Hace falta un plan alternativo al del ajuste de Macri: Plata para trabajo, salud y educación, no para la deuda
Escribe Silvia Scarfi
El gobierno de Macri está lanzando un duro plan contra los trabajadores y el pueblo, asegurando que esas medidas son necesarias para recuperar la economía. En realidad lo que busca es sostener las ganancias patronales, con medidas como los tarifazos ya anunciados, y pagar la deuda a los usureros. Izquierda Socialista propone en cambio se que empiece por no pagar la estafa de la deuda externa y volcar esos recursos a un plan que sirva a las necesidades populares.
Macri acaba de lanzar un conjunto de medidas económicas que incluye tarifazos, amenazas de despidos en el Estado, flexibilidad laboral, techo a los aumentos de las jubilaciones, liquidación de los convenios y otras medidas contra los trabajadores y el pueblo. Asegura que así van a crearse nuevos puestos de trabajo y se va a reducir la pobreza.
En realidad todas esas medidas, como las que ya viene aplicando, benefician a los usureros internacionales y a los grandes empresarios. Desde que asumió Macri ya endeudó el país en más de 100.000 millones de dólares, que incluyen vencimientos que llegan hasta dentro de cien años. En 2017 el gobierno va a terminar pagando 16.000 millones de dólares sólo en concepto de intereses. Y el año que viene los vencimientos crecerán más aún.
Por eso Macri quiere “reducir el déficit”, bajando jubilaciones y amenazando echar empleados públicos y cerrar reparticiones. Nosotros planteamos exactamente lo inverso.
Si en vez de pagar la estafa de la deuda externa a los usureros esa fortuna quedara en el país permitiría financiar un plan de obras públicas para la construcción de viviendas, hospitales y escuelas y todo lo que necesitamos. Lo que generaría miles de puestos de trabajo genuino y resolvería el problema del desempleo. Los jubilados cobrarían lo que les corresponde, el 82% móvil, y no las jubilaciones de miseria actuales. Y estaríamos en condiciones de volcar más fondos a educación, salud y vivienda.
Y si en vez de reducirle los impuestos a los empresarios se eliminara el IVA a los productos de la canasta familiar y se pusieran fuertes impuestos a los ricos, tendríamos más recursos aun para financiar un plan económico obrero y popular.
Mientras Macri habla de “reducir el costo laboral”, flexibilizando las condiciones de trabajo, bajando salarios y liquidando las conquistas de décadas establecidas en los convenios colectivos, nosotros planteamos que nadie gane menos que el valor de la canasta familiar (hoy estimado en 25.000 pesos) y que se termine con todo el trabajo en negro y la tercerización, haciendo que todos los trabajadores sean incorporados como trabajadores en blanco, de planta y el mejor convenio de la actividad respectiva.
Y mientras el gobierno de Macri avanza con su festival de tarifazos, favoreciendo a empresas privatizadas que brindan pésimos servicios, nosotros planteamos la reestatización de todas esas firmas y su puesta en funcionamiento bajo gestión de sus trabajadores y usuarios, para así garantizar efectivamente una prestación de calidad y con tarifas sociales.
En definitiva, desde Izquierda Socialista y el Frente de Izquierda proponemos un plan opuesto al de Macri, empezando por no permitir que los empresarios y los usureros se sigan beneficiando. Y en cambio volcar la plata que hay en el país a cubrir las necesidades de los trabajadores y el pueblo.