El Partido Obrero, insólitamente, cuestiona la unidad antiburocrática del Encuentro Sindical Combativo de Atlanta. Pero sale a proclamar un giro en las elecciones de la CTA Micheli para “reforzar una construcción clasista” (Prensa Obrera N° 1314). Mientras en Neuquén, Santa Cruz y Mendoza hacen listas con el “michelismo” local, que de “clasista” y combativo” no tiene nada. Al mismo tiempo proponen un “Congreso de fusión” entre la izquierda y el movimiento obrero sin explicar de qué se trata. ¿Por qué? Porque es una cortina de humo para tapar su claudicación a la CTA.

Escribe: Luis Covas

Muchos luchadores siempre nos preguntan si la unidad del Frente de Izquierda peligra por los debates existentes. Desde Izquierda Socialista decimos que no. Mientras seguimos siendo patriotas del FIT, somos conscientes que tenemos muchas diferencias con los compañeros de PO y PTS. Lo que hacemos es combatir la autoproclamación que no ayuda a una mayor y mejor unidad.

Este tipo de actitudes, en el caso de PO, nos ha llevado a una polémica y a no actuar unificadamente en el movimiento sindical. Desde Izquierda Socialista, junto con los compañeros del PTS, apoyamos entusiastamente la iniciativa de los ferroviarios del Sarmiento y de los municipales de Jujuy, encabezados por el “Perro Santillán”, de convocar a un Encuentro Sindical Combativo en el club Atlanta que unió a diversos sectores sindicales combativos y antiburocráticos. Lamentablemente PO se negó a sumarse con el insólito argumento, de que la constitución de ese polo sindical combativo contribuiría al “desarrollo de un bloque político antagónico al Frente de Izquierda” (Prensa Obrera 1313, página 10, mayo 2014). Fundamentando que Santillán y otros componentes no son del FIT o no lo apoyaron electoralmente. Efectivamente el “Perro” Santillán ni apoyó electoralmente al FIT en octubre pasado ni se reclama trotskista. Pero el objetivo del Encuentro de Atlanta no es hacer un bloque político sino que se trata de un plenario sindical para discutir cómo coordinar fuerzas diversas para apoyar las luchas y enfrentar a la burocracia sindical. Hacía años que no se daba un plenario obrero de estas características. Constituir una mesa de unidad combativa nacional fue un gran paso. Poner como condición para una unidad sindical, como propone PO, que hay que ser del FIT, es de un sectarismo increíble. Más en un país en donde la mayor parte de los trabajadores no son aún de izquierda sino que vienen creyendo en el peronismo, un movimiento político patronal. Todavía hay miles de luchadores antiburocráticos que reivindican a Perón.

El giro oportunista de PO a la CTA

El falso cuestionamiento del PO esconde su claudicación a la dirección de la CTA. Critican al Encuentro Sindical por no ser del FIT, mientras su organización sindical, la “Coordinadora Sindical Clasista-PO”, se ha integrado a la CTA Micheli, que adhiere a posturas de centroizquierda. Embellecen las fraudulentas elecciones de la CTA argumentando que “se ha producido un impresionante reagrupamiento de la izquierda obrera y socialista” en su lista. Anunciando que enfrentan a la burocracia de Micheli, cuando en realidad han acordado constituir listas comunes con el michelismo en lugares como Neuquén, Santa Cruz y Mendoza. Definiendo en Neuquén como “michelismo combativo” (Prensa Obrera N° 1308) su acuerdo con el sector conducido por Julio Fuentes, el actual Secretario General de ATE nacional.

No hay ningún “reagrupamiento” del clasismo en la CTA, esto lo sabe cualquier luchador, sino una búsqueda aparatista de espacios, de sellos de la CTA, para seguir sosteniendo la autoproclamación del PO.

PO se llena la boca de “fusión de la izquierda y el movimiento obrero” y con esta postura de pacto con el “michelismo” ha sido el motor de la división del clasismo y de la izquierda en la CTA. Y boicotea el único reagrupamiento combativo y antiburocrático que existe que es el encuentro de Atlanta.

La cortina de humo del “Congreso de fusión”

Cuestionando al encuentro de Atlanta, PO ha salido a proponer que el FIT convoque a “un congreso de fusión de la izquierda con la clase obrera”. Esta fórmula puede sonar interesante a los oídos de algún compañero desprevenido. Pero, ¿qué significa esta propuesta? ¿Quiénes serían parte de este “congreso de fusión”? No se sabe, ni PO lo ha aclarado. Es que en realidad se trata de una simple cortina de humo para tratar de impactar a algún distraído, “corriendo por izquierda”, para seguir negando la importancia del encuentro de Atlanta y sostener su política autoproclamatoria, mezcla de sectarismo con oportunismo, como se ve con su “giro” a la CTA.

El debate está instalado. Mientras tanto seguiremos llamando a la dirección del PO a que abandone su postura negativa y se sume al Encuentro Sindical Combativo. Este es el único camino real de fusión de la izquierda con el movimiento obrero.