Escriben Federico Pelagaggi, secretario académico del Centro de Estudiantes de Filosofía y Humanidades (Universidad Nacional de Córdoba) • Nicolás Núñez, dirigente nacional de la Juventud de Izquierda Socialista

Mientras se escribe esta nota, a lo largo y ancho del país se siguen tomando nuevas facultades y otras se levantan. La pregunta que se impone es: ¿puede seguir luchando el movimiento estudiantil si termina la paritaria docente?

Desde la Juventud de Izquierda Socialista respondemos: tiene que seguir. Con tomas, vigilias, movilizaciones, asambleas, cortes de calle, lo que en cada lugar dé según las fuerzas con las que contemos.
Sin embargo, creemos que también y sobre todo es necesario responder otra pregunta: ¿cuál es el programa que tendría que seguir el movimiento estudiantil? Nos proponemos enumerar cinco puntos centrales por los que tenemos que continuar peleando.

1 • Plata para educación, no para la deuda, la iglesia y la educación privada. Abajo el pacto de Macri y el FMI. Por la más amplia unidad obrero-estudiantil.
El acuerdo con el FMI va de la mano del ajuste brutal al presupuesto educativo. Este año por ejemplo, el gobierno ya gastó el equivalente a 5 presupuestos universitarios en intereses de deuda externa. La inflación que va a superar por mucho el 40% va a carcomer el presupuesto profundizando la crisis de infraestructura que quedó manifestada en las escuelas del conurbano bonaerense. Hay que dejar de pagar la deuda y poner esa plata para el salario docente y resolver la crisis edilicia en todos los niveles educativos; para combatir la deserción necesitamos efectivizar un boleto estudiantil a nivel nacional; becas para alimentos y materiales de estudio; además de construir espacios de cuidado materno-paternales y comedores. Además, hay que dejar de financiar al dogma religioso y la educación privada, y poner esa plata en la educación pública, gratuita y laica. Luchemos codo a codo junto a todos los sectores en lucha hasta derrotar el ajuste de Macri y el FMI.

2 • NO al Plan Maestr@, la Secundaria del Futuro y la UniCABA. Por un sistema educativo único público, gratuito y de calidad con financiamiento 100% estatal.
A pesar de su discurso, los gobiernos kirchneristas sostuvieron la estructura heredada del menemismo del sistema educativo. A pedido de los organismos de crédito internacional en los 90’ se partió el sistema educativo nacional en mil pedazos, y las escuelas pasaron a depender de los gobiernos locales y no del Ministerio de Educación Nacional. Esto profundizó las desigualdades entre las provincias que tienen distintas realidades presupuestarias. Y también abrió camino a resistidos proyectos como en su momento fue el Polimodal en Provincia de Buenos Aires, o ahora la Secundaria del Futuro, la UniCABA en Capital y los distintos ataques a la formación docente. El macrismo con su Plan Maestr@ se propone pegar un salto en calidad en la mercantilización de la educación, yendo hacia el modelo estadounidense de rankings de escuelas que compiten por financiamiento privado, sumándole a eso las pasantías truchas. Hay que frenarlo.

3 • Anulación de la Ley de Educación Superior menemista (LES). No al Sistema Nacional de Reconocimiento Académico y la devaluación de los títulos universitarios. Por garantizar el ingreso y la permanencia del pueblo trabajador en la universidad pública.
La LES del 95’, vigente al día de hoy, es el delineamiento de un sistema universitario en que el financiamiento estatal se achica para que crezca el financiamiento privado, los “recursos propios”, en particular los convenios con empresas, los posgrados pagos y aranceles a extranjeros. De la mano de la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria (CONEAU) se busca moldear las carreras en función de las demandas del mercado. Macri profundiza ese camino. Con el discurso de que “se recibe poca gente” buscan achicar las carreras y promover las “minicarreras” o cursos específicos. Para eso buscan igualar universidades públicas y privadas con el Sistema Nacional de Reconocimiento Académico y la devaluación de títulos. Para Macri la universidad es o bien un privilegio o bien una mera formación de recursos humanos para las multinacionales. Defendemos que la universidad y la ciencia estén al servicio de responder a las necesidades del pueblo trabajador, no del gobierno y el mercado.

4 • A 100 años de la Reforma Universitaria, democraticemos los órganos de cogobierno. Elección directa de las autoridades, mayoría estudiantil, claustro único docente, voz y voto para los no-docentes. Por instancias de cogobierno en todos los institutos educativos.
Con la plata de los negociados que habilitó la LES se constituyó una gran casta de funcionarios en los rectorados y decanatos que cobran sueldos de cientos de miles de pesos y son los garantes del avance de la privatización junto a sus agrupaciones estudiantiles radicales, kirchneristas o peronistas. Algún rector puede eventualmente acompañar un reclamo salarial, pero todos son defensores de la LES. Parasitan en esos puestos gracias a sistemas de cogobierno antidemocráticos que pisotean la voz del claustro estudiantil. A 100 años de la reforma, seguimos diciendo que el “demos” universitario, la soberanía, debe estar en manos de las y los estudiantes, y seguimos criticando el “derecho sagrado” de los profesores a mandar. También exigimos la conformación de instancias de co-gobierno democráticas en todos los secundarios y terciarios para que cada estudiante pueda opinar y decidir sobre su educación.

5 • Por la plena implementación de la Educación SexuaI Integral. Por currículas que incluyan obligatoriamente la perspectiva de género. Basta de violencia de género en nuestros lugares de estudio. La “ola verde” que sacudió al país batallando por el derecho al aborto legal estuvo compuesta en gran medida por cientos de miles de estudiantes. Esa lucha tiene lugar también en nuestros colegios, institutos y universidades. Vamos por protocolos que resguarden a las víctimas y garanticen su permanencia en el estudio, con presupuesto para su puesta en práctica.
Luchemos por la separación de la iglesia del estado. Sigamos el ejemplo de las asambleas que votaron remover los símbolos religiosos de los lugares donde vamos a formarnos.

Universidad de La Plata 

Escribe Joaquín Caporale • Psicología UNLP

En la semana del 10 de septiembre el movimiento estudiantil universitario de La Plata decidió en asambleas tomar las facultades de Humanidades, Psicología, Bellas Artes, Trabajo Social, Naturales y Exactas. La rebelión estudiantil impuso las tomas en defensa de la universidad pública y gratuita, y contra el ajuste de Macri y el FMI. Las autoridades universitarias (radicales y peronistas) se oponen a las tomas. Así como también el gremio docente (Adulp), conducido por el kirchnerismo, que aceptó la miserable oferta salarial del gobierno y se ganó el repudio de los mismos docentes. También, la federación estudiantil (Fulp), que conducen kirchneristas, Patria Grande y PCR. Pero la decisión de luchar es más fuerte y todos fueron desbordados por el movimiento estudiantil en las asambleas. Ahora la lucha continuará en las movilizaciones junto a los trabajadores del Astillero y los docentes.

Universidad Nacional de La Matanza

Escribe Micaela Ucciferri • Estudiante de Unlam

El paro docente en la Unlam fue contundente. Pese a ser una universidad donde la persecución a los docentes combativos está a la orden del día, los profesores lograron organizarse y parar masivamente en un hecho inédito para una universidad controlada monolíticamente por el PJ de La Matanza, en la cual fue expulsado el anterior secretario general del gremio docente por ser opositor a la conducción de la universidad.
Pese al boicot de la conducción del centro de estudiantes (PJ) adicta a la conducción de la universidad, los estudiantes nos autoorganizamos en asambleas para apoyar el paro y decenas de estudiantes nos movilizamos de forma conjunta en la marcha universitaria del 30 agosto.
En la asamblea del pasado jueves votamos participar de distintas acciones junto a estudiantes terciarios y universitarios de la zona oeste y nos pronunciamos a favor de realizar un gran encuentro nacional de estudiantes que nos permita avanzar en la coordinación de la lucha estudiantil a nivel nacional.