Instituto Próvolo de Mendoza: Cárcel ya para los curas pedófilos
Se inició el primer juicio oral por los casos de pedofilia del Instituto Próvolo, otro caso en la larga lista de abusos sexuales de la Iglesia Católica argentina. Hay que terminar con la impunidad de los curas pedófilos.
Escribe Malena Lenta, candidata a Legisladora CABA
El 18 de noviembre de 2016, Luis Batistelli, profesor de Lengua de Señas en el Instituto Próvolo para niños y niñas hipoacúsicos, fue la voz de quienes no podían hablar y se animó a denunciar públicamente los vejámenes que vivieron cotidianamente los niños y niñas en esa institución educativa religiosa, durante muchos años. Los abusadores sexuales y maltratadores denunciados fueron los curas Nicola Corradi y Horacio Corbacho, la monja Kumiko, el monaguillo Jorge Bordón, la exdirectora Graciela Pascual, la monja Asunción Martínez, el ex empleado Luis Ojeda y el ex administrativo y jardinero Armando Gómez, quienes actuaban en total complicidad.
En la actualidad, existen distintos procesos judiciales en curso de la misma causa abierta en el Instituto Próvolo. En el primero, Jorge Bordón admitió en un juicio abreviado su responsabilidad por once abusos sexuales con acceso carnal. En otro proceso, la monja Kumiko cursa prisión preventiva y se investiga la responsabilidad de la directora de la institución. Pero a comienzos de agosto se inició el primer juicio oral y público contra Nicola Corradi, Horacio Corbacho y Armando Gómez, imputados por “abusos sexuales y corrupción de menores” en donde se sostiene que al menos violaron a 29 personas, de las cuales una de ellas tiene cinco años en la actualidad. Aunque en este momento el juicio se encuentra en cuarto intermedio hasta el 14 de agosto por el desarrollo de una pericia para determinar la punibilidad de Gómez, la propia realización del juicio resulta un importante avance en la lucha contra la impunidad de la Iglesia Católica ante los casos de violencia sexual que son denunciados día a día. Con la anuencia del supuesto Papa “progre”, Francisco, la Iglesia actual persiste en el intento de esconder y proteger al ejército de curas pedófilos que forma en su institución. Ante las denuncias públicas que se dan en todo el mundo, como mucho argumentan que serán juzgados por la “justicia divina” como lo intentaron con los casos de la escuela Marianista de Caballito, el Padre Grassi y tantos otros.
Pero en el marco del avance de las luchas del movimiento feminista en todo el mundo, esta impunidad ya empieza a quebrarse, y en Irlanda, más de 400 pederastas fueron imputados en 2018.
La Iglesia Católica, se caracteriza por una doble moral que cada vez se hace más evidente. Porque mientras por un lado nos abusan, nos violan, rechazan el derecho al aborto, a la educación sexual integral y el uso de anticonceptivos; por el otro, apoyan dictaduras y reciben millones por parte del Estado para financiar a sus curas holgazanes y violadores. Además, manejan millones de pesos del Estado en sus instituciones religiosas educativas como el siniestro Instituto Próvolo, mientras se desfinancia a la educación pública. Por eso está hoy más vigente que nunca el llamado a la inmediata separación de la Iglesia y el Estado que se convirtió en una masiva reivindicación desde 2018 ante el nefasto rol de la Iglesia desempeñado públicamente ante el debate del aborto. Por eso hoy decimos basta de impunidad y cárcel ya para todos los curas pedófilos. Justicia para las niñas y niños del Instituto Próvolo.