Scioli, el felpudo de la Casa Blanca
Escribe: Juan Rivera
La semana pasada, Daniel Scioli aterrizó en Nueva York con el objetivo de “llevar tranquilidad y atraer inversiones”. Con los ojos puestos en 2015, busca congraciarse con el imperialismo. El gobernador bonaerense contó que allí destacó los avances del gobierno nacional “en el tema de las negociaciones con Repsol, el Club de París, la resolución en la Corte de EE.UU. por el tema de los fondos buitre y las negociaciones con el CIADI”. Destacando como “logros” lo que traerá más penurias para el pueblo.
Scioli se reunió con representantes de Chevron, Monsanto, Cargill, Coca-Cola, PepsiCo, JPMorgan, Exxon, Telefónica, BBVA, Microsoft, Toyota, Motorola, IBM, DirectTV y representantes de los fondos buitre NML y Fidelity. Más claro, agua.
En definitiva, Scioli fue a transmitirles que ante una eventual presidencia suya seguirá haciendo los deberes que dicta el imperialismo: pagar puntillosamente la deuda externa y mantener contentos a los capitales extranjeros.
Mientras el kirchnerismo denunciaba, a tono con las declaraciones de Maduro, una supuesta desestabilización en Venezuela impulsada por los EE.UU., uno de sus candidatos oficiaba de lamebotas de los yanquis.