La Rioja: Cárcel común al genocida Milani
Escribe Martín Ángel, hijo de preso político de la dictadura, candidato a diputado nacional
Estamos entrando a las últimas semanas del histórico juicio que se logró implementar en La Rioja contra el genocida General Cesar Milani, quien en su momento fuera nombrado por Cristina Kirchner como comandante en jefe del ejército.
Milani prestó servicios durante la década del ‘70 en el Regimiento de Montaña, ex Batallón de Ingenieros de Construcciones 141, lugar en el que funcionaba un centro clandestino de detención y donde miles de riojanos fueron víctimas del terrorismo de estado.
Actualmente se juzgan los secuestros y torturas a Pedro y Alfredo Olivera, a Miguel Ángel Godoy, la desaparición de Gabriel Minué, del reconocido periodista Plutarco Shaller, del soldado conscripto Alberto Ledo (que fue llevado a Monteros personalmente por Milani para hacerlo desaparecer), y de decenas de detenidos. Hay otros once imputados, junto al ex juez jederal riojano Roberto Catalán.
Las declaraciones han sido categóricas en mostrar a Milani a cargo de los operativos. Hasta los pocos testigos que presentó la defensa sólo lo complicaron más, ya que describieron otros centros clandestinos de detención en la provincia, que hasta entonces se desconocían.
En el juicio fueron echadas de la sala la Madre de Plaza de Mayo, Marcela Ledo y su hija Graciela, porque gritaron “traidora” cuando Milani leyó una carta de Hebe Bonafini apoyando al genocida.
El juicio muestra dos políticas opuestas en la lucha por verdad y justicia: el peronismo y el radicalismo no han apoyado el reclamo de cárcel a Milani y demoraron casi 40 años para permitir el juicio. Hubo denuncias contra el dirigente radical Julio Martínez, que presionó a los testigos que debían ir desde Sierra de los Quinteros para que no asistieran. Callaron cuando echaron a la familia Ledo. Ya en 2013 los diputados riojanos Beba Soria y Tere Luna votaron junto al kirchnerismo el ascenso a Milani. Fue impunidad ayer y es impunidad hoy.
Nuestra corriente, al contrario, mantuvo su coherencia y se reflejó en la declaración de nuestro compañero Omar Shaller, del PST, identificando a Milani en el secuestro de su familia y que fue acusado por Milani de “falso testimonio”. Y en la participación cotidiana en la campaña por cárcel a Milani y la radio abierta frente a Tribunales, con los militantes de Izquierda Socialista y el Frente de Izquierda Unidad. Ni olvido ni perdón. Por cárcel común a Milani y todos los genocidas.