Abel Albino: El asesor medieval
Uno de los asesores en salud y desnutrición infantil del gobierno de Mauricio Macri es el mediático pediatra Abel Albino, titular de la fundación Conin. Recientemente realizó polémicas declaraciones a los medios, tras saber que estará al frente del Programa Integral contra la Desnutrición propuesto por el futuro presidente.
Albino dijo que “la homosexualidad es un problema” que podría estar determinado por “violaciones dentro de la familia” y consideró que “el recto es un órgano de expulsión, no de absorción”. También agregó que “la masturbación es una adicción. Condiciona, angustia, y hace llorar”, y que “el preservativo no sirve para prevenir el SIDA”. Todas estas expresiones van en contra de lo que la propia Organización Mundial de la Salud y la Sociedad Argentina de Pediatría han definido tras años de estudios científicos sobre sexualidad. Estos dichos fueron también rechazados por la Asociación Argentina de Educadores Sexuales.
Esto no sería un problema mayor si no fuera porque la “metodología Conin” que Macri y Albino proponen como modelo para alcanzar la meta de “hambre cero”, pone el eje en “la educación de la madre” del chico desnutrido en lugar de atacar las causas estructurales de este flagelo. Educación que, además, se realiza con estos conceptos anticientíficos y clericales ya descartados desde el siglo pasado.
Para Albino, el desempleo, los salarios de pobreza, el bajo presupuesto para comedores escolares y programas alimentarios, la contaminación de cursos de agua y tierras antes cultivables, o el avance de la frontera de la soja, no son la causa de la desnutrición de decenas de miles de niños. Para él, “la madre es el principal agente sanitario, es la base de todas las intervenciones que se desarrollan para la recuperación del niño, y es a través de ella que se busca la integración de la familia y de la comunidad”.
Sin atacar las causas primarias de la desnutrición que azota varias regiones de nuestro país, no habrá “hambre cero”, ni solución al problema de la mala alimentación en la infancia. Tampoco, obvio, ninguna “educación sexual” con estos personajes ligados al actual presidente que acaba de asumir.