El pasado domingo 12 de junio se llevaron a cabo las elecciones para la intendencia de Río Cuarto. Después de 12 años perdió el candidato de la UCR a manos del PJ.

Ganó Juan Manuel Llamosas -el candidato del gobernador Schiaretti y De la Sota con el 46,5% de los votos- frente al candidato del oficialismo Eduardo Yuni (UCR-Macri) quien obtuvo el 32,7%. Una derrota del gobierno nacional, donde en las presidenciales del año pasado en esa ciudad Macri había obtenido el 70% de los sufragios.

Ganó el candidato del denominado “peronismoPRO” -de conciliación con el macrismo- que encarnan Schiaretti-De la Sota-Massa. Por eso De la Sota y el propio ganador Llamosas se encargaron de señalar que “no hay que nacionalizar la elección”, para desligar a Macri de la derrota.

La novedad la dio Pablo Rafael Carrizo (Respeto-MST) obteniendo dos concejales con el 9,22% (7.390 votos). Una fuerza local vecinalista fundada por varias ONG que centró su campaña en la “antipolítica” (no embistió contra los partidos tradicionales y pidió el voto para “hacer cosas para la gente”). Respeto se presentó con la personería electoral del MST-Nueva Izquierda. El MST nacional usa el buen resultado para mostrar que crece una “izquierda amplia” como la que pregona, cuando Respeto refleja una variante más de las ya conocidas de la “centroizquierda”.

En ese marco las dos listas de los partidos del Frente de Izquierda (PTS y PO) sacaron el 1,62% (1.303 votos) y 0,88% (706) respectivamente. El 2,5% en total. Desde Izquierda Socialista ya alertábamos antes de las elecciones sobre el “gran error que PO y PTS no hayan logrado conformar una lista única del FIT”, esencialmente por la política divisionista y electoralista de PTS (Del Caño-Bregman) que la obstaculizó. Esta división del FIT terminó perjudicando la elección de la izquierda.

A tal punto es el divisionismo que la candidata de PTS dijo que la elección fue “muy buena” porque su lista “venció a PO duplicando los votos” (Izquierda Diario, 13/6). O sea, para la candidata de PTS su “logro” fue ganarle al otro partido del FIT, no en brindar una alternativa unitaria para enfrentar a los candidatos patronales.

PTS hizo una campaña con costosos espacios en televisión y radios; afiches de Del Caño y la visita de la diputada Myriam Bregman. Sin tapujos Fantín (PTS) agregó: “tenemos ahora el desafío de seguir fortaleciendo el Frente de Izquierda” (ídem) precisamente cuando fueron solos.

Decíamos antes de los comicios con fecha 9 de junio (ver www.izquierdasocialista.org. ar): “[...] El PTS argumentó que ahora deberían encabezar ellos porque en las PASO presidenciales (Del Caño-Bregman) le ganaron a la otra fórmula (Altamira-Giordano). Desde PO e IS se aclaró que era un resultado de una interna presidencial y no para una lista local. Ante la cerrazón del PTS el PO propuso la posibilidad de dirimir vía una asamblea del FIT de Río Cuarto. Desde Izquierda Socialista lo consideramos como una salida si no se podía arribar a un acuerdo. El PTS la rechazó de plano, estancando la negociación. El tema se llegó a plantear en reuniones de coordinación nacional del FIT. Allí PTS volvió a mantener cerradamente su postura de sí o sí tomar la interna presidencial y no la relación de fuerzas militantes de cada organización en Río Cuarto. Ante ello PO e Izquierda Socialista plantearon que si ese sería el criterio a usar en otros casos y en especial en las próximas elecciones de 2017 podría ser una base para acordar. Lo que fue rechazado de plano por la dirección del PTS. Incluso señalando que donde el PTS perdió en las PASO como en Capital, Provincia de Buenos Aires y la misma Córdoba, no aceptarían ese resultado y volverían a usar las PASO. O sea, PTS exige usar los resultados de las PASO en Río Cuarto donde le favorecen pero donde perdió ya anuncian que no la van a aceptar. Esto es insólito y divisionista y cierra la discusión. Ni PO ni Izquierda Socialista podíamos aceptar este criterio desigual y abusivo [...]. En Río Cuarto llamamos a votar por Lucia Salazar y la lista de PO-FIT [...]”.

Llamamos a los trabajadores y demás sectores populares a sacar conclusiones de esta elección. A seguir enfrentando el ajuste de Macri que también aplican los gobernadores como Schiaretti y a fortalecer al Frente de Izquierda, repudiando las nocivas políticas divisionistas y autoproclamatorias.