Trabajadores-Cuarta Internacional (UIT-CI) y la sección en el Estado Español Lucha Internacionalista (LI), participamos en calidad de observadores. En el encuentro fue muy importante la colaboración con los compañeros sindicalistas del STTC (call centers) y STOP (profesores) y militantes del MAS (Portugal).

 Se abordaron discusiones por sectores con el objetivo de establecer estrategias comunes y coordinar mejor las actividades de solidaridad en los conflictos sindicales. Entre las luchas destacó la intervención de Adriana Urrea secretaria general del sindicato de Subnotimex (México), que lleva más de dos años de larga huelga en la agencia de noticias pública. Se aprobó una campaña de apoyo a su lucha. Asimismo, se abordaron debates temáticos como mujer, racismo, migraciones, control obrero.

 Los puntos de debate centrales fueron los de Ucrania y Palestina. El primero lo presentó una compañera en representación del sindicato Unión Independiente de Mineros de Kryvyi Rih, presentando la lucha del sindicato y la clara determinación del pueblo ucraniano de enfrentar la invasión de Putin. Muy importante en este punto fue el informe que presentó el delegado del sindicato polaco Inicjatywa Pracownicza (Iniciativa Obrera), que juega un papel muy destacado en la coordinación de la solidaridad, tanto en la acogida de refugiado Ws/as, como en los convoyes que se están realizando a sindicatos ucranianos o en la campaña Operation Solidarity.

 El encuentro venía marcado por el convoy que días después salía de Francia, con veintiún sindicalistas de Solidaires, CSP Conlutas y SICOBAS (Italia), para entregar ayuda humanitaria el 1º de mayo en Lviv (Ucrania) al sindicato minero de Kryvyi Rih. En el debate, Diego Vitello, delegado del Metro de San Pablo, integrante de Conlutas y dirigente de CST (UIT-CI) reafirmó el apoyo a la resistencia ucraniana y la necesaria solidaridad internacionalista de clase para apoyar el sindicalismo y los sectores de la izquierda ucraniana, como la Operation Solidarity, desde una posición opuesta a la OTAN y a los imperialismos norteamericano y europeos. La reunión nos permitió establecer lazos con el sindicato minero ucraniano y el sindicato polaco IP, con vistas al envío del material médico que llevaremos en la Operation Solidarity en los primeros días de mayo.

También tuvo un punto específico Palestina, con un delegado del sindicato de correos de Hebrón. Denunció la política sionista, las graves condiciones que han vivido en este periodo de pandemia bajo el apartheid que aplica Israel contra los y las palestinas, y la agravación de la represión de las últimas semanas. Por último, hizo un llamado a continuar con la solidaridad con el pueblo palestino y a mantener las campañas de BDS contra el sionismo. Se votó una resolución de apoyo. Con otra resolución se solidarizó con el pueblo saharaui, reafirmando su derecho a la autodeterminación. Una más exigió el fin de la represión y la libertad de los represaliados en Cuba.

 Otras dos mesas, sobre precariedad y ecología completaron los debates en el encuentro. Se aprobaron numerosas resoluciones, entre ellas una actualización del manifiesto de la Red Sindical Internacional de Solidaridad y de Luchas. Se fijó para dentro de dos años el 5° encuentro que tendrá lugar en Brasil.

 


De izquierda a derecha: André Pestana (Sindicato de Profesores y del MAS de Portugal), Diego Vitello (Delegado Metro San Pablo y de la CST, Brasil), Isarn Pardes (Lucha Internacionalista (LI), Estado Español, UIT-CI), Angela Lima (MAS de Portugal), Nuno Geraldes (Sindicato Calls centers y del MAS) y Josep Lluis Alcázar (LI y del Secretariado Internacional de UIT-CI).


Corresponsal UIT-CI,
26 de abril de 2022

Nuestro semanario. En el que te acercamos el reflejo de las luchas del movimiento obrero, las mujeres y la juventud, además un análisis de los principales hechos de la realidad nacional e internacional.

Es una herramienta fundamental para fortalecer a Izquierda Socialista y al Frente de Izquierda.

La suscripción del periódico impreso nos permite también seguir editándolo, ya que nos financiamos con nuestros propios aportes y del de los suscriptos.

 

Suscribite a la versión Impresa

Más Leídos

Asonada militar frustrada en Bolivia

Asonada militar frustrada en Bolivi…

03 Jul 2024 El Socialista N° 585

Pacto de Mayo en Tucumán / Milei firma “el acta de la dependencia”

Pacto de Mayo en Tucumán / Milei f…

08 Jul 2024 COMUNICADOS DE PRENSA

Después de la Ley Bases / Un gobierno en crisis

Después de la Ley Bases / Un gobie…

03 Jul 2024 El Socialista N° 585

Loan: la desaparición que indigna a un país

Loan: la desaparición que indigna …

03 Jul 2024 El Socialista N° 585