Estados Unidos preparó y financió el golpe en Argentina y en muchos países latinoamericanos bajo el llamado Plan Cóndor. El objetivo fue imponer planes de ajuste y de entrega que siguen hasta hoy, como lo demuestran los despidos y la quita de impuestos a los oligarcas del campo y a las mineras. Para eso tuvieron que terminar con una generación de luchadores obreros y populares con las más atroces violaciones a los derechos humanos, torturas, cárcel, desapariciones y centros clandestinos de detención.
Que venga Obama a Argentina no es casualidad. Viene a apoyar el ajuste de Macri y su decisión (compartida por la mayoría de los políticos del peronismo) de pagarle 15.000 millones de dólares a los fondos buitre. Mientras los trabajadores estatales y de otros sectores privados sufren despidos y los docentes paran en varios provincias contra los aumentos salariales miserables.
Obama quiere mostrarse “distinto”, pero mantiene sus tropas invasoras en Afganistán; bombardea junto con Rusia al pueblo de Siria; avala al sionismo contra el pueblo palestino y ante la crisis económica mundial capitalista apoya junto al FMI y las multinacionales los planes de ajuste en todo el mundo, provocando que millones se hundan en la pobreza.
Por eso este 24 vamos a repudiar su visita y a decir bien fuerte que no hay que pagar ni un peso más de la fraudulenta deuda externa. Deuda contraída por Videla y Martínez de Hoz, que siguieron pagando todos los gobiernos posteriores (Alfonsín, Menem, De la Rúa, Néstor y Cristina Kirchner), la cual asciende hoy a más de 350.000 millones de dólares.
Obama y Macri, por su parte, intentarán lavarse la cara el 24 de marzo yendo a la ESMA o diciendo que “defienden los derechos humanos”. ¡Pero son quienes los violan! ¡Obama en el mundo y Macri en el país! Macri dice que ahora hay que acordarse de “otros derechos humanos”, como la pobreza, simulando que su gobierno la combate. ¡Miente descaradamente! Porque está aplicando un brutal ajuste que lejos de llevarnos a la “pobreza cero”, como promete, está generando más pobres.
La lucha contra la impunidad empezó con la propia resistencia en plena dictadura. Siguió contra las leyes de Obediencia Debida y Punto Final con Alfonsín. Luego contra los indultos menemistas y el gobierno kirchnerista. Y se mantiene hoy contra la impunidad que sigue con este gobierno, que pretende frenar la protesta social con el protocolo anti piquete.
Todos estos años nos hemos movilizado tras las banderas del Encuentro Memoria Verdad y Justicia como lo haremos nuevamente el próximo 24. Un colectivo de organizaciones sociales, de derechos humanos y partidos de izquierda que mantuvo las banderas de la independencia política y de movilización, en oposición a los organismos de derechos humanos que fueron cooptados por el kirchnerismo para que dejen de enfrentar sus políticas de impunidad.
El kirchnerismo volverá a decir que la lucha contra la impunidad comienza ahora con Macri. No. Por eso nos movilizamos en los doce años de gobierno K. El peronismo kirchnerista quiso hacer creer que “defendió los derechos humanos”, pero hizo lo contrario. Lo muestra la desaparición de Julio López; el nombramiento del represor Milani en el Ejército; la votación de la Ley Antiterrorista apenas ganó Cristina con el 54% de los votos (ley que se aplicó contra periodistas y luchadores anti mineros); el Proyecto X para perseguir y espiar a los luchadores; el avance de la criminalización de la protesta social; la negativa para desprocesar a los luchadores sociales y la aplicación de un modelo económico al servicio de pagar la deuda externa y en beneficio de las multinacionales. Y si bien se avanzó en los juicios contra los genocidas fruto de la anulación de las leyes del perdón (por la lucha popular, no por el kirchnerismo), la amplia mayoría de los represores siguen sueltos.
Por eso el 24 de marzo llamamos a movilizar con el Encuentro Memoria Verdad y Justicia. Gritaremos bien fuerte: ¡Fuera Obama! ¡Fuera yanquis de Argentina y de América Latina! ¡Cárcel común y perpetua a todos los genocidas! Desmantelamiento del aparato represivo. Abajo el protocolo antipiquete, la ley antiterrorista y el Proyecto X. Desprocesamiento de los 6000 luchadores sociales. Restitución de los niños nacidos en cautiverio apropiados por los represores.
¡No al plan de ajuste y entrega de Macri! No al pago a los fondos buitre. ¡Plata para salario, trabajo, salud, educación y vivienda, no para la deuda externa!
También reivindicaremos la lucha de los 30 mil desaparecidos. Entre ellos, a los compañeros de nuestro partido antecesor, el PST (Partido Socialista de los Trabajadores), quienes dieron la vida por el socialismo.
Llamamos a los trabajadores, jóvenes y viejos compañeros de lucha a marchar por miles este 24 de marzo y a sumarse a las columnas de Izquierda Socialista como parte del Frente de Izquierda.