En Unione e Benevolenza, colmado de viejos y nuevos militantes, Izquierda Socialista realizó el sábado pasado un gran acto en conmemoración de los cien años de la Revolución Rusa de 1917, reafirmando su vigencia. El evento incluyó una galería de reproducciones de fotografías de la gesta revolucionaria y carteles gráficos representativos de las vanguardias artísticas que impulsó la revolución. Asimismo, contó con la proyección del saludo desde Coyoacán, México, de Esteban Volkov, nieto de León Trotsky, de 91 años de edad, que fue testigo del asesinato del líder bolchevique en 1940. También hubo videos con saludos fraternos de los partidos hermanos de la Unidad Internacional de los Trabajadores-Cuarta Internacional (UIT-CI). El mismo día se desarrolló otro gran acto en Córdoba, con la presencia de una delegación del conflicto de Plascar, y hubo distintas actividades del partido en las demás provincias.

Fueron oradores del acto en Buenos Aires nuestros diputados por Izquierda Socialista/FIT Juan Carlos Giordano y Laura Marrone. Marrone comenzó afirmando que las lecciones de Octubre siguen guiando nuestra acción revolucionaria; se refirió a la conquista, por parte de las mujeres, de los derechos más avanzados para ellas, cambiando radicalmente las bases sociales de la opresión; enumeró los tremendos avances en educación y salud y en el plano de la cultura, y finalizó afirmando que frente al cáncer del capitalismo, que amenaza la calidad de vida de los pueblos y del planeta, el socialismo sigue siendo el único proyecto posible y necesario para el futuro de la humanidad.

A su vez, Giordano señaló que la Revolución Rusa demostró que solo a partir del gobierno de los trabajadores los males del capitalismo pueden quedar atrás. Reivindicó las medidas de fondo impulsadas por los bolcheviques y destacó que no fracasó el socialismo, como quisieron hacernos creer a millones, sino el estalinismo, que es justamente lo opuesto al socialismo con democracia obrera de Lenin y Trotsky. Y que no alcanza con las luchas sindicales, populares o electorales; de ahí la necesidad de construir partidos revolucionarios como el de los bolcheviques, con plena democracia hacia su interior, que hagan triunfar las extraordinarias luchas de las masas en todo el mundo contra los ajustes de los gobiernos, las direcciones reformistas y la burocracia sindical y que peleen por el poder, el gobierno de los trabajadores y el socialismo.

Por último, Giordano terminó afirmando que esa es la tarea histórica que, sin autoproclamación ni sectarismo, asumimos desde Izquierda Socialista y la UIT-CI, en la tradición de nuestro maestro Nahuel Moreno y el glorioso PST, impulsando la unidad de los revolucionarios para ganar influencia en amplios sectores de masas y avanzar en la reconstrucción de la Cuarta Internacional, el partido mundial de la revolución socialista. Al cierre del acto entonamos las estrofas de la Internacional, el himno internacional de los trabajadores, redoblando nuestro compromiso por sumar militantes a la impostergable lucha por el socialismo mundial. Las banderas de la Revolución de Octubre están más vigentes que nunca.