Editorial: ¡No al ajuste!

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Para que la crisis la paguen los grandes empresarios, banqueros y multinacionales, no los trabajadores.Cristina Kirchner se destaca por sus frases célebres. Si las mismas fueran dirigidas contra los enemigos de los trabajadores, vaya y pase. Pero son mensajes que van directo contra el pueblo trabajador.

“El que crea que va a salvar su trabajo comprando dólares y dejando de consumir, está muy equivocado y lo va a perder”, sentenció en estos días. ¡Pero señora presidente! ¡Millones no dejan de consumir para comprar dólares (la mayor parte del salario va a alimentos y bebidas), sin embargo sufren el flagelo de los despidos y suspensiones! Hasta Caló de la CGT oficial reconoció 3.000 despidos en la UOM. El espía de la dictadura, ahora oficialista, Gerardo Martínez (UOCRA), reconoció que hay 20.000 despidos en la construcción. Cerró Estancias del Sur, un frigorífico de capitales brasileros, dejando a 540 familias en la calle en Unquillo, Córdoba. Paraná Metal de Cristóbal López suspendió a sus 152 operarios por tres semanas. Ahora cerró la importante gráfica Donnelley, obligando a sus trabajadores a ocupar la planta y ponerla a producir.

Cristina dijo a su vez, en relación a las medidas “anti despidos” que anunció (ver página 3): “Si no ponen (la plata) los empresarios ¿quién querés que la ponga si no es el estado?”. A confesión de parte, relevo de prueba. El estado (es decir usted, amigo lector) sigue destinando fondos en beneficio de las grandes patronales.

A esto hay que agregarle el rol que viene jugando el gobierno ante las suspensiones y despidos (con hechos, no palabras), para salvar a las multinacionales. Como la estadounidense Lear, que acaba de cerrar la planta por quince días. Allí, la Gendarmería, comandada por Berni-Cristina, reprimió nuevamente al servicio de salvaguardar sus intereses. Esto en complicidad con el gobernador Scioli, quien saludó el “arduo trabajo” de la fuerza represiva y dijo, “hay que cuidar a las empresas que invierten”. ¿Alguna vez se vio mayor felpudo de empresas negreras? Difícil.

La inflación, por su parte, sigue erosionando cada vez más los salarios y demás ingresos populares. Este “modelo inflacionario” sigue esquilmando a los de abajo. Los “precios cuidados” subieron un 17% en lo que va del año. Cae el consumo y suben los precios. Prueba del verso capitalista que dice que al “mercado” lo regula la oferta y la demanda. Argentina, después de Venezuela, es el país con mayor inflación del mundo.

Por eso este año la pérdida salarial, jubilatoria, de la asignación por hijo y planes sociales, será muy grande. Se han firmado acuerdos salariales del 26/28% y en cuotas, y la inflación será del 40%. El año pasado ocurrió algo similar. Y se da el caso de aumentos que no se pagan, como en Luz y Fuerza Buenos Aires.

A esto hay que sumar la brutal suba de las tarifas de agua y gas en Capital y provincia de Buenos Aires del 100 al 500%. Tarifazo que ya se viene dando en el interior. También subió la telefonía celular, entre tantos otros rubros. Un ajuste que el gobierno está profundizando. Diciendo que no se reabrirán las paritarias. Y que tampoco subirá el mínimo no imponible de Ganancias. Con lo cual, millones de trabajadores seguirán tributando ese ilegal impuesto al trabajo. La consigna K es clara: recaudar y recaudar para seguir cumpliendo con el pago puntual de la deuda externa a los usureros internacionales. Sean fondos buitre o no. En estos días se ha hecho el primer pago por u$s 642 millones al Club de París (gobiernos imperialistas), una deuda que viene de la dictadura, declarada ilegal y fraudulenta por el Juez Ballesteros en el año 2000.

Coinciden con este curso, tanto el gobierno nacional (en plena campaña electoral con sus candidatos presidenciales, Randazzo, Kicillof, Uribarri y el repudiable Aníbal Fernández). Y la oposición patronal. Massa, UCR, Macri, Binner, Carrió, acompañan el ajuste y la represión, y también están juntando votos. Si las encuestas le dan bajo al gobierno, esa mala noticia también impacta a los opositores. Una le da a Massa el 20%, a Macri el 11%, a Binner el 2,8 y a Carrió 1,4 (Clarín, 4/8). Todos mirando el 2015. La UCR coquetea con aliarse al PRO (mostrando la crisis de UNEN en el lanzamiento de Capital, donde se retiró del acto peleándose con Pino solanas); De la Sota se reunió con Eduardo Menem, Massa se pasea con radicales y binneristas. Y Scioli dijo “Dios me preparó para ser presidente”. Preparándose todos (oficialistas y opositores) para seguir gobernando en beneficio de las mismas patronales y el imperialismo para los cuales se gobierna hoy.

Ante ello, el Frente de Izquierda tiene una salida. Ha presentado proyectos de ley, y lucha, para que se prohíban los despidos y suspensiones; por un salario igual a la canasta familiar y el 82% móvil para los jubilados. El programa del FIT se pronuncia por el no pago de la deuda externa -para aumentar salarios, partidas en salud, educación, viviendas-; nacionalizar la banca y el comercio exterior; también el petróleo y el gas, y por la reestatización de las privatizadas bajo control y gestión de trabajadores y usuarios, entre otras medidas de fondo.

A su vez, como lo viene reclamando el Encuentro Sindical Combativo (ESC) -espacio de coordinación sindical encabezado por el “Pollo” Sobrero, “Perro” Santillán y otros dirigentes-, hace falta darle continuidad al exitoso paro general del 10 de abril. Pero la CGT Moyano, si bien viene anunciando un paro general, no le pone fecha. Hugo Moyano primero alegó, que era porque muchos trabajadores estaban de vacaciones. Pero ahora cuando los docentes bonaerenses volvieron y pararon esta semana con los Sutebas combativos ante la claudicación de sus dirigentes, tampoco fija fecha. Hubo paro bancario contra el impuesto a las Ganancias y pararía la Fraternidad el 20 o 21 de este mes por lo mismo, entre otras medidas. Hasta los operadores de cine pararon en Capital, así como los trabajadores de Intercargo en los aeropuertos, entre tantos.

Luego, Moyano alegó que sería tildado de “destituyente” si convocaba a parar en medio de la “pelea” del gobierno con Griesa. ¡Pero de esa forma está dejando pasar el ajuste, las rebajas salariales, el impuesto al salario y las suspensiones y despidos!

Hugo Moyano está más preocupado por dirigir al club Independiente, que por apoyar a los trabajadores. Y su hijo Facundo, por darle el apoyo a Sergio Massa, que por impulsar alguna medida de lucha. Denunciamos este “compás de espera” (para no decir tregua) de la CGT Moyano, al servicio de dejar pasar el ajuste. La tarea de los luchadores, trabajadores y el sindicalismo combativo es impulsar asambleas y plenarios de delegados para apoyar las luchas y exigir a la CGT Moyano y CTA Micheli un nuevo paro general de 36 horas con movilización a Plaza de Mayo para frenar el ajuste en curso, el ataque al empleo y el salario. Para que la crisis la paguen los grandes empresarios, banqueros y multinacionales, no los trabajadores.


Boudu con el dictador chinoBoudou

Que vaya preso

Mientras más se lo investiga, más casos de corrupción lo involucran. Ahora es por los papeles falsos de su auto de lujo, (el 08 del Honda CRX), al mejor estilo pirata del asfalto. Este liberal transformado en nac & pop sigue haciendo de las suyas, respaldado por la presidente. Ya se lo procesó como parte de una asociación ilícita para quedarse con Ciccone, la impresora de billetes y boletas del Frente Para La Victoria.

La oposición le hizo el vacío en la Cámara de Senadores reclamando el juicio político o su licencia. Pero nadie se pronuncia para que Boudou vaya preso. Ante cualquier sospecha delictiva cualquier persona puede terminar en la cárcel. Este corrupto, a pesar de haber usado su cargo público para delinquir, sigue en libertad. Reclamamos que vaya a la cárcel y devuelva todo lo que se robó.

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