Escribe: Liliana Olivero

El 29 de julio pasado presentamos un proyecto de ley que plantea la emergencia habitacional y la construcción de planes de viviendas populares. Esta iniciativa, apoyada por distintas asambleas que luchan por la vivienda, expone no solo la solución ante la gravísima crisis habitacional, sino también a los distintos asentamientos populares y tomas de tierras que se dan en Córdoba.

Este flagelo se agrava por la política de Cristina, De la Sota y los gobiernos municipales que sub ejecutan los fondos de los planes existentes, favoreciendo la concentración de tierras en manos de especuladores inmobiliarios. En Córdoba faltan 350 mil viviendas, la situación se agrava producto del aumento de los alquileres, suba del precio de la tierra por los especuladores, la crisis laboral de los trabajadores producto de los despidos y suspensiones, y el empleo en negro. El proyecto plantea la expropiación de tierras y viviendas ociosas, tanto públicas como privadas, para ser destinadas a planes de vivienda, con la participación y control de las organizaciones que luchan por ello.

Esta herramienta no solo permitiría dar solución a la problemática social como la que estamos acompañando en Estación Juárez Celman -donde 500 familias se instalaron con carpas, sin agua ni luz, desde hace 90 días-, sino también ayudaría a reactivar la industria y la construcción que ya lleva miles de suspensiones y despidos.

Mientras Cristina se obsesiona en pagar la deuda y revolotean los buitres para cobrar, los trabajadores y demás sectores populares exigen y se movilizan por el derecho a la vivienda digna. Desde Izquierda Socialista decimos, plata para viviendas y no para la deuda buitre.