Brasil: Gran jornada de lucha
Fuertes huelgas y actos masivos marcaron el 15 de marzo ¡Es necesario seguir la lucha y construir ya una huelga general!, titula la declaración del Ejecutivo de CST-PSOL, organización de la UIT-CI en Brasil, que participó en primera línea impulsando los paros y los actos contra una reforma jubilatoria que exige 49 años de aportes y 65 años para jubilación “completa”. El gobierno de Temer en Brasil, similar al de Macri, está contra las cuerdas. A continuación un extracto de la declaración.
Escribe Miguel Lamas
El 15 de marzo fue una victoria para la movilización de la clase trabajadora y del pueblo. Trabajadores del Metro, conductores y metalúrgicos […], choferes […], profesores de la educación pública y privada de todo el país, trabajadores del Correo y de Construcción Civil, bancarios que pararon parte del día en varios estados, trabajadores estatales, federales y municipales, entre tantos otros, que participaron del 15M paralizando sus actividades.
Además de esas importantes huelgas, el 15M entra en la historia reciente como el mayor día de luchas de los últimos años […] las mayores manifestaciones, desde las jornadas de junio del 2013, y esta vez con un perfil claramente de izquierda […] Cerca de 200 mil en San Pablo, 80 mil en Rio de Janeiro, 80 mil en Belo Horizonte, 50 mil en Curitiba. En todas las principales ciudades del país hubo actos masivos, con inmensa participación de la clase trabajadora […] lo que mostró todavía más nuestra fuerza.
¡La reforma previsional del gobierno de Temer salió golpeada… pero no cayó todavía!
[…] Podemos decir que en el primer round nuestro oponente tambaleó, pero no cayó. Si continuamos pegando así, podemos nockearlo en unos pocos rounds. A eso apostamos.
Sin duda, el gobierno corrupto encabezado por Temer y por los “tucanos” (PSDB, Partido Social Democracia Brasil) salió golpeado […] debilitado […] Pero, en ausencia de una alternativa inmediata, los sectores mayoritarios de la burguesía todavía lo sostienen […]
Nuestra necesidad es construir una huelga general para enterrar los proyectos de reformas neoliberales que pretenden los ladrones instalados en el Congreso Nacional y en el Palacio de Planalto (Casa de Gobierno), y derribar a este gobierno.
La disposición de lucha y la indignación popular muestran la posibilidad de construir una huelga general. Porque además de las inmensas manifestaciones y las huelgas de categorías importantísimas como las del transporte y la industria, vimos también un amplio apoyo popular a la lucha contra la reforma jubilatoria. En la huelga de los trabajadores del metro de San Pablo […] eran aplaudidos cuando conversaban con la población sobre los motivos de su huelga […] lo vimos en las calles, adonde la inmensa mayoría de la población protestó o apoyó la protesta.
¡Exijamos de las centrales continuidad con la huelga general!
El 15M reafirma que existe, en la base de los trabajadores, una gran disposición para luchar, lo que coloca objetivamente la posibilidad de concretar la construcción de una huelga general, que paralice todo el país hasta que caiga el gobierno de Temer y sus reformas.
Pero, hasta ahora, lo que no permite que tengamos inmediatamente una huelga general, es que las direcciones de las centrales sindicales y de la mayoría de los sindicatos, no están a la altura de los acontecimientos. La CUT y la CTB ya fijaron su estrategia con eje en las elecciones del 2018, con la candidatura de Lula, ¡el mismo que hizo una Reforma Jubilatoria en el 2003! […] Nuestra estrategia es opuesta. Pues de hecho las huelgas del día 15 no fueron construidas por las centrales sindicales, que sólo organizaron los actos públicos y no los paros, que fueron preparados desde la base. Fue la fuerza de la clase trabajadora que empujó a las centrales a fijar un día de luchas […] Tenemos fuerza, sin duda, para exigir a las centrales que fijen de inmediato la fecha de la huelga general en Brasil […] Después del histórico 15M, exigimos que las mayores centrales sindicales llamen una plenaria nacional para debatir la continuidad de las luchas y la construcción de une huelga general. Desde ya en todas las categorías de trabajadores, los sindicatos deben fijar fecha de asambleas para hacer el balance del 15M y discutir la continuidad de las luchas […] Solamente paralizando por completo el país podremos echar al gobierno de Temer y derrotar sus medidas.
En las luchas construir […] un Frente verdaderamente de Izquierda, sin Lula ni el PT
Sabemos que es necesario luchar mucho para derrotar a Temer y sus reformas. Pero sólo la lucha no basta. Es preciso que los trabajadores construyamos una alternativa política para derrotar de una vez a la clase dominante y sus políticas.
Existe, en medio de las movilizaciones, una intensa disputa […] política […] Los burócratas sindicales montaron una platea para aplaudir a Lula en la Avenida Paulista. Tan luego él, que aplicó una reforma jubilatoria que eliminó derechos históricos de la clase trabajadora en el 2003.
Nosotros fuimos parte de los que se indignaron con la presencia de Lula en el acto. Un evidente oportunismo electorero, de tratar de meterse en una lucha que no tiene nada que ver con lo que fueran sus gobiernos [...] El mismo Lula que discursea en Avenida Paulista, negocia con sectores del PMDB (¡El partido de Temer! Partido Movimiento Democrático Brasileño), el apoyo a su candidatura en el 2018.
Necesitamos fortalecer una alternativa realmente de izquierda, un Frente de Izquierda que batalle contra los dos bloques burgueses que disputan influencia en el país, el encabezado por Temer y por los Tucanos, y el encabezado por Lula. Un Frente de Izquierda que esté al servicio de las luchas y de la batalla por una huelga general para derrotar la reforma previsional. Este es el papel que deben cumplir las organizaciones de izquierda como el PSOL, PSTU, PCB, MAIS y NOIS, entre otras organizaciones de izquierda, para ser alternativa y enfrentar al lulismo. En el acto de Río de Janeiro es muy importante destacar la columna unitaria del Frente de Izquierda, al lado de los compañeros del MAIS, NOIS, PCB y Comunismo y Libertad, a la que también se sumaron compañeros independientes.