Escribe: Daniel Portalet

La semana pasada estalló el conflicto en la línea de colectivos 237 (partido de General San Martín) producto de la desinversión y vaciamiento llevado adelante por la patronal. En los últimos años los trabajadores venían denunciando que las condiciones de trabajo eran cada vez peores, producto de la falta de insumos que impedían el correcto mantenimiento de las unidades. De esta manera, los choferes se veían obligados a salir sin frenos o con las cubiertas lisas, poniendo en riesgo sus vidas y las de los pasajeros.

El pasado domingo la patronal terminó de llevar a cabo la tarea de vaciamiento. Vendió el 53% de las acciones a otras tres empresas y, en esa misma noche, se llevaron por la fuerza 23 colectivos (uno de ellos mediante una patota armada abordado cuando realizaba su recorrido).

Desde entonces, los empresarios nunca más se hicieron presentes en la terminal y 350 trabajadores se encuentran imposibilitados de trabajar. Desde Izquierda Socialista nos solidarizamos exigiendo: ¡basta de vaciamiento y desinversión! ¡Que se respete la fuente de trabajo! ¡Que las patronales declaren a dónde fueron a parar los subsidios millonarios que recibieron! ¡Que se hagan las inversiones necesarias para el correcto funcionamiento de los colectivos, así no tendremos que lamentar otra masacre evitable como la de Once!