El 6 de marzo, mientras Macri inauguraba el ciclo lectivo en una escuelita de Volcán (Jujuy), cientos de miles de docentes en todo el país paralizaban las escuelas y salían a la calle. ¡Y hasta en Jujuy el paro era masivo! La marcha en Buenos Aires fue histórica: decenas de miles coparon la zona de Congreso hasta el ministerio de Educación, dándole una cachetada a las ilusiones del gobierno de quebrar a la docencia y enfrentarnos contra el pueblo. Impactaba la solidaridad de trabajadores y vecinos, que aplaudían, tocaban bocina y se sumaban al reclamo.
La Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo le quitó la personería gremial a la Asociación Gremial de Trabajadores del Subterráneo y Premetro (Agtsyp), personería que se había conseguido recientemente luego de años de ser resistida por la burocracia de la UTA.
La marcha del 7 de marzo fue multitudinaria, mostrando la bronca contra el gobierno. Pero el triunvirato cegetista se negó a ponerle fecha al paro y la marcha terminó en medio de un escándalo. “Poné la fecha”, fue el grito de miles esa tarde.
Escribe José Castillo
En los últimos días el gobierno de Macri viene recibiendo golpes durísimos. Centenares de miles se movilizaron en todo el país, uniendo la lucha docente, el acto de la CGT y las distintas actividades que se realizaron en el marco del paro internacional de las mujeres trabajadoras.
La masiva marcha del lunes 6 con más de 100.000 docentes en todo el país ha sido impactante. También crece el apoyo de padres y alumnos a la heroica lucha de los maestros. No es para menos. Macri, Vidal y los gobernadores le han declarado la guerra a los docentes y a la educación pública con un vergonzoso aumento de un 10% ahora y un 8 % en noviembre y pagos en negro. ¡Cuando los alimentos, el pan, la luz, el gas aumentan todos los días!
Lo mismo pasó con la masiva marcha convocada por la CGT el martes 7. Miles se movilizaron contra el ajuste, los despidos y el robo salarial y repudiaron a los dirigentes de la CGT que se negaron una vez más a ponerle fecha al paro. Y el 8 de marzo hubo centenares de miles de mujeres movilizadas en todo el país luchando por sus derechos como parte del paro mundial de mujeres.