El 3 de junio de 2015 fue un hito para el movimiento de mujeres en la historia de nuestro país. En aquella jornada, ciento de miles de mujeres nos movilizamos para exigir que terminen los femicidios bajo la consigna #NiUnaMenos que rapidamente se popularizó y se expandió por todo el planeta. Desde entonces, las mujeres fuimos avanzando en la lucha y nuestras demandas se ampliaron. Ya no peleamos saliendo a las calles solamente para que dejen de matarnos, sino que denunciamos todas las violencias de las que somos víctimas: física, sexual, psicológica, simbólica y económica. Todas violencias que se perpetúan para mantenernos como ciudadanas de segunda con menos derechos. Frente a esto, nos rebelamos en el mundo entero y nos organizamos para pelear contra todos los gobiernos que son los responsables de esta situación.

La lucha de las mujeres chilenas está en pleno ascenso. Desde fines de abril, cerca de 40 universidades y más de 15 colegios iniciaron paros y tomas feministas contra la violencia sexual y por una educación no sexista. Con epicentro en las universidades, se ha iniciado una movilización de carácter nacional que pone al descubierto prácticas naturalizadas en la sociedad patriarcal. En Chile, las tomas marcan un antes y un después en la perspectiva del movimiento de mujeres del país. La última encuesta CADEM sostiene que el 71% del país apoya esta lucha, y un 91% considera que hay que seguir avanzando en igualdad.

El 66% de la población en Irlanda votó a favor del derecho al aborto. El pasado 25 de mayo, se realizó un plebiscito para que se quite el artículo 84° de la constitución que prohibía el aborto en ese país. El triunfo fue contundente e histórico en un país de fuerte tradición católica y con una de las legislaciones más restrictivas en europa.
Este triunfo del Sí, reafirma la contundencia del movimiento de mujeres a nivel mundial que no se detiene y continúa peleando por sus derechos, en esta nueva oleada de luchas feministas.

“Hoy el Gobierno, a través de la adopción del primer Plan Nacional de Acción para la Prevención, Asistencia y Erradicación de la Violencia contra las Mujeres con presupuesto propio, transforma ese interés en un componente de la Agenda Política y eso, de por si es un avance.”, afirmó recientemente Fabiana Túñez (presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres). Pero, ¿qué quiso decir con esto? -¿Será que las mujeres estamos más cerca de no sufrir la violencia machista -que tiene su punto más extremo en los femicidios- y no nos enteramos? ¿Será que se está cumpliendo plena y efectivamente la Ley 26.485 para la prevención, sanción y erradicación de la violencia hacia las mujeres y no nos dimos cuenta?

Angélica Lagunas, es dirigente y luchadora docente, diputada provincial por Izquierda Socialista en el Fente de Izquierda, es maestra e integrante de nuestra agrupación de mujeres Isadora. Desde que asumió la banca en diciembre del año pasado, estuvo al servicio de todas las luchas que en la provincia dan las trabajadoras y los trabajadores, las mujeres, los pueblos originarios y la juventud. Y particularmente, siendo ella secretaria general de ATEN capital, (el gremio docente) hasta que asumió su banca jugó y sigue jugando un rol muy destacado en la pelea que las docentes neuquinas dan en defensa de la educación pública.

Cuando hablamos de violencia de género sea psicológica, física, sexual, económica y simbólica, solemos pensarlas en relación a la pareja o la familia. Pero la violencia de género, en tanto búsqueda de dominio sobre las mujeres, basado en el patriarcado que nos ubica como si fuéramos personas inferiores, se expresa en todos los ámbitos de nuestras vidas. Más aun, en el trabajo, esta forma de organización social que busca oprimirnos, es utilizada por el capitalismo para super-explotarnos, es decir, para que trabajemos más por menos salarios, que aceptemos peores condiciones de trabajo y de vida, etc.

Celestina Oropeza fue asesinada a golpes en 2005, en la localidad de Nonogasta (Chilecito) tenía 23 años, humilde, trabajadora, de la colectividad boliviana y madre de tres niñas. Luego de 13 años de impunidad el juicio oral y público llegó con un único imputado, Ochoa Coppe, quién fue señalado por la fiscalía como un partícipe necesario en el femicidio. Las organizaciones de mujeres independientes como Isadora, estuvimos acompañando a la familia con manifestaciones en la plaza principal, mientras se llevaba adelante el juicio.