Escribe Liliana Olivero, candidata a diputada nacional

Macri no gobernó en soledad. Lo hizo con la complicidad, entre otros, del gobierno de Schiaretti, que en el Congreso le aprobó todas las leyes y en Córdoba viene aplicando la reforma laboral “lugar por lugar”. Así lo hizo en las plantas automotrices como Renault, donde la burocracia del Smata firmó convenios especiales con recortes salariales, reducciones de jornada y un ataque a los convenios colectivos vigentes. De la misma manera ajustó a los jubilados con un recorte en la provincia aprobando la Ley 10.333, y le niega a los docentes y estatales la aplicación de la cláusula gatillo mientras endeuda cada día más a la provincia y subsidia a las grandes multinacionales que amasan fortunas y luego despiden y suspenden a los trabajadores.

Mientras las listas del Frente de Todos están llenas de burócratas como Pablo Chacón (Comercio) nosotros nos solidarizamos con los trabajadores de Minetti. En defensa de sus salarios y los puestos de trabajo exigimos que se prohíban los despidos y las suspensiones y que toda fabrica que cierre o despida sea estatizada bajo control de los trabajadores y usuarios. Acompañamos a las trabajadoras y trabajadores precarizados por el gobierno de Schiaretti y exigimos el pase a planta de todos los monotributistas, becarios y contratados que son el 40% de la planta estatal y festejamos junto al movimiento de mujeres que en nuestra provincia se conquistó la aplicación del protocolo de aborto no punible bloqueado durante años por el Portal del Belén, la Iglesia Católica y la “sagrada familia judicial”.

Llevamos adelante una gran campaña electoral contra las mentiras de Macri y las falsas propuestas de los Fernández. Recorriendo los barrios, lugares de trabajo y con una fuerte trabajo en la juventud trabajadora, escuelas secundarias y universidades para demostrar que la única alternativa para el pueblo trabajador es el Frente de Izquierda Unidad.