El “milagro” de Alicia Kirchner
Escribe Gabriel Massa
Al visitar a Alicia Kirchner en Santa Cruz, Mauricio Macri se encontró con su “mejor alumna”. El diario La Nación incluso habla de “milagro” porque la provincia anuncia para 2019 un superávit de 1.440 millones de pesos. ¿Cómo logró con semejante crisis la “cuñada” Alicia este resultado? Ninguno ha dejado de pagar salarios y jubilaciones en tiempo y forma durante períodos tan prolongados. Ninguno ha atacado a los jubilados y trabajadores, en particular a los docentes y al pueblo, más que ella.
“A fuerza de ajuste y congelamiento salarial, la gobernadora Alicia Kirchner pasó de un déficit de casi 8.000 millones de pesos (al inicio de su gestión) a un superávit de 1.440 millones de pesos” previsto para 2019. […] “La Casa Rosada puso a la cuñada de Cristina Kirchner como ejemplo a seguir a la hora de ajustar”, dijo La Nación el 30 de enero.
Esto lo logró la “mejor alumna de Macri” sobre la base de la baja de los salarios. En 2017 fueron congelados, los docentes recibieron un 8% que durante seis meses el gobierno provincial se negó a pagar argumentando que la nación se había comprometido a hacerlo. En 2018 el aumento fue de 20%. Pero para los docentes solo fue un 13%. Para 2019 en el presupuesto provincial de 58.000 millones de pesos no hay previsto ningún aumento salarial ni de jubilaciones. Mientras tanto, los alimentos son hasta un 50% más caros que en Buenos Aires, en particular por el alto costo del transporte.
Al mismo tiempo aumentaron los ingresos de la provincia por lo que recibe en dólares por regalías petroleras, por el aumento de la coparticipación federal, la recaudación de impuestos y la mayor actividad económica en petróleo, minería y pesca.
La provincia cuenta con una planta de 80.000 asalariados, incluyendo empleados públicos, jubilados, docentes, policías, trabajadores de las distintas dependencias estatales, entre ellas los municipales. “Hay quienes solucionan esto –declaró la gobernadora– dejando afuera la gente, y ahí vienen los famosos despidos. Yo busqué la sostenibilidad del empleo”.
Pero la realidad dice otra cosa: en 2016, el primer año de gobierno de Alicia Kirchner, el empleo provincial cayó 9,4%, la mayor baja de puestos de trabajo de todo el país. Una de las primeras medidas fue achicar el personal en la Secretaría de Desarrollo, dejar sin trabajo a cientos de profesores de secundaria durante meses al no regularizar los ofrecimientos de cargos y cerrar cursos y salas de jardines.
Por otra parte, el congelamiento salarial no vale para la gobernadora y los altos funcionarios: en 2017 equiparó el salario de los altos funcionarios de su administración con el de los diputados provinciales (entonces era de 40.000 pesos) y en 2018 se otorgó a sí misma y sus colaboradores un aumento salarial de 40%. Para disimularlo, esto no apareció como un aumento salarial directo, sino que en mayo del año pasado todos los altos funcionarios fueron ascendidos a un cargo superior al que tenían (por ejemplo, todos los de rango menor pasaron a ser subsecretarios y secretarios de Estado).
Mientras tanto, en 2017 y 2018 los docentes protagonizaron 180 días de conflicto e igualmente se extendieron las luchas de los trabajadores del sector judicial, los empleados del Estado y los jubilados.
En abril de 2017 frente a la casa de gobierno hubo numerosas manifestaciones masivas en reclamo de un aumento que equipare los sueldos con la canasta familiar que fueron duramente reprimidas por el gobierno provincial para sostener el ajuste.
Si esto sucede en la provincia gobernada por los Kirchner y sus socios desde hace décadas, ¿qué nos espera a los trabajadores y el pueblo si vuelven a gobernar el país?
Una vez más esto demuestra que el peronismo kirchnerista no es la salida de fondo frente al ajuste macrista. La salida es la que propone el Frente de Izquierda y los Trabajadores, con un programa por el no pago de la deuda y la estatización de las principales palancas de la economía al servicio de las necesidades de los trabajadores y el pueblo.