Santa Cruz: Alicia Kirchner, como Macri, ajusta a los docentes
Escribe Adriana Astolfo Secretaria general de Adosac Pico Truncado
Alicia Kirchner cerró 2017 aprobando un polémico “doble calendario”: el 1° de febrero debíamos presentarnos los docentes que hicimos paro y nuestros alumnos para “culminar 2017” y semanas después los alumnos cambiarían de docentes para “empezar 2018”. Un absurdo político, gremial y pedagógico.
Además, durante las vacaciones, Alicia pagó en cuotas y atrasado el sueldo y el aguinaldo, y sacó la resolución 066 que establece un presentismo para tratar de quebrar las huelgas docentes: un premio a la asistencia perfecta que otorga 3 puntos al título docente, muchísimo más de los que se consiguen anualmente por capacitación pedagógica. ¡Otra aberración! Para el gobierno kirchnerista es más valioso y merece un mayor puntaje un docente carnero, que soporta todo tipo de atropellos sin luchar, que un docente que hace cursos de perfeccionamiento. También dictó la resolución: 2.575 que anula acuerdos paritarios, despidiendo a 200 docentes por la implementación de la reforma en secundaria.
Con estas medidas, sumado a la falta de servicios de nuestra obra social, edificios escolares destruidos, el ataque al régimen de licencias y al Estatuto Docente y la negativa de recomposición salarial, el gobierno kirchnerista va en consonancia con la política de ajuste de Macri.
Nuestra agrupación Naranja Docentes en Marcha plantea la necesidad de cambiar el rumbo de la política gremial que la conducción provincial Lila sostiene en Adosac, que nos llevó a una dura derrota en 2017. Desmoralizó a miles de compañeros después de 105 días de paro levantando la lucha a cambio de nada, en un “gesto” a los gobiernos nacional y provincial, avalado por otras agrupaciones, como Tribuna Docente del PO.
Hay que abandonar la orientación gremial de enfrentar sólo el ataque de Alicia Kirchner, diferenciándolo de los ataques de Macri y Cambiemos, ambos son aliados en el ajuste. Hay que nacionalizar la lucha y tratar de salir del aislamiento en que nos mete la conducción de Ctera. Impulsamos organizar una campaña nacional docente de apoyo a Santa Cruz e instalarnos en Buenos Aires con una delegación para denunciar a Alicia y a Macri. Lamentablemente esto no fue impulsado por Cormack, secretario general de Adosac. Es fundamental cambiar el rumbo, bajo el riesgo de que la política Lila vuelva a desmoralizar y liquidar la lucha en 2018.