Con Alberto y Cristina seguirán el ajuste y el FMI
La fórmula de Alberto y Cristina tratan de hacer el máximo silencio sobre que harán con la deuda y el FMI. “Cumpliré con los acreedores” y “renegociaré con el Fondo”, fueron sus únicas palabras al respecto. Sin embargo, cada vez son más los periodistas y economistas que sostienen lo mismo que nosotros: así se va derecho a un ajuste aún mayor que el actual.
Escribe José Castillo, Candidato a diputado por la Ciudad de Buenos Aires
Lo dijo Nelson Castro el fin de semana pasado: “Lo que se puede leer –sin ser economista– es que si no hay planteos económicos muy concretos de ninguno de los dos candidatos con más opción a ganar y no hay un programa económico concreto, sino que hay indefiniciones y algunas chispas e ideas para alentar debates, es porque las medidas económicas que debería tomar cualquiera que esté sentado el 11 de diciembre en la Casa de Gobierno son inconfesables: reforma previsional, reforma laboral que nos ponga a la par –en términos de competitividad– de lo que ya ha hecho Brasil (Perfil, 28/7). Clarísimo. Del macrismo nadie tiene dudas que va a continuar con el ajuste.
Pero resulta que Alberto Fernández hasta ahora se había limitado a decir que iba a resolver la crisis económica “con creatividad”. Ahora, ya sobre el final de la campaña y ante la creciente polarización, empezó a lanzar promesas del tipo “vamos a darle medicamentos gratis a los jubilados”, “vamos a subir un 20% la mínima” o directamente “daremos un 20% de aumento de salarios”. Todo mientras, a la vez, insiste en que no romperá con el FMI y se pagarán puntualmente los vencimientos de deuda externa.
La pregunta del millón sigue siendo: ¿Cómo va a hacer si el Fondo sólo acepta renegociar a cambio de un mayor ajuste más las reformas previsional y laboral? ¿De dónde va a salir la plata para cumplir con esas promesas y a la vez pagar nada más ni nada menos que 150.000 millones de dólares de deuda externa en los próximos tres años? La respuesta la dio Guillermo Calvo. Lo presentamos: se trata de un economista liberal, profesor en la Universidad de Columbia (Estados Unidos), que se hizo famoso por predecir el “efecto tequila” (como se llamó a la crisis mundial con epicentro en México en 1994). Sin compromisos con la Argentina, afirmó en una entrevista a medios chilenos lo que “nadie dice en público” (pero todos los economistas que asesoran a Fernández-Fernández susurran en privado):
“Hay que hacer cosas políticamente muy impopulares… hay que empezar a echar gente en el sector público” (Diario Financiero y La Tercera, Santiago de Chile, 25/7) y, lo más importante, “No estoy a favor de Cristina ni de su gente, pero debo reconocer una cosa: si sube Cristina, ella puede mirar para atrás y decir ‘miren el lío que nos dejó este hombre. Ahora yo tengo que hacer el ajuste que el debió haber hecho y no hizo’”.
El periodista repregunta para precisar: “hay una trampa ahí entonces”.
“Si, de repente Cristina es lo mejor que le puede pasar al país, curiosamente”.
“Porque va a aplicar políticas de derecha”, insiste el periodista.
“Porque va a aplicar el ajuste con apoyo popular, culpando al gobierno previo.”
Como vemos, todas estas frases no tienen desperdicio. Calvo, desde su mirada a favor del establishment, está anticipando lo que va a suceder con un gobierno peronista kirchnerista. Lo interesante es que, al día siguiente, los medios de comunicación y candidatos kirchneristas no lo desmintieron. Al contrario, Página 12 le dedicó la tapa y todos explicaban que Calvo había puesto énfasis en que sólo Fernández y Cristina pueden garantizar la gobernabilidad, escondiendo que les faltaría agregar: “…y el ajuste”.
Guillermo Nielsen es el economista cercano a Alberto Fernández que más precisiones da acerca de que harían en caso de triunfar. Además de proponer devaluar y un off-shore para Vaca Muerta (ver notas al respecto), afirma que “tenemos FMI para rato. El programa prevé vencimientos tan irreales para 2021 en adelante que necesariamente se deberá pasar del stand by a un ‘programa de facilidades extendidas’ […] este tipo de acuerdos implica que el país tiene que hacer modificaciones de su política económica: la reforma del estado y la jubilatoria.” En una entrevista anterior había hablado de “ocho años más de FMI”.
Cómo suele plantear el dicho popular: “quien quiere oír que oiga”. Alberto Fernández y Cristina no van a hacer una política económica distinta a la que hoy llevan adelante Macri y el FMI. Continuará el acuerdo con el Fondo y, en el marco de una segura renegociación, se plantearán cláusulas más leoninas que las actuales, incluyendo las reformas laboral y previsional. Ambos, Macri y los Fernández, nos llevan al callejón sin salida de más miseria y saqueo. Por eso insistimos: la verdadera salida es votar al Frente de Izquierda Unidad, los únicos que planteamos que la solución es romper el acuerdo con el FMI y dejar inmediatamente de pagar la deuda externa, para volcar todos esos recursos a resolver las más urgentes necesidades populares.
Si no pagamos, el problema lo tiene el FMI
“A mi juicio, el Fondo Monetario está tan comprometido con Argentina que si Argentina dice “no te pago”, el Fondo se queda con un problema muy serio […] La Argentina es hoy para el Fondo la inversión más importante que tiene […] Si Argentina no le paga al FMI, el FMI se funde.” Son palabras del propio Guillermo Calvo.
Esto demuestra que es perfectamente posible repudiar el acuerdo con el FMI. Ellos son los que tendrán problemas, no nosotros.