Santiago del Estero: 55 días de huelga docente ¡Que Zamora y Macri pongan la plata para salarios y educación!
Escribe Maximiliano Díaz Alomo
El gobierno kirchnerista de Claudia Zamora sigue mostrando su política antipopular y de ataque a la escuela pública y a la docencia. 55 días de paro pese a que la mayoría de los sindicatos docentes fueron cooptados por el gobierno y componen la traidora “Mesa de diálogo” (UDA, Sadop, AMET, Sutese, Simese, Aesya, Atese, etcétera). Aceptaron un miserable básico de $2.900 y un inicial con 7 sumas en negro dejando a miles de docentes “excluidos” del aumento, que cobrarían de $4000 a $5000. Liquidando las jubilaciones y achatando la escala salarial de modo que un docente con 20 años de antigüedad cobra lo mismo que el que se inicia.
Cisadems no aceptó y llamó al paro al que adhirieron la mayoría de los docentes, aun sin estar afiliados, con movilizaciones, carpas y un acto en la Ciudad de Buenos Aires (CABA). El gobierno descontó, reprimió, detuvo colectivos que iban a las marchas, encarceló y procesó a docentes mientras los burócratas de los gremios de la educación y de la CGT repudiaban nuestra lucha. Pero no lograron quebrarnos. Por eso Zamora tuvo que incluir en el aumento a los “excluidos”. Aumentó el inicial a $7800 e incluyó las cifras en negro en el pago del aguinaldo. Pero sigue negándose a abrir las paritarias y a blanquear las cifras en negro.
Zamora envió carneros a Termas (epicentro del conflicto) como “intervención pedagógica”. Pero los docentes y padres impidieron que entren a las escuelas. Tras dos meses de lucha hay desgaste, aun con el apoyo de la comunidad que se suma a las marchas y acciones y no apoya la campaña gubernamental contra los docentes. La falta de claridad de hacia dónde vamos llevó a que docentes vuelvan a clases o hayan decidido acciones individuales como huelgas de hambre y encadenamientos, logrando apoyo y solidaridad, cercados por la represión.
Es necesaria la más amplia democracia para la organización colectiva y unificada. Y nacionalizar el conflicto, obligando a que Macri deje de ignorarlo y también ponga plata. Ha sido un error de la conducción de Cisadems, en medio de tantas acciones y confusión, estar dos semanas sin asamblea general y no permitir que entren en ella docentes no afiliados, pilares de la huelga en sus ciudades.
Docentes en Marcha apoyó desde el primer día todas las medidas y acciones resueltas en las asambleas de Cisadems y reconoce que es el único sindicato que no se ha vendido al gobierno, hace asambleas y lucha, y venimos proponiendo que es el momento de un cambio en la lucha, para evitar su desgaste. Hay que sostener la medida y acompañarla por un gran acampe de docentes de todas las ciudades de Santiago frente al ministerio de Educación nacional en CABA, exigiendo que Macri intervenga y ponga el dinero para la educación en vez de eximir de impuestos a las megamineras y patronales del campo. Y buscar la intermediación de todos los sectores sociales de Santiago que dicen apoyar a los docentes para lograr que Zamora nos reciba.
Aún quedan reservas de lucha en miles de compañeros. Tenemos que impulsar asambleas en todas las escuelas, con los que estamos de paro y los que han regresado, para retomar la organización colectiva, sumarnos a la lucha y acompañar a los que están en huelga de hambre. Cisadems debe hacer asambleas abiertas todas las semanas para evaluar y definir los pasos a seguir, buscar apoyo de padres y estudiantes con petitorios y clases públicas, actos, marchas, festivales. Ensayar alternativas de lucha que sumen y unifiquen colectivamente, reclamando al gobierno provincial y al nacional que pongan plata para la educación pública, no para la fraudulenta deuda externa y los empresarios.