Una razón fundamental para votar al FIT

Desde el año 2011 el Frente de Izquierda viene respondiendo a una necesidad planteada por todos los luchadores obreros y populares: que la izquierda se presente unida a las elecciones para enfrentar a los candidatos patronales.

Escribe Guido Poletti

Desde Izquierda Socialista siempre hemos insistido en la importancia de la unidad de la izquierda. Se trataba de un reclamo genuino: que los partidos de izquierda que aparecían unidos apoyando las luchas fueran capaces de hacerlo en un terreno mucho más difícil y hostil, el de las elecciones, donde los candidatos patronales ponen a jugar los millones que les “donan” las empresas y los medios de comunicación instalan a sus candidatos, invisibilizando y hasta ridiculizando a la izquierda.

Estamos orgullosos, desde Izquierda Socialista de haber sido los promotores, allá por 2011, del nacimiento del Frente de Izquierda. Con un claro programa de independencia de clase. Junto con el Partido Obrero y el PTS fuimos capaces de construir una alternativa política que primero pasó la trampa proscriptiva de las PASO y luego se fue transformando en una alternativa que demostró que el Frente de Izquierda es mucho más que los partidos individuales que lo componen.

El FIT fue ganando espacio, y gracias a la importancia de la unidad, conquistando diputados nacionales, legisladores provinciales y concejales en distintas provincias. En cada elección, otros partidos y grupos de la izquierda se fueron sumando, aportando en la medida de sus fuerzas y desde sus propias posiciones a la construcción del FIT. Ya hace cinco años que es común ver a sus principales dirigentes en los medios de comunicación, confrontando posiciones con los políticos patronales.

Apostar a la construcción y fortalecimiento del Frente de Izquierda no significa negar las diferencias entre sus propios componentes. Izquierda Socialista, el Partido Obrero y el PTS somos partidos distintos y muchas veces debatimos, incluso públicamente, ante las divergencias que surgen. Sin embargo tenemos clara la importancia de construir una herramienta unificada que le sirva a los luchadores a la hora de enfrentar a los candidatos patronales.

Lamentablemente, hubo algunas fuerzas políticas menores de la izquierda que no entendieron la relevancia de esta construcción unitaria. Hubo casos como el MST que mientras apostábamos al crecimiento y consolidación del FIT, se fueron con la centroizquierda. Así, formaron parte de Proyecto Sur (su principal dirigente Alejandro Bodart fue legislador por ese espacio) y de sus sucedáneos regionales (en Córdoba participaron de la alianza con Luis Juez, que actualmente está con el macrismo). Una vez que Proyecto Sur estalló, insistieron con otras construcciones similares de centroizquierda, por ejemplo con el partido de la entonces gobernadora kirchnerista de Tierra del Fuego Fabiana Ríos. Estas alianzas no se remitían solamente a lo electoral, ya que el MST también compartía espacios en la conducción de la CTA Micheli y no con el sindicalismo combativo.

Otras fuerzas de izquierda asumieron el camino del sectarismo y la división. Tal fue el caso del Nuevo MAS, que a lo largo de todos estos años le dedicó un espacio preferencial a criticar al FIT. O de Luis Zamora, “eterno” candidato solitario en la Ciudad de Buenos Aires, que siempre se ha negado a la unidad y de hecho divide el voto de la izquierda porteña.

En estas elecciones, ante el crecimiento y la referencia alcanzados por el FIT, tanto el MST como el Nuevo MAS conformaron una alianza con el objetivo de confundir y ver si pueden “rapiñar” votos. Toda su campaña es instalar que “ahora” hay dos alianzas de izquierda.

Somos claros: Frente de Izquierda hay uno solo. El de los que, desde hace seis años, venimos batallando y construyendo esta alternativa unitaria, enfrentando sin medias tintas a todas las fuerzas políticas patronales. Votar al FIT es votar también por aquellos que siempre batallamos por la unidad de la izquierda.

No te confundas | La unidad está en el Frente de Izquierda

Lamentablemente debemos poner este alerta. El MST y el Nuevo MAS, después de tener durante años políticas diametralmente opuestas, acordaron una alianza en base al único punto que los une: su oposición a la unidad de la izquierda expresada en el FIT.

No le negamos al MST y al Nuevo MAS el derecho a aliarse entre ellos o con quien quieran. Pero sí repudiamos que intenten “mimetizarse” con el FIT, apropiándose de su trayectoria unitaria. Arrancaron con el propio nombre: se pusieron “Izquierda al Frente”, por lo que cualquiera se da cuenta que es “Frente de Izquierda” escrito al revés. Luego eligieron “casualmente” el mismo color de boleta que el FIT y el mismo tipo de letra para el logo. Por supuesto todo esto fue avalado por la justicia electoral. Los partidos patronales agradecidos porque se generara confusión.

Se trata de una maniobra repudiable. Te invitamos a combatirla ayudándonos a fiscalizar para el Frente de Izquierda y a dar a conocer nuestra propuesta repartiendo nuestra boleta entre tus compañeros de trabajo, estudio o vecinos.