Las Fuerzas Armadas de Turquía han realizado bombardeos en la ciudad de Ras al Ayn, en la región kurda de Afrin en Siria, y han invadido el territorio kurdo. Los ataques contra los pueblos del Kurdistan sirio|Rojava, que se han iniciado el día sábado en Afrin y con el transcurso de las horas se ha extendido hacia la población civil de otras ciudades cercanas.

La milicia kurda, denunció que al menos 18 civiles, incluyendo mujeres y niños han resultado muertos por el ataque turco. Esto agrava aún más los sufrimientos del pueblo sirio y kurdo sirio, después de 5 años de guerra civil, centenares de miles de muertos y millones de refugiados.

Turquía interviene para intentar aplastar las fuerzas kurdas en Siria, porque los considera enemigos potenciales de su Estado, ya que dentro de Turquía son oprimidos 15 millones de kurdos que reclaman sus derechos y también son brutalmente reprimidos por el Estado turco bajo el régimen dictatorial de Erdogán. Actualmente hay unos 17.000 kurdos en las cárceles de Turquía sufriendo torturas y violaciones de sus derechos humanos elementales, incluyendo a seiscientos menores encarcelados con sus madres.

Los kurdos son una nacionalidad oprimida, de unos 30 millones, con su propio idioma y cultura, repartida entre varios países. La mitad viven en Turquía y el resto en el norte de Siria, Irak e Irán. Durante la guerra civil siria han conquistado una autonomía parcial en esa zona fronteriza con Turquía. Aunque supuestamente Estados Unidos los apoya, para utilizarlos en su intervención en Siria, ahora, ante el ataque, solo pidió a Turquía (que es su aliado en la OTAN) “moderación” en su ofensiva. El imperialismo es cómplice de esta agresión criminal de Erdogan sobre el pueblo kurdo.

También lo es Putin y Rusia, que intervienen en Siria para apoyar al dictador genocida de Bashar Al Assad, y ahora miran para otro lado.

Este nuevo ataque turco es parte de la intervención de distintos ejércitos imperialistas y de potencias regionales, para aplastar la resistencia popular siria que se había iniciado en el 2011, aunque tengan contradicciones entre sí. Todas estas intervenciones han contribuido, directa o indirectamente, a fortalecer a la dictadura Siria que hace dos años estaba a punto de caer.

Llamamos a la solidaridad internacional con el pueblo kurdo, agredido criminalmente en Siria por Erdogan y sus fuerzas armadas. Exigimos el fin de las intervenciones de Turquía en Afrin y en el norte de Siria. Que cesen los bombardeos y la invasión. A su vez, debemos exigir que se retiren de Siria las intervenciones militares de Rusia, Irán, Estados Unidos, Europa y las potencias regionales. Llamamos a la unidad de acción para realizar concentraciones y acciones de repudio frente a las embajadas o consulados de Turquía en todo el mundo.

Basta de intervención de Turquía contra el pueblo kurdo en Siria!

Fuera Rusia, EE.UU y la OTAN de Siria!

Abajo Bashar Al Assad!

Solidaridad incondicional con el pueblo kurdo! Por su derecho a la autodeterminación nacional!

Unidad Internacional de los Trabajadores (UIT-CI)

23 de enero de 2018