No a los despidos

(Tiempo estimado: 3 - 5 minutos)

Pablo Ameida, Delegado General de ATE - Ministerio de Economía solidarizándose con los despedidos del Ministerio de TrabajoMacri arrancó profundizando el ajuste que estaba en marcha con el saliente gobierno kirchnerista. Despidió a miles de trabajadores estatales. Con lucha, muchos se revirtieron.

Escribe: Pablo Almeida Delegado general ATE Ministerio de Economía

Detrás de un discurso contra los “ñoquis” y amparado en el mar de precarización que dejó el kirchnerismo en el empleo público, el macrismo llegó a producir cerca de 18 mil despidos de trabajadores municipales, provinciales o del estado nacional. En el sector privado también los despidos comienzan a contabilizarse de a miles, se habla ya de 10.000.

La contracara de esta ofensiva es la pelea que damos los trabajadores. En muchas dependencias donde se pudo organizar la lucha se logró revertir gran parte de las pérdidas de puestos de trabajo. Es el caso de la Jefatura de Gabinete de Ministros de Nación donde se logró la continuidad laboral de más de 100 trabajadores precarizados a los que se intentó despedir bajo la figura de no renovación de los contratos. O de los trabajadores que prestaban servicios para la municipalidad de la Plata, que luego de la escandalosa represión lograron en una mesa de diálogo revertir casi la mitad de los 4500 despidos. También se revirtieron despidos en el Programa Primeros Años de Desarrollo Social y en dependencias del Ministerio de Justicia. Estos ejemplos puntuales dejan claro que se puede derrotar al ajuste. Voluntad de los trabajadores sobra, lo que falta es la decisión de los dirigentes sindicales para enfrentar los despidos con un plan de lucha unificado.

Vayamos a uno de los primeros argumentos del macrismo. ¿Es verdad que de esta forma están echando ñoquis, o sea, personas que cobran sin trabajar? No. El convenio laboral de los trabajadores estatales establece los mecanismos para advertir a quien no concurre a trabajar y, en todo caso, recién ahí tomar medidas disciplinarias si no justifica su inasistencia. ¿Por qué el gobierno no hace eso con los supuestos “ñoquis”? Macri, los gobernadores e intendentes buscan despedir a los trabajadores precarizados que hace años están con “contratos basura”. Una herencia de 12 años del kirchnerismo que, en vez de ponerlos en planta permanente, precarizó fuertemente el empleo público en todo el país. Y no son sólo los macristas, también se despide en municipios y provincias gobernadas por radicales y kirchneristas, como en Santa Cruz.

Si de verdad el gobierno nacional quisiera regularizar el empleo público debería pasar a planta permanente, como indica la ley, a todos los trabajadores precarizados. Por el contrario, Cambiemos se aprovecha de la precarización existente para despedir a miles de trabajadores, intentando sembrar miedo en el resto para que no levanten la cabeza frente a los atropellos. A su vez, en muchas dependencias han comenzado rebajas salariales por la vía de recortes de horas extras.

Con los despidos en el estado el gobierno también busca sentar las bases para que el sector privado use los puestos de trabajo como variable de ajuste. En las últimas semanas se supo de cientos de despidos en la constructora Austral de Lázaro Báez, más de 200 en la aerolínea Sol, en Cerámicas San Lorenzo y en petroleros privados. A esto se suma la situación de indefinición con respecto a miles de fuentes de trabajo en Cresta Roja. Es urgente organizar una pelea unificada para frenarlos.

Las centrales sindicales brillan por su ausencia. Caló y la burocracia sindical ligada al peronismo kirchnerista lejos de “resistir con aguante” como pregonaban, están absolutamente desaparecidos. Y Moyano, pese a que ha sacado un documento donde critica al gobierno, no convoca a la lucha.

La pelea contra los despidos no puede esperar. Hay que salir a enfrentarlos hoy. Exigiendo a las centrales sindicales que dejen de hacer la plancha y convoquen a una gran movilización contra los despidos como primer paso de un plan de lucha hasta derrotarlos.

Asambleas de trabajadores estatales ya se han pronunciado en ese sentido. En el Ministerio de Economía se votó por unanimidad la exigencia a las directivas nacional y seccional de ATE convocar a un plenario de delegados unificado para organizar la resistencia a los despidos de manera conjunta. Reclamo que se repitió en el importante acto unitario convocado por la Junta Interna de ATE Ministerio de Trabajo el pasado 14 de enero. Mientras llamamos a los dirigentes, delegados y luchadores a coordinar acciones para enfrentar el ajuste, como lo estamos haciendo entre los trabajadores aceiteros de Capital, la Seccional Oeste Ferroviaria, seccionales de ATE y de docentes combativos, entre otras organizaciones, convocando a un plenario para principios de marzo.

Es hora de salir al cruce del ajuste llamando a la más amplia unidad entre los trabajadores, más allá de cómo hayan votado en las pasadas elecciones. ¡Reincorporación de los despedidos! Pase a planta de todos los contratados. Ni un despido más. Que la crisis la paguen los de arriba, no los trabajadores.

Opina el lector

Nombre 
Mensaje 
Localidad 
Teléfono 
email