El 18 y 19 de octubre el gobierno nacional realizará el Operativo Aprender, bajo el argumento que servirá para evaluar el estado de la educación y la capacidad de los docentes. Pero quiere avanzar sobre la escuela pública y los derechos laborales docentes.

Escribe Guillermo Sánchez Porta

Todos los niños del país de 3° y 6° grado de primaria y 3° y 5° año de secundaria harían una prueba de “múltiple choice”, donde tendrán una pregunta con 3 o 4 respuestas posibles y deberán marcar con una X la que crean correcta. Este sistema es llamado de “evaluación externa”, ya que lo planifican empresas que nada tienen que ver con el ministerio de educación, directores o docentes que cotidianamente enseñamos en la escuela. Lo implementarán personas particulares y docentes que se anoten como “aplicadores”, pero estos docentes no lo harán con sus estudiantes, sino que el niño será evaluado por una persona desconocida.

Es muy importante explicar que este sistema destruye el objetivo pedagógico de que los alumnos entiendan, razonen, analicen y saquen conclusiones propias sobre los contenidos que se enseñan. Al contrario, ya han llegado a escuelas ejercicios preparatorios y con la intención de que a los niños no les vaya mal, se han dejado de lado los planes de estudio habituales para “entrenarlos”. Las preguntas serán las mismas para los estudiantes de cualquier ciudad del país, sin importar su contexto social.

Un ejemplo de esta aberración pedagógica es una pregunta que dice: “El fruto de una planta siempre contiene semillas. ¿Cuál de éstas no es un fruto? A- Naranja; B- Calabaza; C- Manzana; D- Apio”. Sólo el niño de tercer grado que haya tenido la oportunidad de tener en su vida extra escolar un apio, sabrá que no tiene semilla. Y quien nunca aún abrió una calabaza, no sabrá si la tiene o no. Esto no evalúa lo que se enseña en la escuela, teniendo más posibilidades los hijos de familias con mejores oportunidades socio económicas.

El verdadero objetivo del gobierno es culpar a los docentes de la crisis del sistema educativo, desconociendo la política de destrucción de la escuela pública y de caída del presupuesto educativo de los diferentes gobiernos.

También quiere poner un “ranking” de escuelas, calificándolas de 1°, 2° y 3° categoría. ¡Con este ranking entregará mayor presupuesto a las “mejores” y menos a las “peores”! Esto profundizará las diferencias y empujará a los padres a inscribir en escuelas privadas a los niños que no puedan entrar a escuelas de “primera”. Y quiere pagar salarios diferenciados a los docentes ¡Quienes aprueben más alumnos, cobrarán más!

Además, el gobierno entregará a las empresas encargadas de la evaluación externa el poder de modificar los contenidos educativos. Estas empresas ya lo están haciendo en países como México, Chile y Brasil, educando al servicio de los intereses de las multinacionales. El ministro Bullrich dice que habrá que educar “para el disfrute de la incertidumbre laboral, ya que seguramente en el futuro no habrá trabajos estables”.

Ante el creciente rechazo de docentes y gremios a este Operativo Aprender, Suteba presentó una impugnación en la justicia “por falta de docentes y aplicadores” y pidió se suspenda. Bullrich dijo que “con los gremios y docentes sólo debo discutir salarios y condiciones laborales, los contenidos los decido yo”, mostrando su carácter totalitario y de desprecio a docentes, padres y alumnos.

Llamamos a los docentes a seguir negándose a anotarse como aplicadores. A realizar reuniones con trabajadores, padres y estudiantes, para que esos días se boicotee la realización de la evaluación, no autorizando a la escuela a que cualquier persona ajena evalúe a su hijo. A los estudiantes secundarios y centros de estudiantes, a organizarse y negarse a entregar la evaluación. A los sindicatos a pronunciarse en contra. Que Ctera y demás gremios provinciales le den continuidad al plan de lucha contra el Operativo Aprender y la reapertura de las paritarias. ¡Defendamos la educación pública de nuestros niños y los derechos laborales de los docentes!

Techint evaluará a los docentes

Ernesto Rona, ex gerente de Recursos Humanos de Techint, fue contratado para diseñar un nuevo estatuto y sistema de evaluación docente en la Provincia de Buenos Aires. El funcionario, quien devengará un súper sueldo de 50 mil pesos mensuales, será la ficha de Vidal para imponer el ajuste en la educación.