Estados Unidos: Rebelión contra nuevos asesinatos racistas

(Tiempo estimado: 2 - 4 minutos)

El asesinato de Crutcher provocó protestas en todo el paísAnte el gatillo fácil contra afroamericanos, otra vez hubo rebeliones en repudio en Carolina del Norte.

Escribe Miguel Lamas

Horas después de que se difundiera el video que muestra cómo un policía de Tulsa (Oklahoma) mataba a Terence Crutcher, un hombre negro de 40 años desarmado que llevaba las manos en alto, ocurrió otro asesinato policial de un hombre de 43 años, Keith Lamont Scott, que esperaba en su auto que su hijo saliera de la escuela de Lamont Scott en Charlotte, la mayor ciudad de Carolina del Norte. Su única “arma” era un libro.

“No le disparen, no le disparen, no tiene una pistola, no tiene una pistola”. Es una de las frases que repite la mujer de Lamont Scott, en un video publicado por The New York Times este viernes 23 de septiembre, que capta los segundos previos y posteriores al asesinato. Las autoridades locales se negaron a mostrar las filmaciones policiales.

En Charlotte se produjeron fuertes protestas esa misma noche y durante 4 días. Los manifestantes llevaban carteles con las leyendas “dejen de matarnos”, “sin justicia no hay paz”. Al menos 16 policías resultaron heridos en la protesta, además de decenas de otros participantes, y hubo decenas de detenidos. La ciudad fue militarizada y ocupada por la Guardia Nacional. Se declaró el toque de queda y la prohibición de la circulación nocturna.

Estos dos crímenes horrendos contra afroamericanos desarmados no son excepción en Estados Unidos. Sólo en el 2016, 120 negros fueron asesinados a balazos por la policía, y 100 de ellos no estaban armados. Cabe destacar que en Estados Unidos portar armas es legal.

Sam Sinyangwe, un joven afroamericano, hizo una estadística en base a datos oficiales sobre muertos a manos de la policía: “La gente negra es tres veces más propensa que la blanca a ser víctima de la policía en Estados Unidos. El año pasado, la policía mató a más negros desarmados que blancos armados. Y eso teniendo en cuenta que los negros son solo el 14% de la población”.

Candidatos racistas

Las nuevas protestas en Charlotte irrumpieron en plena campaña electoral. Elecciones donde más de la mitad de los ciudadanos norteamericanos dice que no cree en ninguno de los candidatos.

El republicano Donald Trump, suelto de lengua como siempre, declaró como buen racista que los disturbios de Charlotte se debían “a las drogas”. Es decir, culpó a las víctimas que protestaban y nada dijo de la policía.

Hillary Clinton, por su parte, no dijo una sola palabra de solidaridad con las familias de los asesinados, anunciando que iba a ir a Charlotte. Sin embargo no fue, porque la alcaldesa, también del Partido Demócrata, le dijo que “la ciudad no tenía recursos”. Evidentemente, Hillary fue avisada que no sería bien recibida por una comunidad indignada.

“Las vidas de los negros sí importan”

Así se llama el nuevo movimiento nacional por los derechos de los afroamericanos, que viene creciendo en los últimos años. La masiva pro- testa negra se metió también en el deporte. Colin Kaepernick , el “mariscal de campo” (quarterbach) de los 49ers, un equipo de San Francisco, se niega a cantar el himno y saludar la bandera de su país en protesta por la discriminación que sufren los afroestadounidenses. Kaepernick se queda sentado o se arrodilla cuando suena el himno norteamericano.

El gesto tuvo tanta repercusión que hasta se pronunció Obama, quien afirmó que el deportista “está ejerciendo sus derechos constitucionales”.

Kaepernick dijo que no podía “demostrar orgullo por la bandera de un país que oprime a las personas de color”. Lo mismo hizo la jugadora de fútbol Megan Rapinoe, quien se arrodilló mientras se entonaba el himno antes de un partido. Y el rapero afroestadounidense J. Cole usó la camiseta de Kaepernick durante uno de sus conciertos en Las Vegas para exhibir que apoya su causa.

En crisis económica y política, la “democracia” capitalista yanqui muestra su esencia. Pese a haberse maquillado en los últimos años con un presidente afroamericano, sigue siendo un país donde gobierna el capitalismo explotador y racista, especialmente con los negros e hispanos pobres.

Repudiamos estos nuevos asesinatos, apoyamos fervorosamente las movilizaciones por juicio y castigo, y llamamos a luchar contra el capitalismo impertialista que asesina y hambrea a millones.

Opina el lector

Nombre 
Mensaje 
Localidad 
Teléfono 
email