Escribe Mercedes Trimarchi- Diputada Izquierda Socialista
FIT y dirigenta de Isadora

En un nuevo aniversario del #NiUnaMenos decenas de miles de mujeres nos movilizamos en todo el país contra los femicidios y la violencia machista. Macri solo destina $8 por mujer por año para combatir la violencia de género. En 2018 este flagelo se cobró la vida de más de cien mujeres. A días de la sesión en el Congreso que decidirá sobre los proyectos de interrupción voluntaria del embarazo, nos pronunciamos por el al aborto legal, seguro y gratuito.

Hace tres años, el 3 de junio de 2015 marcó un antes y un después para el movimiento de mujeres en nuestro país. En aquella jornada, cientos de miles nos movilizamos para exigir que se terminen los femicidios bajo la consigna #NiUnaMenos que rápidamente se popularizó y se expandió por todo el planeta. Desde entonces, la fecha se incorporó al calendario de lucha de las mujeres y, como cada año, exigimos presupuesto para que se aplique la ley 26.485 de erradicación de la violencia de género. En 2018, el gobierno de Macri pagará 20.000 millones de dólares en concepto de intereses de la deuda externa, mientras que el presupuesto para combatir la violencia hacia las mujeres no llega ni siquiera a un tercio de ese monto (8 pesos por mujer). Por eso, uno de los reclamos fue la exigencia del no pago de la deuda externa y que esa plata se destine a combatir la violencia de género.
En Buenos Aires, la Plaza del Congreso estaba colmada y todavía varias columnas no habían salido del punto de partida de la convocatoria, la Plaza de Mayo. A lo largo de la avenida marcharon cientos de agrupaciones de mujeres, sociales y políticas a las que se sumaron muchas jóvenes y adolescentes que se fueron incorporando cuando salían de la escuela, al igual que muchas trabajadoras luego de la jornada laboral. En el escenario se leyó el documento que tenía los tres ejes centrales de la convocatoria. El primero, ligado a la pelea por el derecho al aborto legal, seguro y gratuito. El segundo, la denuncia al pacto de Macri con el FMI que es más ajuste, despidos y precarización para el conjunto de la clase trabajadora y sobre todo para las mujeres. Y el tercer eje retoma la historia del #NiUna Menos y denuncia que los femicidios siguen siendo cada 30 horas y eso es responsabilidad del gobierno.
Con el correr de estos años, las demandas del movimiento de mujeres se ampliaron. Ya no peleamos solamente para que dejen de matarnos, sino que denunciamos todas las violencias de las que somos víctimas. Y particularmente, denunciamos el ajuste de Macri y los gobernadores que nos afecta principalmente a las mujeres, las más pobres entre los pobres.

Isadora marchó en todo el país
Desde nuestra agrupación de mujeres Isadora fuimos parte de la movilización en Buenos Aires y en todo el país. En Córdoba, desde la tradicional esquina de Colón y Cañada, nuestras compañeras sostuvieron una bandera verde con el reclamo de aborto legal ya. En Tucumán, a la exigencia de presupuesto para combatir la violencia de género, debieron sumarle lamentablemente el reclamo de justicia por María Zelaya, del Frente de Trabajadoras, que murió tras haber sido atropellada por un taxista mientras reclamaba frente a la casa de gobierno más presupuesto para los comedores. En Rosario, la marcha fue el domingo 3 y terminó en un festival que reclamó por #NiUnaMenos y por el #AbortoLegal. En el resto del país también las movilizaciones fueron muy grandes, lo que refleja que el movimiento de mujeres se organiza y pelea nacionalmente con fuerza.
A días del 13 de junio, las mujeres reclamamos que sin #AbortoLegal no hay #NiUnaMenos. Por eso las inmediaciones del Congreso se tiñeron de verde al finalizar el acto con un gigantesco pañuelazo dejando bien claro que exigimos la aprobación del proyecto de ley de la Campaña Nacional por el derecho al Aborto Legal Seguro y Gratuito.