Escribe Jorge Adaro, secretario general adjunto

El pasado 28 de noviembre se llevaron a cabo las elecciones en Ademys para elegir la conducción del sindicato para los próximos tres años. Se presentaron dos listas: el Frente Multicolor, actual conducción y la Lista “Unidad para luchar”. Los resultados fueron contundentes, el 88% de las maestras y maestros le dieron nuevamente el triunfo a la Multicolor.

Este triunfo significa ratificar el camino correcto hecho hasta el momento en los últimos seis años. Dos períodos donde fuimos construyendo una verdadera alternativa antiburocrática para enfrentar el ajuste del gobierno de Macri y de Larreta, a la vez que iniciamos un proceso de organización en las escuelas que poco a poco fue convirtiendo a nuestros sindicato en una referencia indiscutible para la docencia.

La política consecuente que hemos llevado adelante se plasmó en las luchas por el salario, en la pelea que dimos junto a los estudiantes desde el 2017 contra la Unicaba, el rechazo y el triunfo al impedir el cierre de las escuelas comerciales nocturnas y en la defensa de los concursos democráticos y por orden de mérito con la acción realizada hace un mes en el acto público de Primaria en el marco del paro de la docencia en la Ciudad.El 28 de noviembre se realizaron las elecciones de la combativa Comisión Directiva de Adosac Pico Truncado. Hace dos mandatos que está siendo dirigida por la Naranja-Docentes en Marcha, con Adriana Astolfo como secretaria general. Ahora será reemplazada por Daniela Pérez Feijoó, que encabezará la directiva acompañada por dirigentes que continuarán y nuevos que se incorporan. Esta vez, ante la gran labor realizada en estos años, ningún sector quiso presentar lista “opositora”, ni la Lila de la burocracia provincial de Pedro Cormack, ni las listas vinculadas al peronismo santacruceño. La directiva Naranja es un ejemplo de democracia sindical y combatividad, defendiendo el salario y la escuela pública, contra el ajuste provincial y nacional. Pilar del sindicalismo combativo con la Naranja Provincial, junto a las filiales de San Julián, Piedra Buena y los luchadores de Gallegos y demás ciudades. Damos nuestras felicitaciones a Adriana, Daniela y demás compañeras.

También es el aval de nuestros afiliados a la política de unidad y coordinación que nos fuimos dando durante estos años con los sindicatos y agrupaciones multicolores docentes de todo el país, con el acompañamiento constante a las luchas que se desarrollaron en las distintas provincias, enfrentando los ajustes de los gobernadores. Así acompañamos con presencia y aportes económicos a conflictos importantes como el de Neuquén con Angélica Lagunas a la cabeza en 2017, la enorme huelga de Chubut, la pelea de los docentes salteños, por nombrar algunos.

Además hemos consolidado nuestra participación en el Plenario del Sindicalismo Combativo, para seguir fortaleciendo un polo de referencia ante las claudicaciones de la CGT que dejó pasar el ajuste de Macri.

Ahora con Mariana Scayola, nuestra compañera de Lista de Maestres y Profesores, como nueva secretaria general tenemos el desafío de profundizar la organización de nuestros compañeros y compañeras en cada una de las escuelas, seguir decidiendo las medidas de lucha con un método democrático, con asambleas abiertas para afiliados y no afiliados e impulsando en cada escuela cada una de las resoluciones que en esas instancias se definan para seguir avanzando en convertir a nuestros sindicato en la nueva dirección de la docencia de la CABA.

Asumió un nuevo gobierno peronista con Alberto Fernández y Cristina. Sabemos que sin romper con el FMI no hay posibilidad que se resuelvan las más urgentes necesidades populares, entre ellas el colapso de los sistemas de educación y salud públicas. Esta nueva conducción de Ademys, además, tendrá que hacerle frente junto con el sindicalismo combativo al “Pacto Social” que pretende el nuevo gobierno junto a los empresarios, la burocracia sindical y la Iglesia. Pacto social en el que finalmente, como marca la historia, siempre terminamos perdiendo los trabajadores con más ajuste, mayores avances sobre nuestros derechos como el ataque a las cajas previsionales y la reforma jubilatoria o a los convenios colectivos. Confiamos plenamente en la clase trabajadora para enfrentar las peleas que se vendrán