Contra la flexibilización laboral: Rebelión de trabajadores y jóvenes en Francia
Francia está viviendo una ola de huelgas obreras, manifestaciones juveniles, bloqueos de calles, rutas, puertos y aeropuertos con pocos precedentes por su magnitud y por la gran unidad de estudiantes y trabajadores contra el proyecto de ley de flexibilización laboral.
Escribe: Miguel Lamas
Las manifestaciones comenzaron en marzo con los más jóvenes, los estudiantes universitarios y secundarios y se fueron extendiendo y uniendo sectores de trabajadores en huelga. Como en el Puerto de El Havre, donde millares de trabajadores se unieron a los estudiantes el 24 de marzo y el 28 de abril. Las manifestaciones ocuparon las plazas en la llamada “noche en pie”. Después, se volvieron violentas ante la represión policial. El gobierno decretó el “estado de emergencia”.
La reforma laboral impulsada por el gobierno del presidente Hollande y el primer ministro Manuel Valls, ambos del Partido Socialista, dicen que sería para “crear empleos”. Pero la realidad es que facilita los despidos y más bien tiende a empeorar las condiciones de los empleos existentes. La ley busca destruir las conquistas obreras de los últimos 150 años. Entre otras cosas, elimina la jornada laboral de 35 horas semanales, si hay “acuerdo” obrero patronal, permitiendo llevarla hasta 45 horas. También liquida los salarios de convenio al dejarlos modificar con el “acuerdo” obrero patronal por empresa. Sabemos que el “acuerdo” es una ficción cuando el patrón chantajea con despidos, también enormemente facilitados por la reforma laboral. Esta es la llamada ley El Khomri (por el nombre de la ministra de Trabajo que la inventó).
Crisis política
El Partido Socialista está en crisis profunda. Si bien ganó las elecciones en 2012 con apoyo de la clase obrera contra la derecha de Sarkozi que gobernaba, muy pronto comenzó a ser repudiado por sus medidas de ajuste antipopular. Esta crisis profunda del PS -que hace muchas décadas no tiene nada de “socialista” porque es un partido acabadamente patronal- se manifestó en la masiva abstención electoral. En algunos barrios obreros llegó al 80%. En las elecciones locales de diciembre de 2015 sólo logró el voto de menos del 10% de los electores inscriptos.
El amplísimo movimiento popular provocó una fractura en el grupo parlamentario del Partido Socialista, por lo cual el proyecto no puede ser aprobado en la Asamblea Nacional. En este contexto el gobierno de Hollande utilizó una maniobra para impedir el debate parlamentario, apelando a una cláusula constitucional que permite la aprobación de la ley sólo con la moción presidencial.
¡Por la huelga general hasta derrotar la ley El Khomri!
Durante la semana pasada hubo acciones diarias de 7 sindicatos nacionales, en lo que constituye un proceso hacia la huelga general indefinida que es frenada por la burocracia, pero que se expresa en iniciativas desde las bases. Surgen acuerdos sindicales regionales que incorporan a los estudiantes y que disponen las acciones y huelgas pasando por encima de las conducciones obreras. En el Congreso de la CGT un 40% de los delegados propuso huelga por tiempo indefinido hasta derrotar la ley. Esto ya fue resuelto y está en desarrollo por varios sindicatos importantes: servicio público, choferes de larga distancia, choferes de Paris, refinerías, marinos y puertos, correos, aeropuertos, acerías, petroquímica y estudiantes secundarios. Recientes encuestas indican que el 70% de los franceses está en contra de la reforma laboral. Como lo dicen los compañeros del GSI, Grupo Socialista Internacionalista (UIT-CI), activo en las protestas obreras y estudiantiles, se puede ganar. Si se logra imponer la huelga general, la unidad en una sola acción nacional de trabajadores y estudiantes hasta hacer retroceder al gobierno y la patronal y así derrotar la ley El Khomri.