Escribe: Laura Marrone • Diputada electa Izquierda Socialista/FIT 

El Frente de Izquierda viene enfrentando las políticas antiobreras de Macri en las calles y en la legislatura. Acaba de presentarse el proyecto de ley por Marcelo Ramal, diputado de PO por la banca del FIT, que propone la reducción de la jornada laboral por insalubridad para los puestos de enfermería en los hospitales públicos. Dispone la creación de 4 turnos diarios, un salario básico igual a la canasta familiar y la creación de una comisión integrada por trabajadores electos en cada hospital a fin de realizar un relevamiento de los puestos necesarios para cubrir las necesidades.

Con un básico de $1.814, los enfermeros están obligados a trabajar jornadas de hasta 10 y 12 horas para sobrevivir. Actualmente la planta de enfermería apenas llega a solo 8.000 trabajadores, lo que hace más insalubre el trabajo por recarga de pacientes. Sumado a las extenuantes jornadas, esto pone en riesgo la salud de los pacientes y de los propios enfermeros, cuyos promedios de vida están siendo más bajos que la media general.

Enfermeras y enfermaros han tomado en sus manos el proyecto y lo han acompañado con firmas a la Legislatura para su tratamiento, todavía en curso. Izquierda Socialista convoca a sostener en cada lugar de trabajo esta iniciativa como parte de la necesaria defensa de la salud pública y los derechos laborales.

A su vez, los niños de las escuelas públicas siguen sin vacantes para 2015. Pasó un año y el PRO no construyó ninguna escuela nueva para responder a la falta de vacantes en la zona sur de la Ciudad. Desde la bancada del FIT presentamos dos proyectos para construir 33 escuelas para evitarlo, sin respuesta.

La situación es más dolorosa cuando se constata que Macri se apresta a votar en la legislatura un proyecto de presupuesto para el año que viene que contempla $ 2.837.974.542 en subsidios para la educación privada, o sea 1 peso de cada 3 que destina a la pública. Izquierda Socialista, en los barrios y en la docencia, se organiza para reabrir la lucha del año pasado, exigiendo medidas de emergencia y a largo plazo, para que ningún chico o chica se quede sin vacante y por la supresión de los subsidios a la educación privada y su destino a la educación pública.