Los trabajadores bancarios siguen peleando por la reapertura de su paritaria y la eliminación del impuesto a las ganancias sobre el salario. El gremio había pactado un convenio por el 33% que, incorporando sumas fijas, llegaba al 35%. Un 10% por debajo de lo que terminará resultando la inflación de este año. Por eso comenzaron a exigir la aplicación de la cláusula gatillo, que había acordado que si la inflación superaba lo firmado automáticamente se reabría la paritaria, cosa que la patronal ahora niega.

Después de varios ceses de tareas parciales y marchas por la city porteña, el miércoles y jueves pasado dejaron de atender al público en las tres últimas horas (de 12 a 15). Ante la falta de respuesta de las patronales bancarias, uno de los sectores que más ganó este año, anunciaron un paro total de la actividad para el próximo 28 de octubre. ¡Todo nuestro apoyo a los compañeros bancarios!