Escribe: Atilio Salusso 

El joven dirigente político y gremial del peronismo bonaerense Facundo Moyano ha ganado notoriedad en este paro. Es diputado nacional, secretario general del sindicato de peajes (Sutpa) y máximo referente de la Juventud Sindical, corriente política enrolada en la CGT opositora que conduce su padre, Hugo Moyano.

Facundo Moyano trata de darle una cara nueva al sindicalismo que representa la burocracia sindical. Impulsa un proyecto de ley según el cual democratizaría la vida sindical. Sin embargo, como él mismo lo reconoció, es un cambio parcial dentro del apoyo general que hace del actual “modelo sindical argentino”, el mismo que enfrentan los nuevos luchadores. A su vez, Facundo Moyano enfrentó en el paro al sindicalismo combativo que se expresó en los piquetes, señalando que “la izquierda manchó el paro”. Cuando lo que hicieron el Encuentro Sindical Combativo y la izquierda fueron acciones en pos de asegurar el paro y reclamar un plan de lucha nacional, cosa con la cual Moyano no está de acuerdo.

A su vez, Moyano (h) aparece cercano al Frente Renovador de Sergio Massa, una variante patronal que aglutina a burócratas odiados como Héctor Daer de Sanidad, representantes de la CTA Yasky y Luis Barrionuevo; la esposa de éste, Graciela Camaño, ex ministra de Trabajo de Duhalde; el ex kirchnerista y representante de los banqueros, Martín Redrado, y Horacio De Mendiguren de la UIA, entre otros.

Saludamos que Facundo Moyano se haya solidarizado con el triunfo de la Bordó en la Seccional Oeste de la Unión Ferroviaria o que hayamos compartido el paro del 10. Pero discrepamos con su proyecto sindical y político. Debate que hay que seguir dando de cara a las nuevas generaciones de luchadores que quieren otro modelo sindical. Levantando nuestra postura por la independencia política de los trabajadores de toda variante patronal.